El público no recibe bien la nueva 'noria infernal' de 'Supervivientes': “Han perdido 40 minutos de programa”
Supervivientes 2024 anunció para este jueves el regreso su prueba estrella, la famosa 'noria infernal', prometiendo que sería “más dura que nunca” tras un cambio en su mecánica con el que creían que llevarían al límite a los concursantes. Sin embargo, el reality de Telecinco se encontró con la situación totalmente contraria, con los cuatro robinsones que la enfrentaron aguantando más que nunca, y con una aparente comodidad encima de la plataforma.
Tal fue el desconcierto que Laura Madrueño vivió varios momentos de confusión por los improvisados intentos de la dirección de complicar el juego para que los participantes cayeran al agua. Todo ello, en un reto que se cobró más de 40 minutos de emisión para desesperación (y decepción) de los espectadores.
Tras la semifinal de la prueba celebrada el miércoles, Kiko Jiménez y Pedro García Aguado, por un lado, y Arkano y Gorka, por otro, fueron los duelistas que se enfrentarían al gran juego por el liderazgo e inmunidad en sus respectivos grupos. Dos 'cara a cara' que tuvieron un idéntico resultado, con todos ellos resistiendo más de 20 minutos dando vueltas en la noria, una marca de tiempo que en la anterior etapa del reto estaba al alcance de muy pocos.
¿Cuál fue el cambio? En esta ocasión, Supervivientes decidió bajar la altura de la plataforma en el mar para que cuando los concursantes quedaran boca abajo, tuvieran sus cabezas dentro del agua, enfrentándose supuestamente a varios momentos 'de apnea'. Y lo que parecía que iba a complicar el juego lo acabó facilitando, ya que al contacto de las barras con el agua, el giro de la noria se ralentizaba, favoreciendo a los concursantes, que veían más estabilizada su posición sobre la rueda.
Además, debido a la altura de algunos de los participantes, estos podían mantener en todo momento la boca fuera de la superficie del mar, respirando con normalidad. Tanto fue así que hasta Pedro García Aguado, que ha demostrado en varias galas no estar en un gran momento de forma, superó con creces la prueba, permitiéndose vacilar a las cámaras, a la que hizo varios gestos y guiños mientras daba vueltas. Por otro lado, el programa decidió acolchar las barras de la noria y vestir a los robinsones con trajes protectores, reduciendo el sufrimiento de los participantes durante el reto.
Órdenes improvisadas y una injusticia con Arkano
Al ver que los robinsones no caían al agua tras más de 20 minutos, la dirección les ordenó soltar primero uno de sus brazos y, poco después, el otro, provocando la reacción de Laura Madrueño. La presentadora de Supervivientes en la isla compartió varias veces con sus superiores su preocupación por la integridad física de los concursantes, ya que, al agarrarse a la noria solo con las piernas, podían golpearse en la cabeza con los palos de la misma.
Pese a ello, el programa decidió seguir adelante. En el primer duelo, Pedro García Aguado se desplomó a la primera, evidentemente incapaz de mantenerse sobre la noria. En el segundo, Madrueño insistió en que los participantes no podían encaramarse sobre la barra inferior, una orden que Arkano sí cumplió mientras que Gorka la desoyó, imponiéndose a su compañero en una injusticia que denunciaron a través de las redes sociales los espectadores, decepcionados en general con las novedades de la prueba. Para más inri, Supervivientes había anunciado un último duelo entre los dos ganadores para ver quién era “el superlíder”, algo que finalmente no pudieron llevar a cabo ante la falta de tiempo.