Llega a España la 'Anne Germain' americana: “Los espíritus de Michael Jackson y Whitney Houston se me aparecieron de repente”
Discovery MAX estrena este domingo 9 de febrero ‘Una médium en casa’, un docureality que gira en torno a la vida de la médium Theresa Caputo, todo un fenómeno de la TV en EE.UU., con una lista espera de tres años.
El estreno de la serie batió todos los récords de audiencia en TLC, el canal de pago en el que se ofrece, y esta vidente de Long Island ya ha aparecido en todos los talk shows importantes: Ellen DeGeneres, Jay Leno….
En esta entrevista que Vertele les ofrece en exclusiva, Theresa Caputo asegura haber contactado con los espíritus de famosos como Michael Jackson y Whitney Houston, además de describir con pelos y señales en qué consiste su vida, cómo lleva su familia que esté alerta 24 horas al día y qué supone para ella haberse convertido en la médium más solicitada de EE.UU.
'Una médium en casa' es una apuesta diferente de Discovery Max, que busca abrirse a un público más femenino, también con el próximo ‘Amish: rompiendo las reglas’.
Comenzaré por preguntarle si los espíritus con los que habla son habitualmente bondadosos o malvados. ¿Podría compartir con nosotros alguna experiencia que haya tenido con un espíritu malhumorado o si tiene contacto con alguno de ellos?
¡Claro! Lo que sé es que he podido canalizarlos una vez que el alma ha recibido enseñanzas en el otro lado. Algunos espíritus me han contado que repasan su vida aquí, en el mundo físico. Lo que ocurre es que el alma, especialmente si no es buena, recibe enseñanzas y crece en el otro lado; por lo que se convierte —por así decirlo y utilizando sus propias palabras— en un «espíritu bondadoso». De este modo, las almas que no fueron buenas aquí, se vuelven buenas en el otro lado. En una ocasión, contacté con alguien que hizo cosas muy malas en el mundo físico; ni mis guías espirituales ni Dios permitieron que mi energía descendiera lo suficiente para canalizarlo. Pero podía observarlo, podía sentir su espíritu malvado. Nunca se me permitió bajar lo suficiente para canalizarlo.
Mucha gente no cree que se pueda hablar con las personas fallecidas. Por este motivo, piensan que su trabajo es algo parecido al de los charlatanes.
La mayoría de mis sesiones tratan sobre la alegría y la felicidad, sobre las cosas que hicieron en el mundo físico y por lo que están pasando. ¿Quién podría tener conocimiento de eso? La gente me acusa de hacer un espectáculo de magia. Pues bien, ¿cómo puedo yo hacer eso solo con mirar a alguien o saber algo que hicieron en recuerdo de su ser querido? Todas esas emociones que guardan y los sentimientos con los que describen los últimos momentos de su ser querido en el mundo físico son cosas que no te puedes inventar. Por eso me gustaría decirles que simplemente reciban los mensajes, que son ellos los que desean transmitirles que en las cosas que ocurren a su alrededor también están ellos; nada más. Ustedes no tienen que creer en lo que hago; pueden decir lo que quieran sobre mí... porque no se trata de mí.
¿Recuerda a qué edad vio el primer espíritu?
Tenía 4 años cuando empecé a percibir espíritus; más tarde, a los 28 me di cuenta de que podía comunicarme con personas que habían fallecido. Así que pasé gran parte de mi vida sin saber de lo que se trataba. Fue a los 28 años cuando me percaté de que era capaz de conectar con los espíritus.
¿Cómo son los espíritus físicamente? ¿En qué se diferencian de las personas vivas?
Veo sombras; de hecho, veo siluetas y formas, algo parecido a las imágenes desenfocadas. Yo no miro tal y como se mira en el mundo físico. Si un espíritu desea describirme algo de su físico o la apariencia que tenía, me lo muestra en un flash y ya lo veo.
¿Su marido y sus hijos se acostumbran realmente a sus habilidades?
En verdad, no sé de qué forma te puedes acostumbrar a mi estilo de vida. Por ejemplo, mis hijos simplemente han crecido en este entorno. Cuando iban al colegio y les preguntaban que a qué se dedicaban sus padres, siempre respondían: «Mi padre es italiano, se dedica a la importación y a la distribución mayorista, y mi madre habla con los muertos». Así es como se han criado mis hijos.
