A continuación, reproducimos por su interés un artículo de B. Aguirre publicado hoy en La Gaceta de los Negocios El grupo mexicano logró cerrar un acuerdo con cinco productoras españolas para crear el Grupo Audiovisual de Medios de Producción (GAMP), dando lugar al consorcio que el viernes pasado se hizo con la cuarta licencia de televisión privada analógica. Bajo el nombre de La Sexta, Televisa se ha introducido en el mercado televisivo español aportando el 40% del capital de la nueva sociedad. El 60% restante queda distribuido entre las productoras Grupo Árbol–Globomedia, Mediapro y, en menor medida, El Terrat (Andreu Buenafuente), Drive (José Manuel Lorenzo) y Bainet (Karlos Arguiñano). Pero no sólo eso. Según lo acordado por las partes, Televisa posee también una opción de compra que permitiría al gigante mexicano hacerse con el 20% de la compañía que preside Emilio Aragón. De hecho, según fuentes de la productora, está previsto que a mediados del mes de diciembre tenga lugar una reunión entre representantes de ambas partes con el fin de negociar esta posibilidad. Hay que recordar que este acuerdo se produce después de que el grupo Vocento vendiera en julio el 24% de participación en el Grupo Árbol, que se quedaron los accionistas de esta productora y que ahora podrán colocar. Al parecer, el grupo de comunicación dirigido por José Mª Bergareche optó por la venta si al final se producía la fusión entre Globomedia y Mediapro, una operación que ya sólo está pendiente del visto bueno del Servicio de la Competencia. Críticas al cuarto canal Vocento, por su parte, decidió reorganizar su área de producciones aumentando su participación hasta el 70% en BocaBoca y comprando el 30% de Videomedia. La adjudicación de la licencia a La Sexta, que deberá a comenzar a emitir tanto en analógico como en digital en seis meses y que no prevé equilibrio presupuestario hasta el quinto año, ha provocado la ira de los grupos mediáticos que han de pasar la oportunidad de hacerse con una televisión analógica en abierto. Sin embargo, el consorcio de las productoras insiste en que se mantiene la puerta abierta a posibles socios. Zeta, que negoció hasta el último momento formar parte del consorcio ganador, podría aprovechar ahora la oferta. Sin embargo, ha resultado ser uno de los grupos que con más virulencia ha criticado la decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Para ello ha echado mano del diario que edita, El Periódico de Catalunya, donde denuncia que “desde ciertas esferas de La Moncloa, las mayorías y las minorías estaban fijadas para favorecer sólo a las productoras, un favoritismo que causa estupor en otras áreas del Gobierno y del PSOE”. Asimismo, el grupo catalán reivindica que “Zeta siempre tuvo claro que no iba a estar como comparsa en ese proyecto”. Finalmente, remata que “estará en el sector audiovisual, pero no en las condiciones que traten de imponerle”. El diario El Mundo, cuya editora Unedisa participa junto con Recoletos en el digital Veo TV, también carga contra el ministro José Montilla, al que acusa de “convertir el espectro televisivo, legalmente considerado público, en un espectro ideológico concediendo las licencias a sus amigos y denegándolas a quienes considera más críticos con el poder”. Otros posibles candidatos a negociar una participación en el consorcio de La Sexta son dos gigantes de la industria audiovisual mundial, Sony Entertainment y Time Warner, que entablaron conversaciones con Globomedia interesándose en el proyecto un mes antes de conocerse el fallo del Consejo de Ministros. En cualquier caso, La Sexta pretende ser una alternativa a los canales ya existentes y en las primeras líneas esbozadas aseguran que tendrán “una programación plural en la que estén presentes todas las corrientes de opinión”. Participaciones e incompatibilidades legales La importante participación que posee la empresa de Emilio Azcárraga en La Sexta podría suponer un problema si, finalmente, sale adelante el proyecto de Ley Audiovisual. Hasta el momento, no hay límite para los operadores extranjeros presentes en un canal español, pero el texto que prepara el Gobierno prevé ciertas restricciones como que “las sociedades ajenas al Estado Económico Europeo (EEE) no podrán superar directa o indirectamente el 25% del capital”. Pero Televisa no será la única que tenga que modificar sus participaciones. La del Grupo Árbol en el canal digital promovido por Vocento, Net TV (participa a través de Pantalla Digital con el 53% del accionariado) también representa una incompatibilidad legal. Y es que la Ley de Televisión Privada de 1988 prohíbe que un radiodifusor participe, al mismo tiempo, con más del 5% en una sociedad concesionaria de televisión y en otro canal que tenga igual ámbito de cobertura y en la misma demarcación.