'Dragon Ball Super' 1x44 Review: las travesuras de Goten y Trunks empiezan una nueva saga

Por Diego HidalgoDiego Hidalgo

(¡Cuidado SPOILERS!)

Da comienzo la saga de la Súper Agua Milagrosa del planeta Potof

Por ahora todas las sagas están teniendo algo de redundante en ‘Dragon Ball Super’. A la transformación de Super Saiyan Dios Super Saiyan y a las Súper Bolas de Dragón, ahora se le une un nuevo “súper término”: la Súper Agua Milagrosa del planeta Potof (Pot-au-feu, en idioma original).

Esta saga (o mini-saga) pienso que va a servir como paréntesis entre la pasada saga del Torneo Universal y la siguiente trama pesada. O no, quién sabe, también puede significar el inicio de algo todavía más épico que recupere el espíritu de ‘Dragon Ball Z’. Y es que con tan sólo un episodio ya se intuye una maduración y un aumento de nivel considerable, tanto en guión como en animación, haciendo recordar a lo mejor de ‘Dragon Ball GT’ o a la mini-saga de Garlick Jr de ‘Dragon Ball Z’, y todo ello, bajo un toque de buena OVA.

Monaka, Goten y Trunks, detonantes involuntarios de la nueva trama

Todo empieza cuando Monaka, el mensajero intergaláctico más “fuerte” del universo, entrega un paquete a Bulma. Una vez allí, como buena persona que es, le echa una mano a Bulma en el nuevo invento en el que está trabajando. Lo que no sabe es que se va a topar con los juegos de niños de Goten y Trunks, unos personajes que por fin van a tener el protagonismo que se merecen.

Los hijos de Goku y Vegeta se topan con la nave de reparto de Monaka aparcada en la calle. La curiosidad les puede, y trastean todo en su parte de atrás hasta que sacan de su envoltorio un muñeco hinchable que provoca el cierre de las puertas de la nave. Goten y Trunks se quedan encerrados allí, pero no pueden usar su fuerza para escapar para no meter en problemas al pobre Monaka, quien, más tarde entra en su vehículo y despega hacia su nuevo destino con los niños dentro.

Planeta Potof a la vista.

El misterio de Potof y de su Súper Agua Milagrosa

Potof es un planeta desértico, rocoso y aparentemente sin vida. Sin vida salvo la de Potage, un anciano maestro de artes marciales encargado de proteger la llave (con forma de chupete) que abre la caja fuerte que guarda la Súper Agua Milagrosa. ¿Proteger de quién? De unos criminales, liderados por Grill, que buscan conseguir el poder de esta agua.

La leyenda cuenta que ésta Súper Agua Milagrosa multiplica por mil los poderes de aquel que la beba, por lo que es del interés de Grill y sus planes de adueñarse del universo.

Goten y Trunks defienden a Potage de los villanos

Monaka aterriza en Potof para entregarle la revista mensual de artes marciales, ‘Peleas del universo’, a Potage, quien, noche tras noche se entrena para proteger el bien más preciado de su planeta. Una vez en tierra, se encuentra con Goten y Trunks congelados en su nave como consecuencia del largo viaje espacial.

Allí se chocan (literalmente) con Potage, cuando éste huye a toda velocidad de Grill y su banda. Cuando les alcanzan, Potage se dispone a luchar, pero realmente su fuerza no es demasiado elevada y es incapaz de plantarle cara a los “malos”. Menos mal que Trunks y Goten toman partido en el conflicto y les dan una buena tunda a los presentes, obligándoles a retirarse de allí.

En su huida, uno de los guerreros de Grill observa que la llave de Potage ha caído al suelo entre tanto revuelo. Discretamente, la toma prestada y, a su vez, hace rehén a un petrificado (por el susto) Monaka.

Grill bebe de la Súper Agua Milagrosa

Impotentes por no poder atacar por miedo de si le hacen algo a Monaka, Goten y Trunks se ven obligados a aceptar ser rehenes de Grill y los suyos. Atados de pies y manos, contemplan como Grill extrae de la caja fuerte/nevera el recipiente que contiene la Súper Agua Milagrosa. Cuando la abre y examina su interior, un grito de terror se apodera en Grill.

Como avanzaba Potage, el Súper Agua Milagrosa realmente no existe, su contenido atrapa a aquel que la haga libre. Potage se encargaba únicamente de que no volviese ese mal a la superficie de su planeta. Dicho recipiente contiene una masa viscosa de color fucsia que, rápidamente, se apodera del cuerpo de la banda de los villanos cubriendo enteramente su cuerpo.

El renacer de otro Vegeta maligno

En la Tierra, Bulma se da cuenta, por las cámaras de seguridad, que su hijo y Goten han viajado en la parte trasera de la nave de Monaka. Ésta hace llamar a Jaco para que les traiga de vuelta con su nave espacial, pero en seguida muestra su rechazo debido a que tiene mucho trabajo atrapando villanos por toda la galaxia. Menos mal que Bulma tiene un as bajo la manga y, a base de chantaje, logra obligarle. ¡Ah!, y también hará que le acompañe Vegeta intuyendo que ha habido algún problema. Qué poder de convicción el de Bulma…

Ya en Potof, Vegeta se une a la fiesta de Grill, que curiosamente es uno de los malhechores más buscados de la lista de Jaco. Ni con la Súper Agua Milagrosa sobre sus cuerpos la banda de Grill es rival para Vegeta, quien les fulmina en un abrir y cerrar de ojos. Cuando va a atacar a su líder, la masa viscosa también le atrapa a él al más puro estilo Buu, pero a diferencia de ésta, la Súper Agua escupe su cuerpo creando un nuevo ser a imagen y semejanza de Vegeta.

Con este movimiento se vuelve a recurrir uno de los deseos más explotados por los creadores de Dragon Ball al crear una nueva versión maligna de Vegeta como ya lo hiciera Babidí con Majin Vegeta; o Baby, con Baby Vegeta.

En el episodio 45 de ‘Dragon Ball Super’…

Vuelve Gotenks para enfrentarse al doble de Vegeta surgido por la Súper Agua milagrosa de Potof, quien parece que les pondrá las cosas muy difíciles. El verdadero Vegeta no puede pelear porque ha salido exhausto de la absorción, es decir, que Gotenks y Jaco, a quien vemos herido, deberán hacerle frente. A su vez, el cuerpo de Vegeta se derrite, ¿consumirá esto su cuerpo físico? Menos mal que aparecerá Goku avecinando un nuevo enfrentamiento, aunque sea de manera indirecta, entre Goku y Vegeta.