Garzón empieza a investigar la compra de Endemol por parte de Telefónica
Tres años después de la compra de Endemol, la Justicia española se interesa por una operación financiera que sigue teniendo muchas zonas oscuras y que movió cifras insólitas incluso para el disparatado mundo audiovisual: 4.790 millones de euros, casi 800.000 millones de pesetas del año 2000. John de Mol, la imagen de un triunfador Los espectadores españoles quizá no saben quién es John de Mol, y apenas han oído hablar de la Compañía que fundó, Endemol, pero han cenado muy a menudo con las ideas que ha puesto en marcha. Programas como Lo que necesitas es amor y Gran Hermano son familiares para todos los hogares españoles. Después de la compra de dos grandes productoras españolas, Gestmusic y Zeppelin, la presencia de la marca en todas las casas de este país es permanente: Crónicas Marcianas, Operación Triunfo, Lluvia de Estrellas, X ti, Confianza ciega y un largo etcétera de productos que han impregnado la televisión de todas las cadenas en los últimos diez años. Endemol tiene un catálogo de más de 500 programas y presencia directa, con productoras propias, en 19 países, aunque sus creaciones han llegado a más de un centenar de cadenas en cincuenta países de todo el mundo. Endemol es un ejemplo de cómo un pequeño país, Holanda, con la confianza de sus cadenas de televisión, consigue convertirse en una potencia mundial de la creación televisiva. Un buen ejemplo para una España donde los ejecutivos solo confían, a menudo, en productos inventados fuera y probados en otros países.
Telefónica decide comprar Endemol
Pero a lo que íbamos: Telefónica, en la época en que era presidida por Juan Villalonga, y en una estrategia de expansión mundial como productor de contenidos para multimedia, decide comprar Endemol. En el año 2000 se cierra la operación y se decide pagar un total de 4.790 millones de euros, una cifra que en aquel momento, a pesar del buen momento de la televisión, pareció disparatada. Los dos socios, John De Mol y Van Ende, se convirtieron en ricos para muchas generaciones. Se realizó un canje de acciones que convirtió a John de Mol, al que le correspondieron 1.322 millones de euros en participaciones, en el accionista individual más importante de Telefónica. El canje se realizó a razón de 6,2 acciones de la operadora por uno de la productora y la operación provocó inmediatas reacciones. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que controla la Bolsa española, señaló en un comunicado que “Telefónica no ha recabado de un asesor externo informe alguno que justifique la educación de canje pactada para las acciones de Endemol y Telefónica”, según recuerda el suplemento Domingo del diario El País. En el 2000 se pactó un precio que era, como media, un 60 por ciento superior a la cotización de los títulos de la productora en los meses anteriores a la realización del acuerdo y casi el triple que cuando comenzaron las negociaciones (el 3 de enero de 2000).
Los puntos de conflicto: información privilegiada y pago por empresas no adquiridas La Justicia ha abierto ahora el melón para depurar responsabilidades. Por una parte, Baltasar Garzón quiere saber si se pagó de más por la productora e intentará averiguar si hubo pago de comisiones en la compra de Endemol. En Holanda, el Ministerio fiscal ha abierto también una investigación para averiguar si el ex presidente de Philips, Cor Boonstra, hizo uso de información privilegiada en la compra de acciones de Endemol, porque días antes del anuncio de la compra de la productora por parte de Telefónica, adquirió un fuerte paquete de acciones.
Por otra parte, Interviú reveló que la Fiscalía española Anticorrupción maneja documentos que prueban que Endemol vendió parte de sus activos antes de integrarse en Telefónica, provocando pérdidas de 571 millones de euros a los accionistas de la operadora. Según la revista, esta venta de activos se ocultó a la CNMV. Según esta información, la valoración del mercado sobre Endemol no superaba los 1.500 millones de euros (unos 250.000 millones de pesetas) y se acabaron pagando 4.790. O sea, casi el triple. Pero, al mismo tiempo, un día antes de que César Alierta formalizara la compra, la productora holandesa vendió Endemol International Distribution a una compañía canadiense, Can West Entertainment, por lo que se conoce como “su valor en libros”, o sea sin obtener beneficio alguno. En total, 97 millones de euros, cuando la valoración de la compra global, de acuerdo con los beneficios que daba, hubiera sido –según el precio pagado por Telefónica- de 668 millones de euros. En cualquier caso, esta Compañía nunca llegó a integrarse a Telefónica porque fue vendida un día antes de firmarse la operación.
Los interrogatorios que realizará el juez Garzón intentarán aclarar si se produjo algún delito de los que apunta la Fiscalía Anticorrupción: “administración desleal, falsedad documental, además de otros delitos societarios”. Las comparecencias judiciales se iniciarán el próximo día 13 de marzo.
* Fuentes: Interviú y El País