La cruda realidad de los homosexuales en 1979: “Una descarga eléctrica te sacudía todo el cuerpo”
El viaje de Ana Pastor con “¿Dónde estabas entonces?” permitió a los espectadores conocer la cruda realidad de los homosexuales en el año 1979, que articuló la nueva entrega del programa y se asentó definitivamente con un dato sobresaliente de audiencias.
El juez Grande-Marlaska explicó que en esa época los homosexuales eran considerados “seres peligrosos”, y que por ello “debían ser reeducados o socializados” y fueron incluidos en la Ley de Peligrosidad Social hasta precisamente ese año.
Pero el testimonio más impresionante fue el de Jordi Griset, que explicó cómo esa “persecución” le hacían sentir “el único afeminado del mundo”, y que por ello “quería cambiar”. Cuando su madre descubrió su secreto, como él mismo lo llama, decidió junto a su padre que “debía curarme de esta enfermedad por todos los medios, incluso vendiendo la casa si era necesario para poder pagar el tratamiento”.
“Una descarga que te sacudía todo el cuerpo”
Ese “tratamiento” era un realidad un método de tortura. En primera persona, Jordi Griset explicó cómo le ataban a una silla, delante de un productor, e iban ofreciéndole imágenes de mujeres desnudas y de hombres con bañador.
En las de las mujeres, no ocurría nada. A los 30 segundos, la diapositiva cambiaba y aparecía la de un hombre, momento en el que le daban “una descarga eléctrica que te sacudía todo el cuerpo” en dos electrodos situados en su mano derecha y en su bíceps izquierdo.
“Que una descarga eléctrica recorra tu cuerpo... que lo prueben”, intentó buscar palabras un emocionado Jordi Griset para expresar lo que era ese supuesto tratamiento, que un psiquiatra explicó que se alargaba dos sesiones por semana durante 6 meses.