Muere tras ganar un concurso en el que comió decenas de cucarachas y gusanos
El premio era una serpiente pitón valorada en 850 dólares. La prueba para conseguirlo, comer cuantas más cucarachas y gusanos se pudiese. Y el final, trágico: la muerte del vencedor de este particular “concurso”.
Edward Archbold tenía 32 años de edad y era un apasionado de los animales, por eso no dudó en apuntarse a esta competición organizada por la tienda de reptiles Ben Siegel, de Deerfield Beach, y así poder optar a llevarse al preciado reptil.
La misma idea la tuvieron otras 20 personas, que también se apuntaron al concurso pero que, al acabar el mismo, no se sintieron indispuestas ni empezaron a vomitar, como sí le ocurrió a Archbold.
Ante estos síntomas, un amigo ayudó a Archbold a tumbarse en el suelo de la tienda y llamó a urgencias, tras lo cual una ambulancia se personó en el establecimiento para trasladarle a un centro médico, lugar en el que falleció.
El dueño de la tienda: “Estaba siendo el alma de la fiesta”
El dueño de la tienda de reptiles que organizó el eventó se mostró muy afectado tras el suceso, y no dudó en señalar que Archbold estaba siendo “El alma de la fiesta”, asegurando que “Hizo nuestra noche mucho más divertida”. “Eddie era un buen tipo. Le conocimos esa noche, pero todo el mundo que trabaja aquí le cogió mucho cariño”, añadió el propietario del local.
En cualquier caso, la tienda estaba ya protegida ante “imprevistos” de este calibre, ya que como explicó Luke Lirot, el representante legal del establecimiento, los participantes firmaron una declaración aceptando su responsabilidad al concursar. “El consumo de insectos está aceptado en todo el mundo”, añadió Lirot, que además aseguró que los insectos fueron criados de forma “segura” y bajo “control medioambiental”.