La primera cadena de televisión privada en Francia, TF 1, anunció ayer que prepara actualmente un reality show con políticos para lanzar en octubre. La idea ya está generando controversia entre los críticos y medios de comunicación franceses. Según los responsables del programa, 36 horas pretende acercar la política a los franceses. Para ello, seguirá con las cámaras a un reprentante político conocido que se preste a convivir durante dos días con una familia francesa. Acercar la política al pueblo En el episodio pilioto, una matrona residente en un suburbio obrero de París pasó 36 horas con Pierre Bèdier, secretario de Estado para los programas inmobiliarios de la justicia. Según ha comentado el propio Bedier a la prensa, su estancia con la parisina incluye una visita a una pizzería y una comida con su familia.Como la chica era soltera, Bédier durmió en un hotel, pero vivió con ella de forma “intensa” y la acompañó al paritorio, donde asistió a un parto y a una cesárea, así como al bautizo del hijo de una amiga, entre otras cosas. El protagonista del estreno de 36 horas será un miembro del Gobierno conservador francés, el secretario de Estado de Relaciones con el Parlamento y portavoz del Ejecutivo, Jean-François Copé. Aunque éste aún no ha escogido a su familia de acogida, baraja la posibilidad de instalarse en el hogar de unos profesores, gremio en el que reina un fuerte descontento. 36 horas tendrá una emisión mensual y estará presentado por la periodista Ruth Elkrief. La productora es 2P2L, conocida por el documental Les yeux dans le Bleux que realizó sobre la selección francesa de fútbol en 1998 y, más recientemente, por Comme un coup de tonerre, acerca de la campaña presidencial del ex primer ministro Lionel Jospin. Diferencias de opinión entre los políticos franceses El programa ha sido mejor recibido entre los políticos conservadores que entre los izquierdistas. “La política es realidad en sí misma. Este programa desvaloriza a los políticos más que ensalzarlos; yo no pienso participar”, ha declarado a Reuters Francois Hollande, el líder de la oposición socialista. El diputado socialista Arnaud Montebourg tampoco estaba muy ilusionado con el proyecto. “¿Qué les hace pensar que los políticos son diferentes a la gente a la que representan?, dijo al diario Le Monde. ”No necesitamos que TF1 nos invite a una granja para que veamos lo duro que es el trabajo allí“. Pero su colega de partido y ex Ministro de Cultura Jack Lang sí está a favor de lo que él mismo considera ”una nueva aventura“. La idea le pareció ”ridícula, lamentable y caricaturesca“ al portavoz de la Liga Comunista Revolucionaria, Alain Krivine, al igual que al líder ultraderechista Jean-Marie Le Pen, quien la tildó de ”grotesca“. ”No se les verán en el baño o en pijama“ TF1 rechaza las críticas que ya acusan al programa de buscar la ”degradación“ de los políticos. ”No hay nada humillante en que un político pase dos días con una familia normal. Es su trabajo. Los espectadores no les verán en pijamas o en el baño, sí es eso lo que les preocupa“, ha defendido el Vicepresidente de la cadena, Etienne Mougeotte, quien aclaró que no habrá cámaras ocultas ni se les filmará en la ducha o mientras duermen. Eso sí, el político que se preste al juego no podrá visionar el programa antes de su difusión y mucho menos elegir a sus anfitriones. Todavía no se han dado a conocer el nombre del resto de políticos que participarán en 36 horas. Pero el Ministro de Interior Nicolas Sarkozy ya ha dejado claro que declinará la oferta si se la hicieran. ”Si eso requiere que esté fuera de mi despacho durante día y medio, ni loco lo haría“, dijo a Le Monde.