‘Jane The Virgin’ 3x18 Review: El espíritu de Carrie Bradshaw

‘Jane The Virgin’ 3x18 Review: El espíritu de Carrie Bradshaw

Por Betty M. Martínez

Estamos ya en la recta final de esta temporada. Y se nota. Los capítulos van ganando en intensidad. Esta semana hemos tenido una buena muestra. Hemos hecho algunas averiguaciones bastante interesantes, pero, como siempre, esos nuevos descubrimientos nos han llevado a situaciones totalmente inesperadas. Y en medio de todo esto, un merecido homenaje a una serie imposible de olvidar: ‘Sexo en Nueva York’ (‘Sex and the city’).

¡¡CUIDADO SPOILERS!!

Una gran oportunidad para Jane

Jane ha estado bastante ajetreada esta semana, así que vamos a empezar por lo profesional. Recordáis que Jane publicó la novela sobre su historia con Michael, ¿verdad? Y supongo que también recordaréis a Jeremy, el editor, el fan de las onomatopeyas. Pues bien, Jeremy ha conseguido que Jane pueda colaborar en ‘Cosmopolitan’ escribiendo una columna sobre “cómo salir con hombres siendo viuda a los 28”.

Soy incapaz de describir la alegría que se llevó Jane al recibir la noticia. Solo diré que ella misma se vio perfectamente reflejada en el personaje de Sarah Jessica Parker. Perdón, corrijo, Jane Gloriana Villanueva se sintió por unos segundos como Carrie Bradshaw, ducha de autobús incluida.

Al margen de ese guiño a la columnista más famosa de la televisión (hasta ahora), el hecho de que Jane no se planteara ningún conflicto ético, moral o emocional sobre escribir sobre su vida nos revela el gran cambio que ha sufrido nuestra protagonista. Hace una semanas casi pierde la oportunidad de publicar su novela por no querer hablar de su intimidad y ahora está dispuesta a contar todos los detalles de sus citas. Bueno, los más importantes, que estaría bien que Alba pudiese leer las columnas sin que le diese un infarto.

Además, esa oportunidad le llega en el mejor momento. Justo cuando ha empezado a “salir con hombres siendo viuda a los 28”.

Lo importante de estar en la misma página

Yo ni soy Carrie Bradshaw ni Jane Villanueva, así que pido un poquito de comprensión antes de leer mi resumen de la relación entre Jane y Fabián. La verdad es que no sé por dónde empezar. Fabián tiene el don de descentrarme y no es por su atractivo. No seáis malpensados. Es que nunca sé qué esperar de él.

Teníamos muchas expectativas en la segunda cita porque la primera fue estupenda, pero ha sido ¿cómo lo digo? ¿sorprendente? ¿decepcionante? ¿aburrida? A ver que todos sabemos que a Jane le fascinan los libros, pero, seamos claros, no es el tema ideal para una noche romántica. Y menos cuando se tiene la sensación de que estás en clase y no en una cita. Fabián, de verdad, has roto todos los esquemas preestablecidos sobre los galanes de las telenovelas.

En ‘Jane The Virgin’ todos los detalles tienen su importancia. Y si nos plantearon la más aburrida de las citas tenía que ser por algo. Y lo fue. Sirvió para que Jane dejara un par de esas frases que dejan pensando un buen rato. Primera frase: “quiero comprobar que no te gusto solo por mi cerebro”. Segunda frase: “¿Te sientes atraído por mí?”. Esas dos frases darían para una review completa o incluso para un estudio de género.

Pero eso tendrá que quedar para otro día porque justo después de esa segunda frase, comprobamos que a Fabián sí le gusta Jane. Físicamente, quiero decir. Es más, estuvimos a punto de corroborarlo, pero Alba los interrumpió. No penséis mal. No tiene el poder de la adivinación (todavía) y no se inmiscuyó a propósito. Es que Mateo tenía una pesadilla y quería a su mamá.

Después de ese amago de “intimidad” asistimos a lo que podría definirse como un enredo 100% telenovelero. Voy a hacer un resumen muy resumido para no fastidiar demasiado la historia. Digamos que Jane fue a casa de Fabián dispuesta a rematar lo que habían empezado la noche anterior, pero acabó cenando con la abuela de Fabián. Después vimos como el astro de las telenovelas se vio imbuido por el espíritu de Tom Cruise y saltó sobre un sofá gritando su amor por Jane.

Visto el panorama, Jane decidió poner tierra de por medio y dar por finalizada su relación con Fabián. ¿Por qué? Porque no están en la misma página. Fabián quiere una relación y Jane quiere un rollito. ¿Cómo podemos llamar a eso? ¿Incompatibilidad de objetivos?

