El Sindicato UGT también ha emitido un comunicado de apoyo al citado cámara, retenido en el aeropuerto de Los Ángeles cuando se hallaba de paso hacia las Islas Hawai en compañía de otros compañeros, para rodar un documental para La 2, de TVE. Según el relato del equipo, al hacer escala en Los Ángeles, sus compañeros pasaron la aduana pero a Julio Cesar García lo retuvieron con la única respuesta a sus preguntas de “porque te tocó”. El productor que le acompañaba le informó más tarde que las explicaciones que le habían dado eran que no se podía hacer nada “porque trabajaba para el Gobierno (español)”. Después fue llevado al calabozo, donde observó como unos policías daban una paliza a un alemán, y más tarde, esposado, sin cordones ni cinturón, fue introducido en un furgón para trasladarlo al calabozo y, de allí, a un avión que lo trasladó a Londres. Las fuentes de TVE señalaron que el Consulado español en Miami realizó los trámites necesarios para que fuese rápida su liberación, mientras que UGT considera un “abuso” el trato que recibió el cámara de TVE y “deplora” la forma en que fue tratado. UGT afirma en su comunicado que emprenderá las iniciativas necesarias para pedir “responsabilidades y explicaciones ante quién corresponda” y pide a TVE “que ampare a su cámara, retenido mientras trabajaba para esta empresa, en cuantas acciones jurídicas lleve a cabo Julio para reparar el atropello del que ha sido víctima”.