“Bienvenidos al programa que no pretende tanto encontrar como seguir buscando, bienvenidos a la decimoprimera temporada de Viajando con Chester” recitaba Risto Mejide en el poema con el que abrió la primera entrega de su regreso a Cuatro.
Tras desvelar a sus 13 nuevos invitados, el primero en sentarse en el sofá fue Emiliano García-Page, el presidente de Castilla-La Mancha, que se desplazó hasta la zona cero de Letur (Albacete), uno de los lugares más castigados por la DANA.
Minutos antes de hablar con el político, el presentador se entrevistó con algunos vecinos afectados que relataron sus experiencias e hicieron algunas peticiones al gobierno, que el presentador llevó como “mensajero”.
Tras escucharlas, García-Page aseguró que su “objetivo es que Letur quede incluso mejor de lo que estaba”. Preguntado por dónde estaba cuando ocurrió la catástrofe: “Me entero de la riada por el vídeo en directo de un vecino. No recibimos ni alerta roja, nos movilizamos al ver lo que pasó. Pero lo que ha pasado es tan descomunal que no cabía en cabeza ninguna”, respondió.
El entrevistado subrayó que es uno de los políticos que más tiempo lleva en activo, por lo que se atrevió a señalar las herramientas más importantes en momentos de crisis de tal magnitud: “Una de las prioridades es gestionar la ansiedad, después cuando estás en plena recuperación es importante gestionar la paciencia. Aunque vayamos con urgencia”.
Risto quiso saber su opinión sobre Pedro Sánchez y el PSOE. Sobre ello, García-Page aseguró que tenían el secretario general que merecían porque es el que salió votado, así como reiteró no tener aspiraciones a la cima y criticó las puertas giratorias: “Si aceptas un sueldo vitalicio es para después hacer solo labores académicas”.
Finalmente, el presentador quiso señalar una curiosidad sobre la entrega: “Por primera vez en el Chester los espectadores verán que me he sentado a este lado y ha sido porque me lo has pedido tú”, desveló. Seguidamente, el invitado desveló el motivo: “No veo con el ojo derecho de nacimiento. Tengo una parte del ojo más pequeña, y no tiene arreglo”. Algo que asimiló a la política: “Siempre es bueno tener un GPS para saber orientarse y evitar los puntos ciegos”, zanjó.