La acción es el género estrella de la temporada
El informe Eurofiction 2000, publicado en el último número de la revista Carta de Ajuste de la Academia de Televisión, concluye que el abandono de seriales no se corresponde con una pérdida de confianza en el género dramático, que encuentra su máximo exponente en géneros fuertes como los policiales. El éxito hace una década de Brigada Central -vista por catorce millones de espectadores-, fue un hecho aislado, según apunta el informe, pues el género de acción y policíaco no despega hasta 1999 con El comisario de Telecinco. Antes se había probado sin éxito con La virtud del asesino
, Petra Delicado, Policías, Ertzainak, Crims, Robles, Investigador y Antivicio. Con El comisario se normaliza definitivamente la imagen del Cuerpo Nacional de Policía y se busca al público de la ficción adulta. Las series policíacas llevan las tramas a los exteriores, con el consiguiente aumento de costes y proliferación de especialistas y técnicos en efectos especiales. “Lejos del desgarro existencial del comisario Flores
en Brigada Central (La Primera, 1989), del aura de diva que le prestaba Ana Belén a Petra Delicado (Tele5) o del cosmopolita Carvalho hispano-ítalo-francés, el arraigo entre el público de los personajes de El comisario o de Policías en el corazón de la calle estriba fundamentalmente en su rotunda normalidad“, apunta el estudio. En contraste con las privadas, Televisión Española no ha sabido acertar con el género policíaco -detectivesco. Entre sus ”cadáveres televisivos“ dentro de este género se cuentan los anteriormente mencionados La virtud del asesino, Robles, Investigador y Petra Delicado. Atrás