La justicia europea obliga a Netflix a invertir en cine alemán, ¿pasará lo mismo en España?
El Tribunal General de la Unión Europea (TUE) ha desestimado el recurso presentado por Netflix contra la ley alemana que le obliga a pagar un impuesto para financiar la producción, distribución y exhibición de películas alemanas.
El régimen alemán para la financiación de la producción, distribución y exhibición de películas se nutre mediante un impuesto especial que grava a las empresas de la industria del cine, del vídeo y al sector audiovisual. El nivel de esta tasa depende del nivel de ingresos que estas empresas obtienen de su actividad de explotación de películas.
Las autoridades alemanas aprobaron una modificación de esta normativa que extendió esta obligación a aquellos proveedores que prestan servicios de vídeo a la carta que no están establecidos en Alemania pero que tienen ingresos procedentes de ciudadanos del país a través de su presencia en Internet.
Esta enmienda obligó a Netflix a pagar el impuesto que Berlín destina a financiar el cine del país, puesto que su base legal está localizada en Países Bajos. En concreto, se le exige el pago una tasa en función de la recaudación generada por sus clientes en Alemania por aquellos contenidos (películas, series o documentales) con una duración superior a los 58 minutos emitidos a través de Internet en alemán.
La Comisión Europea avaló esta modificación del régimen alemán para financiar su sistema audiovisual al concluir tras una investigación que es compatible con la directiva europea de servicios de comunicación audiovisual.
Netflix presentó un recurso ante la Justicia europea en el que reclamaba al tribunal con sede en Luxemburgo que anulase esta decisión del Ejecutivo comunitario por haber infringido una serie de normas europeas en su análisis.
Una decisión que podría extenderse a otros países
En su sentencia, fechada el 16 de mayo, el Tribunal de Justicia de la UE dicta que el recurso presentado por Netflix es “inadmisible” y condena a la plataforma a pagar los costes en los que haya podido incurrir la Comisión Europea a lo largo del procedimiento judicial.
Esta decisión de la justicia europea plantea una situación incierta para Netflix, puesto que podría acarrear que otros países de la eurozona exijan lo mismo a la firma de streaming. Por ejemplo, la Ley General de Comunicación Audiovisual en España obliga a destinar un 5% de los ingresos a la financiación de obras europeas tanto a cadenas como a operadores de telecomunicaciones.