'The Affair' 2x10 Review: un desliz con consecuencias (visión femenina)
Por Cristina A. AlonsoCristina A. Alonso
Si recordáis la temporada pasada de 'The Affair' solo hubo diez episodios y en esta vamos a tener dos más, nos acercamos a la season finale con muchas dudas sobre el asesinato de Scotty.
(¡Cuidado Spoilers!)
Amor o éxito
Tras casi un año desde el último episodio, Noah (Dominic West) está con una psicóloga para hacer terapia de pareja. Gracias a que Alison falta ese día podemos profundizar en los pensamientos de Noah, pero no, que abra su corazón no hace que lo odiemos menos.
Los Solloway están oficialmente divorciados, así que Noah y Alison ya pueden casarse pero eso su prometida aun no lo sabe. Noah tiene dudas, no solo por la actitud de Alison-ya que él piensa que le guarda rencor por llegar tarde al hospital- sino por sus propios miedos. Ni siquiera él confía en sí mismo.
La psicóloga (Cynthia Nixon) hurga en su pasado y por lo que vemos en la sesión y lo que ya conocemos, Noah tiene un gran dilema en su vida, se debate entre ser un buen marido y padre o ser un gran escritor ¿qué es lo más importante? ¿Por qué o quienes quieres ser recordado? Parece que tiene que elegir entre sus logros o las personas que le quisieron. Noah se compara con otros hombres que triunfaron pero fueron infieles ¿Por qué renunciar a lo que se quiere?
La terapeuta consigue que Noah le confiese la que él llama “casi” infelidad con Eden y es que el escritor no parece dispuesto a renunciar a lo que le apetece.
Para que nadie se pierda cuando volvemos al presente el color de la serie cambia, por si el flequillo de Helen no era suficiente. El juicio ya ha comenzado y veremos que se saca el abogado de Noah de la manga para defender a su cliente.
Un desliz con consecuencias
Alison ha vuelto a la Universidad para estudiar medicina pero se le hace más difícil con su bebé por lo que está pensando en dejarlo. En este caso Alison antepone su faceta de madre a realizarse profesionalmente, algo más común en las mujeres y algo que ni siquiera se plantea Noah. Cerca de su casa, Scotty la espera para proponerle comprar el Lobster roll aprovechando que Oscar está en quiebra.
Su ex cuñado quiere abrir un club nocturno en Montauk y está dispuesto a presionar a Alison hasta el punto de tener un comportamiento agresivo. Scott sigue enfadado por lo que escribió Noah sobre su familia. Joannie, la hija de Alison, aparece en escena y por lo visto su parecido con Cole es tan asombroso que con solo verla Scott ata cabos y se da cuenta de que es su sobrina y Noah no es el padre.
Alison va al encuentro con Cole que ahora vive en Nueva York donde Luisa es la encargada de un restaurante. Cole pone al día a su ex de su vida y le cuenta, en español, que se va a casar. Parece que Alison quería contarle que Joannie es en realidad su hija pero se raja y simplemente le cuenta que ha visto a Scotty, algo que al ex taxista ya no le importa desde que ha decidido pasar de su hermano.
El encuentro entre Alison y Luisa es bastante frío, sobre todo por la prometida de su ex que no parece tener ningún afán de entablar una conversación.
Noah convence a Alison para que dejen la terapia, y no sabemos si es lo mejor, por ahora parece que ambos quieren conservar sus secretos, ocultar sus mentiras y rumiar sus miedos. Algo que a vista de los últimos descubrimientos del abogado del escritor van a ser desvelados muy pronto.
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