La programación infantil es, junto con los informativos, una de las asignaturas pendientes de Telecinco, ya que se trata de dos de los pocos géneros en los que Telecinco -la cadena líder del momento- es la tercera opción de los espectadores, por detrás de TVE y Antena 3. La franja matinal de sábados y domingos es un verdadero “Talón de Aquiles” para la privada de Fuencarral desde que hace dos temporadas decidiera no renovar su contrato con la factoría Disney, contenedor que ahora emite La Primera, así como el espacio de manualidades “Art Attack”, que pasó a manos de Antena 3. En las dos últimas temporadas (2003/04 – 2004/05), Telecinco no ha conseguido plantar cara a los actuales líderes de los fines de semana, los espacios infantiles “La hora Warner” (22.5% de share y 231.000 seguidores de media en este curso) y “Zona Disney” (20.7% y 601.000) en TVE-1 y “Megatrix Club” (16.5% y 408.000) en Antena 3. La campaña 2003/04, Telecinco lanzó sin acierto “Max Clan” (14.8%), un contenedor articulado en torno a la serie británica “La tribu” tanto en la estética de sus decorados de plató como en el vestuario de sus presentadores. La ficción británica, emitida con éxito en numerosos países pero que aquí no cuajó, terminó por lastrar al programa que siempre se vio superado por la competencia. Su apuesta de esta temporada, el contenedor “Birlokus Club” (13.3% y 218.000), que el 31 de julio cumplió 100 programas en Telecinco, tampoco ha ayudado a la emisora de Fuencarral a remontar el vuelo, e incluso ha empeorado ligeramente los datos de “Max Clan” en la temporada anterior. Pero Telecinco no tira la toalla en esta franja horaria, que a partir del sábado 13 de agosto se verá reforzada con el estreno en abierto de “Summerland”, una ficción para el público adolescente ambientada en las paradisíacas playas californianas y producida por el legendario Aaron Spelling, creador de éxitos como “Embrujadas”; “Sensación de vivir” o “Melrose Place”. Su última apuesta como productor, “Summerland”, fue la serie revelación del verano pasado en EE.UU. a través del canal WB, aunque la segunda temporada (emitida esta primavera) obtuvo una audiencia más discreta. Ahora llega a Telecinco tras su paso por el canal de pago Cosmopolitan. “Summerland” sustituye a las reposiciones de “Embrujadas” “Summerland” se emitirá los sábados y domingos de 9.30 a 10.30 horas, en la franja que actualmente ocupan las reposiciones de “Embrujadas”, con un seguimiento medio este verano del 16.2% y 293.000 espectadores. A partir del lunes 8, Telecinco prescindirá del resumen matinal de “OT” y programa en su lugar un segundo capítulo de “Embrujadas”, de manera que la emisión de la serie juvenil se amplía a dos horas diarias (de 9 a 11 horas). “ Summerland” es una creación de Stephen Tolkin y la actriz Lori Loughlin (“Padres forzosos”) que cuenta cómo a la despreocupada Ava Gregory (interpretada por la propia Loughlin) la vida le tuerce el destino cuando su hermana y su cuñado mueren en un accidente automovilístico en una carretera de Kansas. De un golpe y a sus treintaitantos años, Ava tiene que abandonar su sueño de ir a París a convertirse en diseñadora de modas para encargarse de la crianza de sus tres sobrinos: Bradin, un chico de 16 años que empezará a descubrir sus habilidades sobre las olas al recibir la “inspiración” de una curvilínea instructora; Nikki, quien a sus 12 decide asumir con amargura ser la mujercita seria de la casa; y Derrick, el pequeño de 8 años que no dejará de investigar cómo rayos podrá hacer para alcanzar a sus padres en el cielo. Pero no sólo a Ava se le trastorna la vida porque los tres amigos con quienes comparte la hermosa casona en la playa tendrán que echarle una mano con los niños; estos buenos samaritanos son: Jhonny (Shawn Christian), un agente inmobiliario más solidario que la cruz roja; Jay (Ryan Kwanten), una leyenda del surf con tienda propia y mujeres a discreción; y su socia en el anhelo por convertirse en alguien importante en el mundillo del fashion, Susana (Merrin Dungey, Alias). Así, de la Kansas apacible y rural, los tres hermanitos, que apenas asimilan lo que les acaba de ocurrir, se trasladan a la seductora California, un paraíso de fiesta y cuerpos perfectos, en donde comienza un singular proceso de adaptación que a todos afecta, porque ahora el hogar de la playa es una verdadera casa de familia. Se acabó el relajo... Aunque los menores sean los más juiciosos de la partida...