La expresión 'reality show' se cuela en el juicio por el caso Nóos

La actualidad pasa estos días por Palma de Mallorca, donde se está celebrando el juicio por el caso Nóos. La imagen de la Infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarín, ha copado los titulares y ha obligado a programas matinales como 'Al rojo vivo' y 'Las mañanas de Cuatro' a alterar su horario habitual.

Las primeras horas del juicio también nos han dejado una frase relacionada con el mundo televisivo. El abogado de Diego Torres, Manuel González Peeters, ha llamado la atención por solicitar que declaren como testigos el rey Felipe VI o su padre, el rey Juan Carlos I.

Estas peticiones han sido denegadas con contundencia y ha provocado el enfado del fiscal anticorrupción, Pedro Horrach. Para este último, todas estas peticiones no tienen otra finalidad que “desviar la atención y convertir este juicio en un reality show”, como así lo demuestra que también quisiera que declararan “la señora Corinna o Irene de Grecia”, refiriéndose a la “amiga especial” del rey Juan Carlos y a la hermana de la reina Sofía.

Horrach empleó este término que se utiliza habitualmente para describir a programas como 'GH' o 'Supervivientes', caracterizados por basarse en los conflictos de un grupo de personas y que, en casos como éste, tienen un cierto tono despectivo.

Para Horrach, además, “ya es suficiente el interés mediático que genera este juicio como para que quiera convertirlo en una ceremonia para la distracción del vecindario”. González Peeters, por su parte, se ha defendido asegurando que “no hay ni un solo testigo propuesto” por la defensa “que no guarde relación con los hechos y no esté debidamente documentado”.