¿Cuánto consiguió de propina el pizzero de los Oscars?
“No tenía ni idea, no estaba preparado. Todo ocurrió de forma natural”
Edgar Martirosyan es empleado de la cadena de pizzerías de Los Ángeles Big Mama's & Papa's, una empresa que Agakhayan, al que todos llaman Aro, creó con su hermano en la década de 1990 y dirige en la actualidad.
En Big Mama's & Papa's sabían que los Óscar habían hecho un pedido, pero el encargo consistía en llevar las pizzas hasta el teatro. Nadie les advirtió de que formarían parte del espectáculo.
“No tenía ni idea, no estaba preparado. Todo ocurrió de forma natural”, declaró a Efe este hombre que este lunes atendía el teléfono con frenesí en vista del revuelo que los Óscar han causado en su cadena de franquicias.
“Su imagen de marca llegó a la mente de millones de personas”
En las últimas horas, Big Mama's & Papa's ha actualizado sus cuentas en las redes sociales para hacerse eco de su paso por los Óscar y tratar de sacar provecho comercial a sus minutos de fama.
“Es como ganar un boleto de lotería. Genera un alcance muy grande que no hubieran podido conseguir con su presupuesto de ninguna manera”, comentó el profesor de mercadotecnia Andrés Terech de la Escuela de Gestión Anderson de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
Si aplicaran las tarifas publicitarias de la cadena ABC durante la retransmisión de los Óscar y la pizzería tuviera que pagar por su exposición, el coste de su promoción habría superado los 10 millones de dólares (7,2 millones de euros), según cálculos de TMZ. “Les hicieron un regalo inmenso. El impacto es enorme. Su imagen de marca llegó a la mente de millones de personas”, precisó el colega de Terech en la Escuela de Negocios Marshall de la Universidad del Sur de California (USC), Ira Kalb.
“La gente va a olvidarlo en un par de días y la empresa tiene que encargarse de recordárselo”
Los expertos en marketing hicieron hincapié en la trascendencia para el futuro de la pizzería de las medidas que tome Agakhayan en el corto plazo. “Deberían contratar a alguien que llevara la comunicación, las redes sociales y crear un anuncio relacionado con lo sucedido en los Óscar”, dijo Kalb, para quien “la gente va a olvidarlo en un par de días y la empresa tiene que encargarse de recordárselo”.
A largo plazo, y salvo que la compañía de Agakhayan haga algo para evitarlo, Terech cree que lo único que permanecerá en el imaginario colectivo es que en los Óscar se repartieron pizzas, pero no el nombre de la empresa.
Petición de franquicias en diferentes lugares de EE.UU. e incluso Europa y Australia
“Estamos haciendo lo que podemos”, confesó Agakhayan, desbordado por un sinfín de asuntos pendientes. Los pedidos se han disparado y le han llegado solicitudes de personas interesadas en abrir una de sus franquicias en diferentes lugares de EE.UU. e incluso Europa y Australia.
En la actualidad, Big Mama's & Papa's cuenta con una red de 20 establecimientos ubicados en el condado de Los Ángeles y alrededores.
“Nos estamos quedando sin comida en todas nuestras tiendas”
“Nos estamos quedando sin comida en todas nuestras tiendas. Estamos pidiendo a nuestros proveedores más suministro para poder atender todos los pedidos”, declaró el armenio.
“La repentina popularidad ”se les puede volver en contra“
Kalb advirtió que el interés originado con los Óscar ha despertado unas expectativas en los clientes potenciales y si la pizzería “no consigue responder a la demanda satisfactoriamente” la repentina popularidad “se les puede volver en contra”.
“Vamos a intentar asociarnos con Coca Cola y convertirnos en la pizza oficial de los Óscar”
Pero Agakhayan está acostumbrado a los grandes desafíos. Su empresa ostenta un récord Guinness por ofrecer en sus menús la pizza más grande del mundo, de 2 metros cuadrados, y ya tiene planes para repetir en la gala de estatuillas en 2015. “Vamos a intentar asociarnos con Coca Cola y convertirnos en la pizza oficial de los Óscar”, adelantó
Brad Pitt como repartidor y Elsa Pataky probó pizza gracias al aviso de Kerry Washington
El pizzero llegó y junto con Ellen DeGeneres bajaron al patio de butacas para ponerse a repartir porciones de pizza. Las estrellas, tanto actores como directores, lejos de rechazar el ofrecimiento se apresuraron a hacerse con un pedazo, e incluso Brad Pitt se ofreció como “colaborador” para repartir la pizza entre sus colegas de profesión. Después pudo vérsele comiendo una porción mientras su mujer Angelina Jolie reía a su lado.