Alberto Muñagorri, víctima de ETA con 10 años, a Ana Pastor: “Escucharía al responsable”

Ana Pastor regresó este jueves con ¿Dónde estabas entonces? tras un largo descanso navideño que no le ha sentado muy bien en términos de audiencia. El docushow se centró en esta ocasión en la historia de Alberto Muñagorri, un hombre al que el 26 de junio de 1982 le explotó una bomba de ETA en una de las plazas de Rentería, el pueblo en el que aún vive, perdiendo así una pierna y la visión en un ojo. Tenía 10 años.

En 1982, contaba Muñagorri, “Rentería no era nada parecido a lo que es hoy. Había altercados constantes: un día sí y otro también. Había broncas todos los días. Un clima bastante feo”. “Aquel 26 de junio de 1982 vienes de casa de tu madre e ibas a casa de tu abuela a pedirle la paga”, comenzaba recreando Pastor. “Y de ahí salí para dirigirme al campo de fútbol”, continuó Muñagorri: “En este recorrido fue donde estaba la bomba que cambió mi vida, la de mi familia y la de la gente que me quería”.

El afectado contó que, durante el recorrido, pasaron por su lado dos niñas a las que se quedó mirando antes de proseguir su camino, momento en el que el artefacto explotó sin que él lo tocara: “Y a partir de ese momento no tengo mucho más recuerdo porque no recuerdo haberle dado una patada a la bomba”.

“Los medios de comunicación le preguntaron a mi padre qué es lo que me había pasado y ellos, sin conocimiento, dijeron que lo más probable es que le hubiese dado una patada y que ahora por eso tenía la pierna destrozada”, siguió narrando Muñagorri: “Lo único que recuerdo fue despertarme en la UVI y pensaba que estaba allí porque me había dado un empacho de golosinas. Fue ahí cuando mi madre me dijo que no, que me había explotado una bomba, pero no me dieron más información porque tampoco estaban en una buena situación”.

No obstante, el entrevistado recordó que, cuando le pasaron a planta, su familia fue totalmente sincera con él: “[Me dijeron que] me habían amputado una pierna. Al principio no me lo creía, me lo contaron a través de la historia de La isla del tesoro. La isla del tesoroPero cuando levanté las sábanas y vi lo que me había pasado... a partir de ahí tuve que afrontar las consecuencias de ese día tan horrible”.

Además, Muñagorri explicó que su familia se enteró del atentado gracias a su hermano, que “andaba por ahí y fue corriendo a casa de mi madre”. Entonces, narró que este tocó el timbre y, tras contarle a su madre “que me había explotado una bomba”, esta no daba crédito: “Mi madre ha sido un pilar básico en mi recuperación, en que no tenga odio, que no tenga rencor ni complejos”.

A pesar de lo sucedido, Muñagorri intentó sacar el lado positivo a su situación: “Fue un caso muy mediático y hubo mucha gente que se volcó conmigo. Por ejemplo, la selección me regaló la equipación de fútbol”, pero también explica que “había mucho más apoyo por parte de gente de fuera que por parte de gente del País Vasco”.

Entonces, Pastor le preguntó si guarda constancia de que las personas responsables de colocar la bomba en ese lugar fueron detenidas o juzgadas, a lo que Muñagorri respondió negativamente: “Rentería es un pueblo muy pequeño y había el murmullo de quién podría haber sido. Yo puedo tener una ligera idea pero no sé si se me ha acercado ni yo he podido hablar con él”, aseguraba. Por último, el entrevistado aseguró que, de encontrarse con el responsable, “le escucharía si viene con una buena actitud, con un arrepentimiento; nunca voy a intentar justificar lo que hizo pero tengo que darle la oportunidad de que me diga lo que tenga que decirme”.