'Pekín Express' expulsa a los 'influencers', acaban en comisaría y hacen llorar a Pedroche
La décima etapa de 'Pekín Express' terminó en un mar de lágrimas. La emoción hizo acto de presencia a la hora de despedir a la pareja eliminada, que de nuevo volvió a ser la forma por Jonan y Priscilia.
Apenas una semana después de ser repescados, los expertos en redes sociales volvieron a decir adiós a la aventura, lo que provocó que a más de uno se le escapara una lágrima, incluída Cristina Pedroche.
Los primos siguen adelante con mucho sufrimiento
Jonan y Priscila se jugaron su continuidad ante Matías y Nabil. Ambas parejas protagonizaron una etapa llena de tensión, con los primos proclamándose finalmente como pareja ganadora. Eso sí, con mucho sufrimiento, tal y como confesó Matías. Tirando de humor, el mallorquín explicó tras la clasificación que “tenía el ojete que no me entraba ni el bigote de una gamba”.
Jonan y Priscila, retenidos en comisaría
Lo cierto es que Jonan y Priscila no lo tuvieron nada fácil. Primero, porque arrastraban un hándicap. Y segundo, porque estuvieron varias horas retenidos por las autoridades de la zona, que tuvieron que intervenir ante el acoso que ambos concursantes estaban sufriendo por parte de los vecinos. “Se está liando aquí la de Dios, vámonos” decía la pareja ante tan desesperante situación.
En total, la pareja estuvo tres horas en comisaría, donde las autoridades comprobaron todos sus permisos y les aconsejaron que abandonaran su hándicap.
Pepe, Blanca y su masaje de lujo
Lejos de ese sufrimiento estaba Pepe, que tuvo un día de lo más plácido. Todo a raíz de la victoria que tanto él como Blanca consiguieron en la primera fase, y que automáticamente les libraba de competir durante el resto de la etapa.
En su lugar, tanto él como Blanca recibieron un tratamiento de lujo, incluyendo un masaje que Pepe, de primeras, prefirió rechazar porque “me 'armo'”. Eso sí, el masaje no resultó ser como esperaban.
Pepe, tras torear a una vaca: “Pido perdón”
Pepe, eso sí, se metió en un lío durante su jornada de relax. El aristócrata se encontraba en la playa, disfrutando del día, cuando vio pasear a una vaca. A Pepe se le ocurrió que sería divertido torearla. Y lo hizo, pero sin saber que en la India es un animal sagrada. El aristócrata se disculpó una vez que se enteró de su error.
Sonia e Ylenia provocan una discusión matrimonial
Sonia e Ylenia no torearon a una vaca, pero sí provocaron la discusión de un matrimonio de la India. Madre e hija consiguieron un vehículo para llegar a la meta, pero el conductor tenía que tomar una decisión. Por un lado, hacer una parada para llevar a su mujer a trabajar o, por el contrario, conducir a Sonia e Ylenia a su destino.
