Éxito literario para Mark Watson, el 'Berto Romero' de la TV británica
Mark Watson es un guionista treintañero con una meteórica carrera en el mundo de la comedia y de los concursos televisivos. Es una cara conocida en la BBC y en ITV y una persona que usa con competencia los medios de comunicación y conoce las leyes que los rigen. Es bueno en la improvisación, en los monólogos cómicos, en la radio y un excelente comunicador y escritor y, pese a su temprana edad, ya ha hecho sus pinitos en Australia y Nueva Zelanda.
¿Quieren ver su aspecto y como se desenvuelve en el mundo de la tele? Aquí presenta una parodia de concurso con famosos en BBC Four:
Lo traemos hoy a Vertele.com porque es notícia en España por la publicación de su novela Once vidas (Roca Editorial), narración coral que relata las peripecias de Xavier Ireland, conductor de un programa de radio tipo Hablar por hablar, espejo de vidas atormentadas y de corazones solitarios, y de otras diez personas de su entorno.
Los personajes que desfilan en Once vidas no tienen nada en común, pero al final están relacionados. La pieza clave es Xavier, quien esconde un secreto, el motivo por el que abandonó Australia separándose de su novia, amigos y familia y que incluso le llevó a dejar su antigua identidad, Chris Costworld.
Murray, el compañero tartamudo de Xavier, quiere triunfar, como no, en la radio. Como lobos solitarios, acompañan sus soledades. Una noche acuden a un bar para una ronda de citas rápidas. Allí Xavier conocerá a otro de los personajes claves de la novela, Pippa, una chica con personalidad a la que contratará como mujer de la limpieza y que se convertirá en amiga y amante.
El efecto mariposa
Once vidas está cerca de la tele y de la radio tanto por su autor como por la omnipresencia de la comunicación en el relato de las vidas en cadena que componen el mosaico multicolor con el que se construye el libro.
De la novela nos gusta la frescura, su actualidad, la cercanía cómplice con nuestro mundo y un entramado de relaciones que sugiere la ilusión de que la humanidad entera está conectada por un invisible cordón umbilical.
Nada nuevo, porque el “efecto mariposa” ha inspirado decenas de películas, series de televisión y novelas, pero el ritmo de la narración avanza, impredecible, y engancha al lector que acaba enamorado de Xavier y sus cotidianas peripecias.
Es inevitable, como se pueden imaginar, que el humor de Mark Watson, guionista y cómico, se cuele en el libro, que está teñido de principio a fin de situaciones que provocan sonrisas y, en algunos casos, carcajadas, pero que acaban derivando en un sentimiento agridulce, de escepticismo compartido.
No estamos, pués, ante una novela de humor. En la actitud escéptica de Xavier intuímos que su acompañante fiel es un sentimiento trágico que comparte con sus compañeros de viaje.
Un puzzle de vidas
Por las páginas del libro desfilan un locutor, un chico joven y su madre, crítica en una revista de gastronomía, un propietario de restaurante con sus camareros, un chef, un comercial vende-pisos y su impresentable jefe, una psicóloga, una periodista, una presentadora con lío, todos unidos en la madeja de una vida urbana compleja.
A pesar del desencanto que la envuelve, Once vidas es una novela que se lee con auténtico placer. En todo momento el lector tiene la sensación de que sus personajes, muy humanos, se han aprendido aquello de que “no es más rico el que más tiene, sino el que menos necesita” y que está claro que, para ser feliz, tienes que empezar aceptándote y conformándote con lo que tienes o puedes llegar a tener.
Los personajes que desfilan por el libro son tus amigos, tus vecinos, tus compañeros de trabajo, gente normal, positiva, sometidos a los pequeños desastres de la vida cotidiana, que aceptan con resignación.
Si a estos tipos atractivos, en los que te reconoces y a los que reconoces, añades que la lectura provoca una cierta adicción, estamos ante un libro que apetece leer.y al que pronosticamos éxito de ventas.
