Laura pone los puntos sobre las íes al ver los vídeos de sus compañeros de GH
La séptima gala de GH Revolution se saldó con la expulsión de Laura, una de las a priori favoritas del público, y Petra, la menos apoyada por los espectadores en la app.
Lo que comenzó como una noche especial para Laura, pues se reencontró con su novio Aitor en la casa de Guadalix, terminó con su expulsión. La concursante fue la nominada elegida por la audiencia para decir adiós al reality, que prefirió salvar a Hugo y Maico.
Una dura semana para Laura
Laura había pasado una dura semana tras la encerrona de algunos compañeros en la cocina, que intentaron sacarle el tema de su transexualidad.
Para animarla, el programa preparó una sorpresa para ella con la visita de su chico, que explicó en plató que llevan 5 años de relación y que es consciente de la transexualidad de su pareja, aunque ella nunca se lo había dicho directamente.
“Yo sé con quién estoy y con eso me sobra y la quiero por cómo es”, dijo arrancando los aplausos del público presente en plató.
Ya en la sala de reencuentros, Aitor dio un consejo acertado a Laura: “Sé tú misma, sigue así y recuerda que aquí solo hay compañeros, no hay amigos”.
Laura: “A quién me juzgue le presto mis zapatos”
A su llegada al plató como expulsada, Jorge Javier mostró a Laura las imágenes de cómo sus compañeros hablaban de su transexualidad a sus espaldas. “No lo he contado porque no lo he visto oportuno, y no les debo nada a ninguno”.
En ese sentido, la concursante se mostró decepcionada y molesta con el resto de participantes: “Si tan sinceros y tan valientes son, ¿por qué no me lo dijeron a la cara?”, preguntó entre aplausos.
Sobre la encerrona que le hicieron en la cocina para tratar de que lo contara, Laura explicó que “me querían sacar información para utilizarla contra mí, no para apoyarme. A quién me juzgue le presto mis zapatos, a ver dónde llega y cómo”, sentenció ante la ovación del plató.
Petra, expulsada por sorpresa de GH Revolution
Tras la expulsión de Laura, la organización puso a prueba a sus concursantes con El juego de las tentaciones, una propuesta que ofrecía a alguno de ellos la inmunidad para tres semanas a cambio de una contraprestación para el resto, sin desvelar de qué se trataba.
Pese a que todos tenían la opción de no aceptar el juego, Carlota fue la más rápida entre varios de sus compañeros en apretar un pulsador que la salvó de las nominaciones. A cambio, el resto de concursantes se sometieron a una votación en positivo en la que el menos votado tendría que terminar su participación en el concurso.
Después de 20 minutos de espera, Petra fue la que menos apoyo recibiópor parte de la audiencia y terminó siendo la segunda expulsada de la noche ante el desconsuelo de Carlota, que se sentía culpable por haber caído en la tentación.
