La “marea azul” y la crisis en las autonómicas
Los resultados de las elecciones autonómicas provocarán una gran convulsión en el sector de las televisiones regionales, debida en buena parte a motivos económicos y a la fragmentación de la audiencia, pero también a las consecuencias políticas de los comicios.
Por una parte les afecta la crisis publicitaria y el déficit que golpea a las comunidades autonómas; por otra, la oleada de privatizaciones que ha anunciado el Partido Popular. Recortes de sueldo, de plantilla y reestructuraciones estarán en el orden del día en los próximos meses.
La merma de publicidad redoblará los esfuerzos de la patronal privada, Uteca, para que sigan el mismo camino de TVE en lo que se refiere a eliminación de anuncios, batalla que también se va a librar en lo que queda de año.
Las audiencias, a la baja
La atomización del sector y la competencia de las TDT temáticas ha erosionado las audiencias de las televisiones autonómicas. El grupo (10,7%) baja siete décimas en mayo y queda por debajo de la barrera del 11%, tras seis meses consecutivos superándola. TV3 lidera en Cataluña y crece tres décimas y vuelve a ser la autonómica con mayor cuota del grupo (16,1%).
Destacan los retrocesos experimentados por TVG (1,6 puntos menos que en abril, 11.8%), Telemadrid (-1,4) y C9 (-1,1), estas dos últimas con mínimo mensual (6.2% y 5.6%); así como TVCAN (-1,1), Aragón TV (-1,1; 9.6%), IB3 (-1,1, con 4.9% de share), CSUR (-1, con 11%), TPA (-0,9), ETB1 (-0,5), 7RM (-0,3) y CMT (-0,2; 7.1% en mayo).
Uno de los argumentos para privatizar es su coste para el erario público, insostenible en tiempo de vacas flacas. A cada español las autonómicas le costaron 110 euros en 2009 contra 34 para financiar TVE.
La vasca ETB fue la más cara (191 euros de coste por hogar), seguida de Canal 9 (117), y TV3 (114). La de Castilla-La Mancha costó a cada hogar 104 euros.
¿Llegarán finalmente las privatizaciones anunciadas?
El Partido Popular hace años que manifiesta la voluntad de privatizar los canales autonómicos, aunque ni lo ha intentado en las comunicades que controla. Dolores de Cospedal, flamante presidenta de Castilla la Mancha y Esperanza Aguirre, reelegida en Madrid, parecen estar dispuestas a afrontar esta iniciativa.
En Aragón ya está abierto el proceso para modificar las externalizaciones y se están aceptando ofertas. Valencia, Galicia, Murcia y Extremadura pueden plantearse una solución similar en los próximos meses.
Valencia, el mayor agujero
Curiosamente, la televisión autonómica con más conflictos es la Radiotelevisión Valenciana, gestionada por un gobierno del PP que acumula, ella sola, 1.287 millones de euros de deuda. Le sigue Telemadrid, con 250 millones. Por detrás están la televisión catalana, con 45 millones; la gallega, con 25; la balear, con 20,8; la vasca, con 16; la extremeña, con 1,5; y la canaria, con 0,3. No se tienen datos precisos del resto de televisiones regionales.
La tardanza en el pago de deudas a proveedores de Canal 9, ha provocado la quiebra de algunas empresas. En algunos casos los tiempos de espera son de 18 o 20 meses, con dificultades para acceder al crédito.
En mayo, con un 5,6% de cuota de pantalla, Canal 9 registró el peor dato de su historia, perdiendo 1,1 puntos con respecto a abril a pesar de retransmitir la final de la Liga de Campeones. La cadena no aprovecha el éxito electoral de Francisco Camps en las pasadas elecciones valencianas.
¿Por qué huyen los telespectadores de Canal 9? Quizás porque ha abandonado en parte la producción propia en las principales franjas horarias y ha generado malestar por su línea informativa, además de verse mezclado en escándalos sonados como el caso Gürtel. Un ejemplo es el programa DBT, espacio de análisis y debate conducido por la periodista Isabel Durán que, en prime time, tiene cuotas del 1,5% y 36.000 espectadores. Algunos tertulianos hacen “doblete” con programas de Intereconomía, como 'El gato al agua'.
Sus detractores señalan que tiene un exceso de películas americanas y retransmisiones deportivas que el público prefiere ver en otros canales, como La Sexta (fútbol o Fórmula 1).
Todo hace pensar que se acerca la privatización y, con ella, el despido de centenares de trabajadores de una plantilla que es superior a las de Telecinco y Antena 3 juntos, un total de 1700 en el conjunto del ente público, 1100 en la televisión.
En Castilla la Mancha se espera la salida de Jordi García Candau
María Dolores de Cospedal ha dejado claro que quiere privatizar Castilla la Mancha Televisión. Argumenta que la cadena arrastra una importante deuda, aunque Jordi García Candau, director general desde su fundación, mantiene que el servicio público de televisión es razonable para los castellano-manchegos:104 euros netos por hogar según datos de 2009.
Lo que parece claro es que los días de Jordi García Candau están contados. La llegada de Cospedal implica que habrá cambios en la dirección de la cadena, por razones de afinidad ideológica.
CMTV tiene en plantilla a 380 personas y su audiencia en el mes de mayo ha sido de 7.1% de cuota de pantalla. Su presupuesto es de 42 millones de euros anuales.
En Aragón TV, carpetazo a Mediapro
Luisa Fernanda Rudi deberá decidir el futuro de Aragón TV, con cinco años de existencia y un presupuesto de 60 millones de euros al año. Suena como Director General José Ángel Biel. La primera consecuencia será la sustitución de Mediapro, concesionaria de los servicios informativos externalizados, que previsiblemente pasarán a Chip, la productora del periódico “Heraldo”.
