Telecinco presenta Little Big Show, con niños “sin la presión de competir o de ser evaluados”
El próximo viernes llega a Telecinco Little Big Show, un programa espectáculo en el que Carlos Sobera mostrará con mucho humor el talento de niños que expondrán sus sorprendentes destrezas sobre el escenario sin la presión de ganar o ser evaluados.
Además de ejercer como maestro de ceremonias, Sobera será también protagonista del programa,
convirtiéndose en cómplice de los participantes y haciendo aflorar su espontaneidad y su faceta más
divertida mientras charla con ellos y les hace preguntas.
Producido por la cadena en colaboración con Warner Bros ITVP España, Little Big Show es la adaptación española de Little Big Shots, espacio producido en EEUU por Ellen DeGeneres y que se ha adaptado en múltiples países.
Acróbatas, virtuosos del violín y de la guitarra, maestros de la batería, genios en artes, ciencias o matemáticas, gimnastas, bailarines o expertos en juguetes infantiles: así serán algunos de los niños protagonistas de Little Big Show.
Los protagonistas demostrarán sobre el escenario que el talento y el encanto no tienen edad y que las situaciones más hilarantes, divertidas e inesperadas pueden darse cuando un presentador de éxito y larga carrera profesional como Carlos Sobera se gana su confianza a través del humor.
Para Carlos Sobera, “Little Big Show es un programa diferente. No es un talent show al uso porque no hay competición y porque más allá de los talentos particulares de los niños, que son extraordinarios, lo más importante para mí es la oportunidad que se nos da de establecer un diálogo de tú a tú, como iguales,
para que los niños se expresen en toda su amplitud“.
De charla con Carlos Sobera
“He aprendido que los niños, dentro de su mundo infantil, tienen una extraordinaria visión de las cosas, gracias a su naturalidad y su sencillez. Me ha sorprendido la madurez que tenían delante de un presentador al que no conocían, delante del público y de las cámaras de televisión”, afirma el presentador.
“Han sido los grandes dominadores de la situación y se han expresado libremente, con mucha cordura y sentido común, diciendo verdades como puños, sin tapujos y sin prejuicios. Los niños hablan de las cosas más mundanas de la forma más natural que existe y eso a veces se echa de menos en las entrevistas con adultos”, explica Sobera.
Un sofá gigante sobre un escenario inspirado en los grandes teatros neoyorquinos servirá de punto de encuentro entre Carlos Sobera y los pequeños invitados, un lugar perfecto para que den rienda suelta a su naturalidad y espontaneidad en una conversación relajada y llena de humor.
Tras una inesperada sorpresa que hará girar el escenario 180 grados, los niños tendrán la oportunidad de demostrar su habilidad como lo que son: grandes estrellas en potencia.
Carlos Sobera: “Ha sido el programa más difícil y más bonito de toda mi carrera”
Después de más de 25 años ante las cámaras, presentando concursos, como actor o convirtiéndose en el maitre del restaurante de First Dates, Carlos Sobera conducirá por primera vez un programa en el que los protagonistas serán niños: “Ha sido el programa más difícil y más bonito de toda mi carrera”, asegura.
En este nuevo registro, Sobera saca su lado más desvergonzado y divertido ante un grupo de niños que le sorprenden desde el primer momento. La personalidad, la fuerza y el encanto de los más pequeños le descolocarán en más de una ocasión y a menudo será víctima de sus juegos y travesuras.
Durante la charla, Carlos Sobera tratará de averiguar las aficiones de cada uno, sus sueños y sus opiniones poniéndose absolutamente a su nivel, lo que en ocasiones también tendrá consecuencias para él: terminar siendo él el entrevistado, verse repentinamente empapado de agua y tener que escuchar que está entrado en años y que no es tan atractivo como dicen serán algunas de ellas.
Un experto en el Renacimiento, un guitarrista y un motorista, entre los protagonistas de la primera entrega
Algunos de los primeros protagonistas de Little Big Show serán un entendido en el arte de Miguel Ángel que lo sabe prácticamente todo sobre el artista del Renacimiento; un guitarrista inglés y su pequeña intérprete, que no sólo traducirá a Carlos Sobera sino que también lo imitará hasta las últimas consecuencias.
También pasarán por el plató dos hermanos expertos en silbo gomero que intentarán enseñar a Carlos las técnicas de esta forma de comunicación; y un motorista de tan sólo 4 años que, a pesar de su enorme timidez, sacará su faceta más pícara jugando con el presentador.
Carlos Sobera lo recuerda de esta manera: “Una de las mejores entrevistas se la hice a un niño que montaba en moto y que en todo el tiempo sólo me dijo dos palabras, pero aunque apenas hablamos, iniciamos un juego de tú a tú a través del cual expresó toda la creatividad que llevaba dentro. Esta es la esencia de Little Big Show: mostrar cómo un adulto y un niño pueden llegar a un punto de comunicación que no parece posible cuando ambos son tan distintos, tanto en edad como en circunstancias”.