¿Sabía que el primer capítulo de “Águila Roja” no gustó y se reescribió y rodó de nuevo?
Pilar Nadal, productora ejecutiva de “Águila Roja”, y Adriana Rivas, guionista de la serie, han descrito, en el marco del II Curso de Ficción de Globomedia y la Universidad Carlos III, los difíciles comienzos de esta producción y todas las modificaciones por las que se apostó hasta llegar a construir uno de los mayores éxitos televisivos de los últimos años, informa la productora en una nota.
“Pretensión de dar un giro a toda la ficción televisiva del momento”
En la segunda jornada del curso, Pilar Nadal comentó que “en el origen de ‘Águila Roja’ está la pretensión de dar un giro a toda la ficción televisiva del momento”, algo que según la productora ejecutiva, “era un reto y un riesgo porque no existía referencia en el mercado español que les dijera cómo iba a reaccionar el público”.
Teniendo en cuenta las premisas de “el espectador premia la originalidad” y “no hagas lo que ya está hecho”, se optó por crear una ficción histórica mediante una combinación del marco real de la Historia de España del siglo XVII y una ficción basada en las aventuras de un héroe justiciero.
Globomedia apostó por volver a escribir y grabar el 60% del primer capítulo
Pilar Nadal dio primerio contestación a esta pregunta: ¿cómo hacer una serie de aventuras y no morir en el intento?. Teniendo en cuenta que “nada es definitivo hasta que el capítulo está emitido”, desveló que Globomedia apostó por volver a escribir y grabar el 60% del primer capítulo. La máxima responsable de “Águila Roja” defendió esa forma de trabajar porque “el primer episodio es vital, si decepcionas no hay nada que hacer”.
“El lenguaje elegido no es un error, es intencionado”
La guionista Adriana Rivas explicó el proceso de creación del héroe desde el carácter al leguaje que utiliza. Por otra parte, contó que en el diseño de la serie se enfrentaron a muchas dificultades en cuanto a vestuario, maquillaje, decorados, etc. Uno de los aspectos más meditados fue la elección del tipo de leguaje. “No hay que ser hiperrealista”, comentan Nadal y Rivas. “En ‘Águila Roja’ se combinan expresiones de la época y formalismos con el modo de hablar actual, evitando palabras impensables de pronunciar en el siglo XVII. El lenguaje elegido no es un error, es intencionado”.
En la segunda jornada del Curso de Ficción organizado por Globomedia y la Universidad Carlos III intervino también Arantxa Écija, directora de ficción de Globomedia, junto a Julián Sastre e Iván Escobar, productores ejecutivos de “Aída” y “El barco”, respectivamente. En una mesa redonda analizaron la figura del productor ejecutivo, máximo responsable de las series de televisión en España. Iván Escobar partió de la máxima “Nadie sabe nada” para describir la situación cuando se presenta la idea de una nueva producción.
“El hecho diferencial de 'El Barco' es el propio barco”
En este sentido, recordó su propia experiencia cuando él y Alex Pina contaron a Daniel Écija, presidente del Grupo Globomedia, “un drama apocalíptico naviero cuando lo que estaba en boga era la comedia”. Sobre la serie, explicó que “todo se potencia en los escasos metros de eslora de los que dispone el Estrella Polar. El hecho diferencial de esta serie es el propio barco. Aventura, misterio, amor son los elementos fundamentales que, salpicados de comedia y toques familiares, hay que destilar. Y en ese proceso de destilación tiene que estar muy presente el productor ejecutivo”.
“Si ser comercial es querer llegar al público, nuestras series aspiran a serlo”
Por su parte, Arantxa Écija, directora de Ficción de Globomedia, defendió que “si ser comercial es querer llegar al público, nuestras series aspiran a ser comerciales”. Pero con una premisa que siempre debe guiar el trabajo en ficción: “No hay que perder el respeto al espectador”.
Écija destacó el alto nivel de la producción española de series. “Producciones como ‘Águila Roja’, ‘Aída’, o ‘El barco’ podrían trasladarse al mercado norteamericano. La diferencia es que los grandes presupuestos que se manejan en EEUU facilitarían la producción, pero lo que se vería dentro de la pantalla, en cuanto a personajes y tramas, sería básicamente lo mismo”.
Por último, Julián Sastre, productor ejecutivo de “Aída”, describió los numerosos imprevistos con los que ha de enfrentarse el máximo responsable de una serie a la hora de diseñar tramas, trabajar en exteriores o conjugar la disponibilidad de los actores con el ritmo de grabación de la serie. Coordinar todos estos elementos para lograr grabar cada capítulo y que tenga éxito es labor fundamental del productor ejecutivo.