En la práctica, las consecuencias de estas decisiones políticas son inciertas. En Aragón, por ejemplo, la plantilla fija de la televisión es de 145 personas, mientras que el resto de trabajadores forman parte de empresas externas. Buena parte de esta gente podría perder el trabajo.
La cadena tuvo un 9.6% de cuota en mayo. Sus programas de éxito: “Dándolo todo Jota”, con un promedio de 88.000 espectadores, el 16,7 por ciento de cuota de pantalla. Destaca también el informativo “Aragón Noticias 1” que fue seguido por 87.000 espectadores de media, un 23,8 por ciento de cuota de pantalla; “Pequeños pero no invisibles”, con 78.000, y “La Llave Maestra”, con 66.000 espectadores.
IB3 debe a proveedores 60 millones de euros y prescindirá del fútbol y la Fórmula 1
En las Baleares también ha sonado la señal de alarma. La deuda de IB3 con sus proveedores asciende a 60 millones de euros. Su director general saliente, Pedro Terrasa, ha reconocido que es “la principal dificultad” de la cadena y admite que los productores de televisión y las empresas de servicios están “financiando la actividad de la radiotelevisión autonómica”.
Para salir de esta situación, IB3 ha solicitado al Govern balear un endeudamiento bancario de 30 millones de euros a amortizar en seis años. En su plan de austeridad IB3 tiene previsto prescindir de contenidos televisivos como la retransmisión de la Fórmula 1 y los partidos de la Liga de fútbol.
La dependencia del sector audiovisual de las Baleares de IB3 es dramática: nueve de cada diez euros que facturan las productoras audiovisuales dependen del canal autonómico.
La aportación pública por habitante a IB3 asciende a 45 euros. Esta cantidad alcanzó un máximo de 73 euros en 2006, cuando el coste total de la radiotelevisión rondó los 74,8 millones de euros. Desde 2005 IB3 ha costado 470 millones de euros.
José Ramón Bauzá, presidente electo del Gobierno balear, ha anunciado que dará entrada en IB3 a capital privado.
IB3 acabó mayo con un 4.9% de cuota de pantalla.
TV3: reducciones de sueldos y externalizaciones en el horizonte
En Cataluña, con las elecciones más lejanas, los problemas son otros. La crisis de audiencia es mínima, pero la Generalitat ha emprendido un plan de recortes y desburocratización que también afecta a la televisión. Hay recortes de sueldos, reducción de presupuestos y paralización de proyectos. En el horizonte cercano no se descartan externalizaciones que podrían provocar reducciones de plantillas.
También se ha decidido modificar la estructura de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), gestora de TV3, para que absorba dos de sus filiales. La incorporación de Activa Multimedia Digital y de CCRTV supondrá un ahorro de 5,7 millones de euros en 2011 y 2012.
TV3 es, con diferencia, la televisión autonómica más cara de toda España. Su presupuesto ronda los 400 millones de euros al año y acumula una deuda de 45. También es la que tiene la mayor audiencia, con un share del 16.1% en mayo.
Además, es la que tiene mayor plantilla, ya que cuenta con 2.700 de los más de 8.000 empleados que suman las televisiones autonómicas españolas.
La nueva regulación de la CCRTV contempla que el consejo de gobierno quede reducido de 12 a 5 miembros y que el director general sea sustituido por un gerente. El cargo de presidente se mantiene, así como el consejo asesor de contenidos y programación. El sistema de elección no se modifica, pero se especifica que los miembros del consejo de gobierno “han de ser personas con méritos profesionales relevantes”.
Canal Sur, traspiés con la audiencia en mayo
Canal Sur marcó en mayo una cuota del 11% tras perder un punto y marcar así su segundo peor histórico de audiencia. El referente de Canal Sur es TV3, con la que desde hace una década ha alternado como la autonómica más vista. Pero en este curso, la crisis y la fragmentación han situado a la autónomica andaluza a más de 5 puntos de TV3. Desde enero de 2010 ha bajado 3 puntos de share.
Los últimos estrenos no han ido especialmente bien: “Nacidas para cantar”, el relevo de “Se llama copla”, con María Teresa Campos y Rocío Carrasco, no tiene un gran dato en la noche de lunes, aunque supera la media de la cadena. En su estreno tuvo un 12,9%.
“La clase”, que comenzó con mal pie los lunes, sigue sin levantar grandes audiencias en la medianoche del domingo, sobre el 5% y no aprovecha el arrastre de Arrayán (medio millón de espectadores, sobre el 15% en una noche complicada).
Entre lo que funciona bien, “Hace falta valor”, el docu-reality taurino de Enrique Romero que arrancó, con la Champions, en un 18,1% de cuota. Sin el fútbol sus registros han estado sobre el 12%.
“75 Minutos”, presentado por Toñi Moreno, traducción andaluza de Callejeros, tiene en martes alrededor de 600.000 seguidores y entre el 12 y el 16% de cuota. El veterano “Menuda noche”, de ZZJ, los viernes, ha perdido fuelle pero sigue siendo uno de los espacios más competitivos de Forta. Suele superar los 350.000 y el 13%.
Canal Sur tiene 239 millones de euros de presupuesto y 1680 empleados. Se desconoce su deuda.
Telemadrid, audiencias a la baja
La situación de Telemadrid, que controla el Gobierno del PP de Esperanza Aguirre, no es tampoco pujante. La emisora madrileña registró en mayo una audiencia del 6,2% y tiene una deuda acumulada de 229 millones de euros.
Su presupuesto, contando con el contrato-programa que tiene con el Gobierno regional, es de 138 millones y su plantilla de 1.176 trabajadores (RTVM) y de 966 (solo Telemadrid).