¿Ha contactado alguna vez con el espíritu de un personaje famoso?
En una ocasión, por ejemplo, me encontraba en un recinto haciendo una sesión en directo con una niña pequeña que, desgraciadamente, había perdido a su madre. Cuando intentaba canalizar a la madre, de repente vi a Whitney Houston de pie justo al lado de su mamá. Le pregunté: «¿Conocía tu madre a Whitney Houston?, ¿le gustaba a tu madre Whitney Houston?; acabo de verlas dentro de un coche cantando la canción I Will Always Love You, ríendo y llorando». La niña me contó que, de camino al recinto, ella y su amiga venían en el coche escuchando esa misma canción de Whitney Houston y que se habían pasado todo el camino llorando. Eso significaba una validación de ambas, ya que ella nos había traído a la sesión no solo a su madre, sino también a Whitney Houston.
¿Tiene alguna anécdota con Michael Jackson?
R: Sí, fue hace algún tiempo, poco después de fallecer. Estábamos en una reunión en mi casa. Allí había una chica joven, de unos 20 años. Michael Jackson apareció de pronto; supe que era él porque no paraba de mostrarme su chaqueta roja de cuero y el guante. Estaba bailando y cantando. También me enseñó una camiseta de un concierto, creo que era aproximadamente de 1986, y le dije a la chica: «Esto te va a parecer una locura». Esta es la manera en la que yo interpreto las cosas, incluso si no sé lo que significan o no las comprendo, yo intento transmitir lo que el espíritu me cuenta. Le comenté: «Me está mostrando una camiseta de un concierto de 1986; ni siquiera sé si Michael Jackson hizo una gira ese año». De verdad que no tenía la menor idea. La chica me miró y me contestó: «Yo llevaba puesta esa camiseta justo antes de venir al grupo». Me extrañó que alguien vistiera una camiseta de los ochenta y más en el caso de una chica tan joven, de unos 20 años. Me encanta la música de Michael Jackson, sin ofender, pero es raro que una persona se ponga una camiseta de un concierto suyo de los años ochenta justo antes de asistir a una reunión grupal. Fue sencillamente alucinante. Esa fue la interacción que tuve con él.
Ha habido casos en los que su entorno físico se ha visto modificado por un espíritu. ¿Tienen el poder de formar parte de lo que le rodea? ¿Se pueden mover?
Por supuesto que sí.
¿Cómo lo hacen?
¿No le ha ocurrido en alguna ocasión que ha puesto algo en algún sitio exacto y, cuando vuelve, ve que ese bolígrafo, por ejemplo, ya no está en el lugar donde lo había dejado? No sé si los espíritus son los culpables; lo que sí sé es que pueden mover cosas. Pueden girar los marcos de los cuadros, tirar cosas de las estanterías o echar al suelo una manta del sofá, como le ha ocurrido a mucha gente. Por supuesto que los espíritus tienen esas habilidades. También pueden hacer que la luz parpadee. Algunas almas pueden encender o apagar juguetes, o incluso un televisor. Si su energía es tan fuerte como para encender o apagar aparatos, es sencillamente impresionante.
Muchos médiums evitan ser populares, procuran no salir en televisión y esquivan entrevistas de los medios de comunicación. Con respecto a esa cuestión, ¿cómo decidió tener su propio programa de de televisión?
Todo comenzó por una amiga mía que siempre me decía que yo estaba hecha para la televisión. Su hermana tenía relación con dicho medio y me preguntó si podría estar interesada. Nunca me había parado ni un minuto a pensar en hacer televisión, pero al final era igual que lo que había elegido como profesión, lo que había decidido ser y hacer: una médium que ayuda a las personas. No puedo enumerar a cuántas personas he podido prestar ayuda. Recibo unos 17.000 correos electrónicos a la semana de personas que me cuentan cómo les ha ayudado mi programa. Una vez más, no se trata de que yo hable, ni de hablar de mí como médium. Es decir, yo no lo concibo de esa forma.