La TV en Cuba: la sombra de Fidel es alargada
En 1950 Cuba fue uno de los primeros países latinoamericanos en tener televisión. Tras la revolución de 1959 pasó a ser propiedad del estado y, desde 1976, dirigida por el Instituto Cubano de Radio y Televisión. En la actualidad, en la isla existen dos cadenas que emiten para todo el país: Telerebelde y Cubavisión. Parte de la programación está enfocada a fines propagandísticos y las mesas redondas debaten durante largas horas la situación política. En los informativos suele ser muy común que se traten temas sobre el ejército cubano, los grupos de mujeres y las estrellas del atletismo. La información internacional incide mucho en el aspecto “imperialista” de su vecino norteamericano y se hace especial seguimiento sobre los sucesos en Oriente Medio. Un formato que también triunfa es la telenovela, especialmente las de Brasil y Argentina. Otro detalle de la pequeña pantalla en Cuba es que no hay anuncios en los eventos deportivos. En 1999 Fidel Castro los prohibió porque empañaban la integridad de las competiciones. Además de las dos cadenas principales, Cuba tiene varias emisoras de TV regionales, conocidas como TeleCentros. La emisora Sierra Maestra es una de las mejores cadenas regionales. Tiene su propio equipo para realizar documentales y pese a contar con una tecnología bastante moderna, esta televisión tiene un sistema de distribución singular. Debido a las montañas escarpadas de la región, las copias en vídeo de los documentales a menudo se llevan a caballo a las mismas colinas que trajeron la revolución cubana. TV contra el régimen de Castro Un análisis de la televisión en este país no puede dejar de nombrar a TV Martí, una cadena financiada por el gobierno de los Estados Unidos y cuya emisión se basa en desprestigiar al régimen cubano o “transmitir informaciones objetivas,
veraces y equilibradas con el propósito de promover la democracia en Cuba“, según la versión de la propia cadena. Los resultados sobre la población de la isla no han sido los esperados. El régimen cubano ha interferido la señal y casi nadie puede lograr ver sus emisiones. En este sentido, los cubanos apodan a TV Martí No See TV.