La directora y protagonistas lo achacó a cuestiones narrativas y de producción

Aina Clotet denuncia en un duro comunicado que Leticia Dolera rechazó rodar con ella embarazada

Redacción

El rodaje de Déjate Llevar, la nueva serie de Leticia Dolera para Movistar+, se ha visto salpicado por la polémica sustitución de Aina Clotet por Celia Freijeiro tras quedarse embarazada. Después de que la creadora, directora y protagonista se pronunciara sobre el asunto achacando el despido a cuestiones narrativas y de producción, ahora ha sido la actriz la que ha ofrecido su propia versión.

A través de un extenso y duro comunicado enviado a los medios de comunicación, Clotet explica que hasta el momento había guardado silencio por proteger su estado gestacional, por evitar que sus declaraciones se percibieran como un ataque a Dolera y al proyecto y por buscar soluciones para evitar que otras actrices embarazadas pudieran sufrir la “desprotección legal” en la que ella se ha encontrado. No obstante, han sido precisamente las palabras de hace unos días de la directora a varios medios -entre ellos Vertele- el detonante de este escrito.

En las siguientes líneas, la actriz detalla las fechas en las que se produjo tanto el casting de selección como el conocimiento de su embarazo, que decidió comunicar a Dolera y su equipo “con la voluntad de ayudar a la producción y para que se puedan plantear la organización del rodaje teniendo en cuenta mi estado”. “Empezaba a rodar estando de poco más de 3 meses y medio, por lo que entendí que con una planificación adaptada, podría rodar la mayoría de mis escenas antes de que mi embarazo fuese perceptible”, explica Aina.

Desmiente las palabras de Leticia Dolera

Del mismo modo, la actriz desmiente que el rodaje fuera a comenzar cuando ella estuviera embarazada de “4 o 6 meses”, como declaró la propia Dolera, sino que arrancaría a los tres meses de embarazo.

“Si llegado el momento en que mi embarazo fuese visible quedaran escenas pendientes de rodar, entendía que se podía recurrir a cualquiera de las técnicas que utilizamos de forma habitual en estas circunstancias (...) Y así lo propuse”, añade la actriz. “Entiendo que dicha adaptación suponía un esfuerzo para todo el equipo pero, como en el sector audiovisual es habitual adaptarse a todo tipo de imprevistos, asumí que la producción de una serie marcadamente feminista y que plantea la dificultad de ser mujer y madre en esta sociedad, consideraría todas las opciones para no excluirme solo por estar embarazada”, sentencia.

Posteriormente, la intérprete asegura que “dos días después de comunicar la noticia, la directora [Dolera] me informa telefónicamente que no cree que puedan contar conmigo porque hay un problema con la póliza del seguro, que establece un coste altísimo para cubrir cualquier problema derivado del embarazo y que además ven complicado cambiar el plan de rodaje”, y apunta que se abrió casting para su personaje en esas mismas fechas.

Tras reunirse con varias asociaciones, Clotet constata que realmente los precios de estas pólizas son elevados y que ante estas situaciones “depende de la voluntad de cada producción asumir la contratación de actrices embarazadas”.

Ofreció cubrir los costes de disimular su embarazo

A continuación, la actriz explica que pidió reunirse con el productor y Dolera, a quienes planteó de nuevo las posibilidades de adaptación y planificación para poder disimular su embarazo en pantalla, poniendo a su disposición su salario “para cubrir cualquier coste adicional que mi embarazo pudiese suponer a la producción”.

Fue días más tarde, en la séptima semana de gestación y con dos meses por delante antes del inicio del rodaje, cuando el productor le transmitió que era “legal y artísticamente inasumible” su presencia en Déjate Llevar.

Según la versión de la actriz, Dolera “en compensación” le ofreció un personaje “capitular” (que solo sale en un capítulo) que decide rechazar, “no por ser un personaje menor (...), sino por la sensación de desprotección que había sentido durante todo el proceso”.

“Opté por decirlo y perdí un trabajo importante”

Asimismo, Clotet asegura que Movistar no estaba al tanto de la decisión de la productora de prescindir de ella y que así se lo transmitieron cuando se reunieron, asegurando que de haberlo sabido “hubieran volcado toda su voluntad para poder evitarlo”.

La actriz concluye asegurando que es “plenamente consciente de la enorme presión que conlleva dirigir un proyecto como este”, pero asegura que cree necesario “mostrar la otra cara de la moneda, la de la presión de la mujer que se queda embarazada y tiene que decidir si esconde su embarazo (...) Yo opté por decirlo y perdí un trabajo importante”.

Clotet cierra su comunicado haciendo un alegato en defensa de los derechos de la mujer: “Creo fervientemente que ninguna mujer debería verse obligada a ocultar algo así para proteger su carrera profesional y pienso que es el compromiso de todos y todas luchar por una sociedad justa y equitativa que no reduzca las oportunidades de las mujeres en momentos tan cruciales como el embarazo o la maternidad”.

La versión de Leticia Dolera: “Era técnicamente imposible”

“Me parecía técnicamente imposible contar esta historia con una actriz embarazada de 5 y 6 meses” dijo Dolera hace apenas unos días sobre el papel inicialmente previsto para Clotet, el de una mujer que “se toma la píldora a espaldas de su marido en el capítulo 1” y a partir de ahí “reconecta con la sexualidad y empieza a tener aventuras”.

Antes de ofrecerle una papel capitular que acabó rechazando, Dolera apuntó que intentó mantener la participación de Clotet “moviendo localizaciones y el plan de rodaje para que no la pilláramos de seis meses”. De ahí la marcha de la actriz, que la directora niega que se produjera de malos modos. “Supongo que mola el morbo, que mola el titular grueso”, añadió.