Cristóbal Soria denuncia en 'Espejo Público' que ha sido víctima de un robo en auge: “Me eché las manos a la cabeza”
Cristóbal Soria ha detallado en Espejo Público este lunes, 22 de septiembre, que fue víctima de un robo a plena luz del día. Para explicar lo ocurrido, el colaborador se ha dirigido a los exteriores de Atresmedia: “Quiero alertar a los espectadores del robo que viene para quedarse. Yo lo he sufrido en carnes propias”. Como consecuencia, el espacio matinal ha puesto en marcha una investigación sobre la sustracción de los cables de carga de los vehículos eléctricos.
Junto a Miquel Valls, el tertuliano ha narrado cómo sucedieron los hechos. El fin de semana previo a la emisión de Espejo Público, Soria aparcó su coche en un centro comercial de Sevilla y se dispuso a enchufar su vehículo en un punto de carga. “Cuando salgo, me encuentro con que me han cortado los cables”, ha explicado en directo. Esta sustracción, tal y como ha contado, se produjo “a plena luz del día” en aproximadamente “30 minutos”.
Se trata de un cable de aproximadamente diez metros de longitud y grosor considerable. El cobre es clave para entender este robo que, según Soria ha comentado, “viene para quedarse”: “Una vez que vas a la Policía y pones la denuncia pertinente... yo me echo las manos a la cabeza”. Sin embargo, los agentes encargados de registrar lo ocurrido le adelantaron que este tipo de sustracciones comenzaban a ser “frecuentes”.
El colaborador de Espejo Público ha denunciado en directo que los ladrones le dejaron únicamente el conector y, como consecuencia, tuvo que comprar un cable nuevo. Pese a que se estima que el valor del cobre robado no supera los 20 euros, Soria tuvo que desembolsar un total de 260 por uno nuevo. También se ha comentado que las compañías de seguros, por el momento, no cubren este tipo de hurtos.
Con esta situación sobre la mesa, el programa de Antena 3 ha emitido las conclusiones de su investigación. La periodista Estefanía Ruiz ha confirmado que distintas bandas organizadas actúan a plena luz del día, empleando cizallas o sierras de mano. No es tan sencillo como utilizar unas tijeras, puesto que se trata de “cables de alta tensión” que pueden acarrear “mucho peligro” para las personas que los manipulen.