Nueva entrega de 'Mi casa es la tuya'

Pepe Navarro argumenta sus razones políticas por las que acabó el 'Mississippi'

Bertín Osborne visitaba a Pepe Navarro en su nueva entrega de 'Mi casa es la tuya'.

El presentador le habló de su infancia, de la casualidad que le llevó a trabajar en radio y de cómo nació 'Esta noche cruzamos el Mississippi'.

Osborne llegó a casa de su invitado en Ibiza y con tanto sol se tuvo que poner las gafas.

Cómo nació el 'Mississippi' y por qué acabaron con él

“Doy el salto a la televisión porque no tenía nada que comer”, confesaba Navarro y recordaba que hizo un telediario, “el más visto en la historia de la televisión, tampoco tiene mérito porque era la única que había”.

Y Bertín preguntaba cómo nació 'Esta noche cruzamos el Mississippi': “En Antena 3 hice las mañanas y las noches, pero el problema que tuvimos es que nos metimos con Pujol y Asensio era muy amigo de él, y ya no pude hacer más programas”.

“Entonces me fui a Telecinco, y me propusieron hacer la noche, y ahí empezó el Mississippi”.

“Yo no me fui del Mississippi por capricho, ni mucho menos. Pero a Telecinco llegaron los nuevos socios y me pusieron unas condiciones: eliminar a mi segundo, cambiarle el nombre al programa porque a la madre de un consejero no le gustaba. Y eso me hizo replanteármelo todo. Entonces decidimos irnos a Antena 3”.

“Lo que no contábamos es que ya había empezado la guerra por los derechos del fútbol y el gobierno de Aznar fue a por Asensio. Me vi en la calle con mi equipo”, explicó por estar en medio de una guerra que no le tocaba.

“Encima el puto vídeo de Pedro J. y me decían que lo iba a sacar yo esa noche, y era mentira”.

Y desveló cómo les echaron: “En plan franquista, con un sobre y nos dieron media hora para abandonar el edificio, pero antes nos registraron”.

La Veneno era un animal televisivo que irradiaba ternura

Bertín también le preguntó por la fallecida Veneno a la que Pepe descubrió: “La Veneno tenía mucho talento, pero había que sujetarla. Bien llevado hubiese sido maravillosa, la cámara la quería y comunicaba con naturalidad, y eso es básico”, explicaba.

“A la gente le gustaba porque irradiaba ternura, era un animal televisivo y además, buena persona”, comentaba.

Sobre si aprovechó la oportunidad que le dio: “Se le fue, aunque consiguió ser mujer que era lo que quería. Ella era Manolito el maricón, y al final logró ser Cristina, pero acabó como acabó”.