“Es duro decidir quién muere en esta recta final de El Internado”
“El capítulo de esta noche es casi un final de temporada, con grandes giros, antes de la traca final que se verá en otoño, donde habrá sorpresas y muertes, muchas muertes…”
El productor ejecutivo del Internado, Mariano Baselga, dio ayer algunos detalles sobre el desenlace definitivo de la serie que emite Antena 3, cuyos últimos siete capítulos se verán en septiembre.
Sin embargo, la cadena ofrece esta noche en prime time su último episodio antes del parón veraniego, donde ya se empezarán a resolver algunas tramas de cara al desenlace de la ficción.
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“Cerraremos el plató a las visitas para que no haya filtraciones”
Además, coincidiendo con la emisión del último capítulo de esta primera tanda, El Internado comenzará la grabación de los tres episodios finales que cerrarán esta serie después de más de tres años en antena.
Para ello, los responsables de Globomedia (Águila Roja, Aída) han blindado el set de rodaje con el objetivo de “evitar posibles filtraciones”.
“Cerraremos el plató a las visitas hasta finales de agosto, después, todo se desmantelará”, comentó Baselga durante la última visita de los medios de comunicación al rodaje, a la que asistió Vertele.com.
Los actores sólo leerán sus diálogos “para que no se vayan de la lengua”
Pero las medidas de seguridad alcanzan también al propio reparto del Internado: “Los actores casi no saben ni lo que les va a pasar a sus personajes, de esta manera evitamos que se puedan ir de la lengua”, ha dicho.
Y es que el equipo de Producción de esta serie ha elaborado un plan de reparto de guiones de tal forma que los actores cuyos personajes sigan vivos sólo recibirán la separata con sus diálogos.
“Los guionistas han tomado la dura decisión de elegir quién muere”
En este sentido, hay que recordar que cada vez serán menos los actores que sigan participando en la serie, ya que “a la vuelta de vacaciones habrá muchas muertes, no una ni dos, sino muchas, y algunas tendrán que ver con los personajes favoritos del público”, según aclaró Baselga.
“Los guionistas han tenido que tomar la dura decisión de determinar quién va a morir”, apuntó el responsable de El Internado.
“El final no tendrá ninguna explicación onírica o metafísica”
En cuanto al esperado desenlace de la ficción, Baselga insistió en que “responderá al 99.9% de las incógnitas”. Además, aseguró que tendrá un final “cerrado donde no habrá ninguna explicación onírica o metafísica”. “Nuestra intención es dar el final que el público desea pero no del modo en que se lo imaginan”.
El fin de la séptima temporada esta noche
Fiel al trepidante ritmo mantenido en estos últimos capítulos, en el episodio que Antena 3 emite esta noche, “El último deseo”, María, una de las protagonistas de la serie, está a punto de morir asesinada.
Además, Roque encierra a sus amigos en los pasadizos a punta de pistola en un intento desesperado por salvar su vida mientras, a unos pocos metros, los enfermos se han amotinado y están dispuestos a echar abajo la puerta de la sala de infectados.
¿Conseguirá sobrevivir María o será una nueva víctima de Ottox? ¿Rescatarán a Marcos y sus amigos o morirán en los pasadizos encerrados y sin medicinas? ¿Escaparán los enfermos del área restringida infectando a todo el colegio?
Hugo, que se sabe descubierto, se dispone a matar a María
María ha descubierto que Rubén se hacía pasar por Hugo. Corría alrededor del colegio cubierto con una capucha, de forma que nadie podía distinguirles y el profesor de deporte disponía de todo ese tiempo para hacer lo que quisiera contando con una sólida coartada.
Rubén, al verse sorprendido, no supo reaccionar y golpeó a la limpiadora dejándola inconsciente. Cuando se lo cuenta a Hugo éste lo tiene claro: hay que encontrar a la limpiadora y acabar con lo que Rubén empezó. Hay que rematar a María.
Roque apunta a sus amigos con una pistola
A punta de pistola, Roque encierra a sus amigos en los pasadizos y se lleva la cuerda sin la cual es imposible salir de la planta subterránea. No quiere hacerles daño pero necesita ganar tiempo para escapar de ellos, ahora que ya saben que fue él quien mató a Carolina.
Los chicos, atrapados en el subsuelo, comprenden que no podrán salir de allí sin ayuda. Su única esperanza es que alguien les eche de menos y les rescate.
Enfrentado a la posibilidad más que cercana de su muerte, Iván recapacita e intenta acercarse a Julia. Le aterra morir sabiendo que Julia le odia.
Curro lidera el motín en la sala de infectados
Curro ha conseguido reducir a Fermín y poner a todos los enfermos de su lado: los de fuera les han engañado y ha llegado la hora de salir de allí como sea, aunque para ello haga falta tirar la puerta abajo. Rebeca amenaza con dispararles si se atreven a salir, pero Curro está seguro de que no dispararán contra un grupo de personas desarmadas y enfermas.
Mientras tanto, Fermín, atado a la cañería del baño y muy débil por no haber tomado la medicina, agoniza. Sabe que si los enfermos salen, contagiarán a todo el colegio.
Las medicinas, al alcance de la mano
Tras varios días de duro trabajo en los pasadizos, parece que por fin han llegado a la sala donde se guardan las medicinas, unas ampollas de las que dependen las vidas de todos los infectados por el virus. Sólo les queda un obstáculo por salvar: la puerta que les separa del preciado botín se abre con una contraseña. Sólo Hugo conoce la clave… y nadie conoce los planes del malvado profesor.
La caracola mágica
Paula y Evelyn está encuentran una caracola en el cuarto de Amaia, que les explica que se trata de una caracola mágica: si pides un deseo y luego la devuelves al agua, las sirenas hacen que se cumpla. Eso sí, hay que tener mucho, mucho cuidado con lo que se pide, no vaya a ser que se cumpla…
