'Sálvame'

Anabel Pantoja aclara por qué dejó 'Sálvame': “Me han pedido perdón, pero el daño ya está hecho”

No hay entrevista en la que Anabel Pantoja no tenga que responder preguntas sobre Sálvame. Aunque dejó el programa en la primavera de 2022, su pasado está totalmente condicionado por el histórico magacín de Telecinco, del que salió bastante escarmentada porque “no se portaron bien” con ella. De hecho, dice que se le hicieron “putadas” que “nunca” perdonará, afirma plenamente convencida.

“Yo trabajaba en Sálvame porque eran ingresos fáciles y cómodos. No puedo compararlo con el trabajo en un supermercado o un bar, pero lo mío se multiplicaba por 100 porque iban a lo personal. Me hacían daño en el alma. Supe llevarlo hasta que llegó un punto que dije: 'Si todo el mundo me critica y me hace putadas, ¿quién soy yo para seguir aquí?'”, recuerda en una entrevista concedida al podcast Querido Hater.

Fue tertuliana durante siete años en el programa que presentaba Jorge Javier Vázquez. En 2022 le ofrecieron participar en Supervivientes y, al regresar de Honduras, ya no quiso volver al plató de Sálvame, en el que “no trabajaba feliz” aunque había logrado hacer “grandes amigos”.

“Cuando regresé de Supervivientes estaba de otra manera, con mucho dinero, tenía otras expectativas y no quería volver a sufrir”, defiende la televisiva, dolida por la manera en la que Sálvame abordó la enfermedad y la muerte de su padre: “El motivo principal también fue el final de mi padre, no se portaron bien y hoy en día nunca se lo perdonaré”.

Ese fue un “detalle feo”, insiste la televisiva, que no se “merecía que cubrieran el diagnóstico” y que se le “juzgara como hija”. Asegura que los directores del programa, David Valldeperas y Alberto Díaz, se han disculpado por aquella polémica cobertura, pero ya no hay marcha atrás: “Valde, Alberto y el resto me han pedido perdón, pero el daño ya está hecho”.

“No me alegraré del final de Sálvame, pero es verdad que me he quedado más tranquila”, reconoce la sobrina de Isabel Pantoja, que ahora ha potenciado su trabajo como influencer y ha vuelto a la televisión con Desnudos por la vida.

“Se metían en temas que igual no debían”

Anabel tiene su opinión sobre la cancelación del magacín, que llevaba 14 años en antena. Cree que se debe al cambio en la cúpula de Mediaset, donde se instalaron personas “a las que no les encajaba este programa”. “Igual que había un público fiel, había otros haters detractores del programa. Se juntaron muchas cosas, se metían en temas que igual no debían. Con el documental de Rocío, ellos se involucraron mucho y hubo una historia interna y otra historia externa y ahí brotó. Me duele porque la idea de Sálvame no la conseguirá nadie y es historia de la televisión”, lamenta.

Los cambios en la cúpula afectaron directamente al presentador del programa, Jorge Javier Vázquez, que regresó a la pequeña pantalla en septiembre con un formato que fue retirado por sus bajos índices de audiencia. Anabel quita hierro al fracaso de Cuentos chinos: “Siempre me he llevado bien con él. Lo que le pasó le puede pasar a cualquiera”, considera. “Me llegan ciertas informaciones y creo que él vuelve por la puerta grande. Son tiempos y etapas”, afirma.

Etapas como la que está viviendo ella, todavía vinculada a la televisión pero no al universo Sálvame. Es por ello que no tiene mucho interés en el docureality de Netflix Sálvese quien pueda, grabado por sus excompañeros, entre ellos algunos de los que más daño le hicieron: “Lo hemos comentado, pero llevo mucho tiempo fuera y no me vería ahí”.