Vídeo

El discurso de Samantha Hudson por el Orgullo en RTVE: “El enemigo son todos los fascistas que esparcen su bazofia”

RTVE retransmitió la noche de este domingo 6 de julio, en directo por La 2 y en el marco de las reivindicaciones y celebraciones del Orgullo LGTBIQ+ en Madrid, el concierto especial '20 años de amor' en conmemoración de las dos décadas de la aprobación del matrimonio igualitario. Presentado por Ruth Lorenzo e Inés Hernand, la cita no constó sólo de actuaciones musicales, sino también de espacio para que sus participantes se expresaran.

Una de las participantes fue Samantha Hudson, y su discurso acabó siendo el más aplaudido y reivindicativo de la noche. La artista quiso empezar reivindicando a las chicas que habían salido junto a ella al escenario, explicando que pertenecían a Transexualia, una asociación para mujeres trans, recordando: “Me parece indispensable, porque antes de todos estos orgullos, de todos estos himnos, de todos estos cambios legislativos, las que se dejaron la vida y las que estuvieron al pie de cañón para reivindicar su derecho a existir, fueron las travestis, las trans, las racializadas, las trabajadoras sexuales. Y gracias a ellas estamos todas, todos y todes hoy aquí. Y gracias a ellas tenemos los derechos de los que disfrutamos hoy”.

Tras detallar algunos momentos, focalizó en el matrimonio igualitario como “un hito en el largo camino que ha recorrido nuestro colectivo en busca de la libertad, de la igualdad, en busca de conquistar derechos que deberían garantizárselos simplemente por existir”. Hudson prosiguió reivindicando su voz: “También estamos aquí no sólo para celebrar, sino para gritarle al mundo que no vamos a conformarnos, porque sí, nos podemos casar, pero esto no ha hecho más que empezar. Sigamos pensando hacia adelante, no nos conformemos, que no nos tomen por tontas. Queda mucho que hacer, queda mucho camino que recorrer, y sobre todo en un momento en el que una ola reaccionaria fascista está sacudiendo el mundo”.

La artista prosiguió contextualizando: “Un momento en el que lunáticos millonarios, tecnócratas fascistas y líderes políticos de derecha y de ultraderecha nos utilizan como cabeza de turco para imponer sus políticas, sus discursos de odio basados en el miedo, en la amedrentación, sus discursos y sus políticas repletas de sapos y culebras. Siempre, además, que hablamos de la hostilidad y la violencia que sufrimos el colectivo LGTBIQ+, nos dicen: ”Bueno, mirad Irán; bueno, mirad Rusia; bueno, mirad Hungría“. Y por supuesto que aspiramos a la dominación mundial, por supuesto que queremos erradicar las fobias y la discriminación de todo el mundo. Pero no es menester irse tan lejos”, relatando episodios recientes de violencia en España.

Samantha Hudson hizo un análisis político: “No es casualidad que la violencia contra nuestro colectivo y nuestra comunidad vaya en aumento cuando tenemos a la derecha y a la ultraderecha de este país haciendo todo lo posible para atentar contra nuestros derechos, contra nuestras libertades, recortando, mutilando y cercenando todas las leyes, las pocas leyes que nos amparan y nos protegen. Una España donde Vox ha votado en contra de ilegalizar las terapias de reconversión en Valencia, donde PP y Vox han votado a favor de recortar la ley trans también en Valencia”.

“El PP de Ayuso hace todo lo posible por seguir relegándonos”

Personalizando, y desde la Plaza de España de la capital, prosiguió: “Una España donde la diputada Carla Toscano el otro día decía con total impunidad en el Congreso que el colectivo LGBT es corrupto. Lo asociaba con la corrupción de menores. Una España también, y ya sin irme más lejos, donde el PP de Ayuso hace todo lo posible por seguir relegándonos a los márgenes, por seguir humillándonos, por seguir haciéndonos la vida imposible como si no lleváramos toda la vida sufriendo lo mismo”.

Hudson retomó lo personal: “La verdad, estoy harta. Y espero que la gente en casa entienda que no somos el enemigo, que el colectivo trans no es el eje del mal. El enemigo son ellos, son todos los fascistas que están esparciendo su bazofia ponzoñosa por toda Europa. Así que hagamos del orgullo una puerta hacia una sociedad más justa e igualitaria para todas, sin dejarnos a nadie por el camino. Hagamos del orgullo un lugar donde reivindicar también el antirracismo, el feminismo, donde reivindicar a las personas discapacitadas, a las locas, donde reivindicar a las precarias, un lugar donde denunciar la capitalización de nuestras vidas y, en definitiva, todas las violencias estructurales y sistémicas a las que nos somete este sistema. Hagamos del orgullo un espacio para todas, para todos y para todes, porque las queers también queremos que se derriben las fronteras, que se ataje la ley de inmigración”.

Añadiendo también la lucha por la vivienda como un derecho fundamental, básico e indispensable, y no como un bien de mercado; Hudson concluyó: “La lucha LGTBI ha de ser interseccional y transversal. No podemos dejar a nadie fuera, así que os ruego encarecidamente que disfrutemos, que bailemos, que celebremos con orgullo, pero que no nos callemos, ni un paso atrás y hagamos como nuestras hermanas trans, nuestras hermanas travesti racializadas, trabajadoras sexuales, que en esas primeras revueltas alzaron el puño y dijeron hemos venido para quedarnos y por mucho que os empeñéis no vamos a dejar de existir”.