Eso sí, tengo que decirlo y el que no haya visto el capítulo que se salte el párrafo. Al final consiguieron estar los dos en la misma página. Y por lo que nos han dejado ver, me parece a mí que la lectura fue muy satisfactoria para ambas partes. Los que habéis visto el capítulo, me entendéis, ¿no?

¿Qué es artificial?

Decía más arriba que Jane había tenido un capítulo ajetreado. Ya la hemos visto como profesional y como mujer, ahora le toca a la mamá. Y ha tenido que enfrentar un momento delicado. Resulta que Mateo le ha preguntado qué significa artificial porque un niño del colegio le contó que sus padres decían que él era “artificial”. ¿Cómo se le explica a un niño de tres años que fue engendrado por inseminación artificial y por error?

La situación era complicada porque Mateo añadió una segunda pregunta: ¿cómo se hacen los bebés? Jane es una mujer de recursos y consiguió salir del paso, pero, sin duda, el momento más especial es cuando ella y Rafael le cuentan a Mateo cómo llegó a sus vidas. Y, sí, Mateo, fuiste algo parecido a un milagro, gracias al que se nació una gran familia: los Villanueva Solano De la Vega y todos los espectadores de ‘Jane The Virgin’.

Hablando de Jane y Rafael, ya sé que Jane ha pasado página del TeamRafael y que Rafael quiere darse otra oportunidad con Petra, pero, ¿de verdad soy la única que ve algo especial cuando están juntos? ¿Vivo demasiado anclada en el pasado? En serio, a mí me da la impresión de que a Jane no le hace mucha gracia que Rafael y Petra vuelvan a ser pareja.

A todo esto, señores guionistas, queremos saber ya qué piensa Petra de la propuesta de Rafael, que nos han tenido todo el capítulo con el alma en vilo. Primero, el móvil sin batería. Después, Chuck y sus explicaciones. Y para terminar, la policía. Resumen: a esperar toda una semana para conocer la decisión de Petra.

Nos vamos de boda

Y después de la Jane profesional, mujer y madre, llega la Jane hija, que está hiper-mega-super-feliz de que sus padres se casen… de nuevo. Lo que no entiende (ni ella ni nosotros) es que no quieran hacer un gran boda. A ver, una cosa es que no quieran un gran festín y otra cosa es que se quieran casar en un juzgado y que la novia ni se compre un vestido nuevo. Eso no es una boda ni es nada. ¿Cómo se va a casar así Rogelio de la Vega? En serio, ya nos perdimos la primera boda (recordemos que ni ellos mismos la recuerdan), así que no vamos a tolerar que se repita la situación.

Nosotros queremos una gran boda. Jane quiere una gran boda. ¿Por qué los novios no quieren una gran boda? Porque no quieren que Jane sufra al recordar la suya con Michael. Y aquí me quedé sin argumentos y sin ganas de discutir. De Xiomara y Rogelio se podrán decir muchas cosas (buenas, malas y regulares), pero nunca nadie podrá acusarlos de ser malos padres. Estaban dispuestos a renunciar a la boda de sus sueños con tal de no hacer sufrir a su hija.

Menos mal que Jane ha dado un paso adelante y ha conseguido que cambien de opinión. Señoras, señores, preparen los vestidos de gala, los zapatos de tacón estratosférico y los bolsos a juego porque nos vamos de boda. Esta vez solo pido a los señores guionistas que nos la dejen vivir sin sobresaltos. Por favor, solo esta vez. Déjennos disfrutar de la ceremonia, el convite y el baile sin disgustos. Por favor. Por favor. Iba a seguir escribiendo “por favor” un par de líneas más, pero ya he desistido porque ya han dejado caer que se acerca una tempestad, aunque todavía no sabemos por qué.

Y tengo que decir una última cosa sobre el homenaje que ‘Jane The Virgin’ ha hecho a ‘Sexo en Nueva York’. Señores guionistas, ya saben que no tengo problema en criticarlos cuando considero que se equivocan, pero también reconozco sus méritos. Y esta semana la escena de la pastelería ha sido brillante. Creo que si hubiera cerrado los ojos hubiera sido capaz de trasladarme al Nueva York de Carrie, Samantha, Miranda y Charlotte. Además, la caracterización de los personajes ha sido de lo más acertada. Eso sí, un detalle, Jaime Camil, me gustaría mucho saber qué le ha parecido a Salma Hayek que Charlotte De la Vega le pusiera su nombre a su perrita. Sé que es una anécdota sin importancia, pero me da a mí que va a ser uno de esos detalles que voy a tardar en olvidar… si es que lo consigo.

En fin, que nos queda casi nada para decirle adiós a esta temporada y los cliffhangers de cada capítulo no hacen más que subirnos la tensión. A este paso yo voy a acabar la serie medicándome para la hipertensión.

Sobre este blog

Etiquetas
stats