El precio de... se estrenó en Telecinco combinando varios géneros: el documental, el debate y la entrevista, que tuvo como primera protagonista a Carolina Perles, la exmujer de José Luis Ábalos, sobre el caso Koldo. Una charla entre la entrevistada y Santi Acosta que el exministro de Fomento intentó tumbar mediante acciones legales.
Sin embargo, la entrega siguió adelante y Mediaset emitió un programa en el que Perles reveló su testimonio en torno a su experiencia y vivencias durante casi dos décadas junto al exsecretario de Organización del PSOE.
“Están viendo a Carolina Perles. Esto que tengo en mi mano es el auto judicial con el que el exministro ha intentado callarla, y paralizar la emisión de este programa (...) pero no lo ha conseguido. El próximo lunes estará aquí mismo sentada en el plató”, empezaba informando el presentador, mientras en la pantalla del fondo aparecía la invitada.
“Desde que supo que iba a hablar no he parado de recibir presiones. Este fin de semana he tenido miedo. Aunque no quiera que hable no lo va a conseguir, porque tengo derecho a contar mi historia y a mi honor. Si han hablado tantas mujeres de su entorno, ¿por qué no lo voy a poder hacer yo?”, arrancaba lamentando la entrevistada.
Con unas palabras, un tono, un decorado y un formato de entrevista que recordaba en muchos aspectos a aquel Rocío, contar la verdad para seguir viva, en el que Telecinco daba voz a Rocío Carrasco, una mujer que contaba la versión de una historia que hasta entonces solo había hecho pública una de las partes.
Con Perles ocurrió lo mismo: la sentaron para que respondiera las preguntas que le iban haciendo, detallara momentos de su intimidad como cuando descubrió “que su marido pagaba por sexo”, en fascículos, con momentos de llanto, escenas del ámbito íntimo, declaraciones en el juicio y después comentarios en plató sobre lo escuchado.
Eso sí, al tratarse de la historia de Perles y Ábalos, los tertulianos tuvieron un perfil mucho más político. Además, el programa no solo se centró en el relato de la entrevistada, también tuvo testimonios inéditos, documentos y archivos que aportaban más información sobre el caso Koldo.
“Va a ser una noche para la historia”, decía Acosta al empezar la entrega. Como también lo fueron las noches de emisión de aquella Rocío, contar la verdad para seguir viva, y aún resuenan las consecuencias de aquel documental. Ahora habrá que esperar a ver lo que ocurre con este.