Gestmusic demanda a Josep María Baget Herms, crítico del diario La Vanguardia, por un comentario sobre «O.T.»
Los fundadores de Gestmusic, Tony Cruz y Josep María Mainat han presentado una demanda contra Baget por entender que un comentario suyo sobre «Operación Triunfo» es infundado e injustificado y supone un ataque a la honradez de los profesionales de Gestmusic. El origen de la demanda está en el juicio que le mereció a José María Baget, el decano y quizá el más prestigioso de los críticos de TV en España, la retransmisión en tiempo real del supuesto y finalmente inexistente cólico nefrítico sufrido por el concursante de la segunda edición de «Operación Triunfo» Enrique Anaut durante la emisión en directo del programa en octubre de 2002. José María Baget, crítico de televisión de «La Vanguardia» desde 1978, entendió, en un artículo publicado en ese mismo mes, que era una lástima el tratamiento dado a la indisposición sufrida por el concursante, próximo al sensacionalismo. Según Baget, con esa actuación, «O.T.» utilizaba elementos ajenos a su estilo (un cólico nefrítico que finalmente no fue tal) para mantener la audiencia. Pues bien, la demanda presentada por Gestmusic, cuya vista oral está fijada para el próximo mes de marzo, entiende que pese al rigor con que se realiza dicho programa José María Baget ha puesto en duda la forma de actuar de «O.T.» sin fundamento alguno y de un modo arbitrario. Esas líneas del veterano crítico de «La Vanguardia», que lleva realizando esa labor en el rotativo catalán desde 1978, son consideradas por los impulsores de la demanda, Tony Cruz y Josep María Mainat, como un ataque a la honradez y la profesionalidad de los trabajadores de Gestmusic. Es más, consideran que lo que Baget pretendía transmitir en el citado artículo es que el programa estaba recurriendo a los conocidos montajes para aumentar la audiencia. La demanda, que se limita a exigir la publicación de la noticia en «La Vanguardia» en caso de sentencia condenatoria, ha causado asombro en el sector audiovisual, donde José María Baget goza de una gran consideración profesional. Precisamente el pasado mes de noviembre recibió el reconocimiento de la Academia de Televisión (ATV), que le distinguió con uno de los Premios Talento. Según ha sabido este periódico, hasta el propio director de Televisión Española, Juan Menor, ha intercedido, sin éxito, ante los fundadores de Gestmusic para que retiraran la demanda, una actuación judicial que en ningún caso es respaldada por TVE, cadena propietaria del formato musical. Tony Cruz, uno de los demandantes, ha llegado a proponer personalmente a Baget la retirada de la demanda si «La Vanguardia» y Gestmusic corrían a medias con las costas del proceso en curso. Dicha oferta fue rechazada por el periódico, que respalda plenamente la actuación de su colaborador. Baget ha explicado que, a su juicio, la demanda «es una forma de presión y un ataque a la libertad de opinión». El crítico, profesor de Historia de la TV en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, recuerda las más de 20 referencias favorables sobre «O.T.» y destaca el hecho de que Gestmusic se haya fijado sólo en ese artículo. En cualquier caso, considera muy difícil la pretensión de los fundadores de la productora catalana de lograr el respaldo mayoritario de la crítica. «Lograr que los críticos estén a su favor es muy difícil: o ganas dinero o tienes prestigio», y los creadores de Gestmusic han elegido lo primero. La tercera edición de «Operación Triunfo» concluyó el pasado domingo 21 de diciembre con una audiencia sensiblemente inferior a la de las dos ediciones anteriores. Así, «O. T. III» ha logrado 3,3 millones de espectadores de media, con una cuota del 23,2 por ciento. La segunda edición, a la que se refiere la crítica de Baguet objeto de la demanda, obtuvo una cuota del 30,2 por ciento, con 3,7 millones de espectadores de media. Mientras que la primera entrega finalizó con una media del 42 por ciento de cuota de pantalla y 4.467.000 espectadores. En esta primera edición, la gala más vista fue la que tuvo lugar el 11 de febrero de 2002, día de la final, que congregó ante el televisor a 12.873.000 espectadores y un 68 por ciento de «share».