Sánchez Dragó, contra “El Gran Debate”: “Más vale honra sin Telecinco que Telecinco sin honra”
Fernando Sánchez Dragó y su hija Ayanta Barilli se convirtieron, a su pesar, en protagonistas de la información televisiva del fin de semana por su plantón a El Gran Debate poco antes de entrar en plató.
Dos días después de lo ocurrido, el escritor ha dado su versión de los hechos. Ha sido en el magacín matinal de Onda Cero Te doy mi palabra, presentado por Isabel Gemio, donde Dragó ha dicho que la entrevista que se había preparado era “una trampa”.
“Nuestros amigos nos habían advertido de que era una trampa”
“A lo largo de la semana nuestros amigos más cercanos nos habían advertido de que era una trampa. Hablé con la directora de la redacción y me dijo que la entrevista sería amistosa y que, si yo quería, me enviaba las preguntas que se iban a hacer. Nunca me las mandó”, comenzaba su relato el ensayista, en declaraciones recogidas por Periodista Digital.
“El libro es lo contrario a lo que ellos querían reflejar en sus cebos”
Ya en plena emisión del programa, Dragó comenzó a sentirse molesto con el transcurrir de acontecimientos: “Empezaron con sus trampas, con sus famosos cebos, cuando el libro es exactamente lo contrario a lo que ellos querían reflejar, una crónica familiar llena de afecto”, explicaba. “Estaba sentado en una silla y ella estaba en otra sala. Fui hacia mi hija al ver el vídeo y le dije ¿Nos vamos? Y ella me contestó que sí”.
“Más vale honra sin Telecinco que Telecinco sin honra”
“Mi hija y yo hemos pecado de ingenuidad”, decía, para explicar su decisión inicial de acudir a la tertulia de Telecinco. El escritor aseguró a Gemio que desde la cadena no le han llegado a “pedir perdón” por lo ocurrido: “Más vale honra sin Telecinco que Telecinco sin honra”.
Dragó asegura que no volverá al programa, donde ya había colaborado
El escritor ha reconocido que había visitado en otras ocasiones, y en calidad de tertuliano, El Gran Debate: “Es verdad que yo he ido a esa programa en varias ocasiones. Luego he ido como profesional, cobrando. Ahí está mi error porque he ido porque necesitaba el dinero. El error ha sido nuestro. Todos nos dijeron que era una trampa y no hicimos caso”, explica, para luego confirmar que no volverá a asistir al programa. Cabe mencionar que Dragó también ha aparecido puntualmente como invitado en otro programa de Mediaset, Cuarto Milenio.
“La gente que ve ese programa no lee libros”
Algo que ha enervado especialmente a Dragó fue la insinuación de que su plantón fue una estrategia promocional. El escritor y director de programas como Negro sobre blanco lo negó tajantemente: “Es una infamia. Primero porque la gente que ve ese programa no lee libros. Yo he ido a ir para hablar de literatura. No para hablar de cotillería de corrala”.
Ayanta Barilli también responde con dureza: “Fue una encerrona”
Al igual que Sánchez Dragó, su hija y coprotagonista involuntaria de El Gran Debate, Ayanta Barilli, ha sido tanto o más crítica con el programa. En un artículo publicado en el diario El Mundo, la actriz y presentadora del espacio radiofónico EsAmor (EsRadio) se expresa en duros términos sobre el espacio y sus responsables y trabajadores.
Barilli iniciaba su texto referenciando a la polémica en torno al antecesor de El Gran Debate en la noche del sábado en Telecinco, La Noria, por su polémica entrevista a la madre de ‘El Cuco’: “El sábado por la noche fui a un espectáculo televisivo que se llama La Noria. Ah, no, perdón, me dicen que ahora se llama El Gran Debate y que es un programa serio. Parece ser que le han cambiado el nombre para evitar el escarnio público sin renunciar al dolo privado, y así conseguir lo único que les importa: mantener las arcas llenas de un dinero que en estos tiempos a nadie le sobra”.
“Fuimos porque aseguraron que nos tratarían con respeto y responderíamos a una entrevista seria”
“Fuimos porque nos aseguraron que nos tratarían con respeto y responderíamos a una entrevista seria acerca del libro, y no a una pantomima por sorpresa basada en la interpretación grotesca y maliciosa de algunos extractos fuera de contexto”, continuaba diciendo.
La intérprete comparó el proceso de entrar en los estudios de Mediaset como un “matadero”: “Te conducen con mucha amabilidad y mucho tiento desde maquillaje hasta una sala de espera aislada, hasta que llegue el momento de lanzarte al plató y asestarte el puyazo sacrificial”. Ayanta definió la situación como una “encerrona”, y ha acusado a Jordi González y a Sandra Barneda de no haber leído el libro ni de recordar su nombre.
“Aunque ellos crean lo contrario, no todo tiene un precio”
“Nos retuvieron allí, nos imploraron para que volviéramos a salir a plató. Nos ofrecieron para ello todo lo que estaba en su mano: mil disculpas, el respeto que antes nos habían escatimado y, ya a la desesperada, hasta dinero: ”¿Quieres dinero? Te lo damos“. Aunque ellos crean lo contrario, no todo tiene un precio”, concluye Barilli.