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'La Moderna' recibió en sus tramas a Luisa Carnés, la autora de la novela en que se basa, junto a su nieta real

La Moderna ha tenido una invitada muy especial en la tarde de este miércoles 22. Se trata de Luisa Carnés, la novelista responsable de Tea Rooms: Mujeres obreras, libro en que se inspira el serial de las sobremesas de La 1.

La escritora visitará el salón de té junto a su madre para asistir a una exposición de fotografía de Celia (Carlota Baró). “Es un honor recibirla a usted y a su madre en nuestro salón. Una periodista de tanto prestigio como usted, nada más y nada menos que Luisa Carnés”, decía Fermín (Carles Sanjaime) al ver a la escritora. La visita causa un notorio revuelo en el salón de té, pues como bien se destaca es una de las escritoras más relevantes de la generación del 27 y una de las mujeres más influyentes en esos años.

Anna Cortés, actriz vista en El ministerio del tiempo, La catedral del mar o La cocinera de Castamar, ha sido la actriz elegida para dar vida a Carnés. Junto a ella, quien hacía de progenitora de Carnés era Paloma Puyol, a la postre nieta de la autora madrileña en la vida real.

Esta no es la primera vez en que La Moderna rinde tributo a la artífice de su existencia. Allá por diciembre, Luisa (Berta Castañé) le ponía a Clarita (Cosette Silguero) como ejemplo a la artista. “Si sigues estudiando podrás ser una gran escritora como Luisa Carnés”. 

Biografía de Luisa Carnés

Luisa nació el 3 de enero de 1905 en Madrid y era la mayor de seis hermanos en una familia de origen humilde: su padre era barbero y su madre y su madre ama de casa. A los once años abandonó la escuela y se convirtió en aprendiz en el taller de sombreros de su tía Petra Caballero Aparicio. Por el día trabajaba y por la noche leía y escribía sus primeros relatos. Este oficio no le duró mucho, ya que lo dejó para trabajar en el obrador de una pastelería. Esta experiencia sirvió a la escritora como inspiración para la que muchos consideran su mejor obra Tea Rooms: Mujeres obreras, publicada en 1934.

Su carrera se vio truncada en 1936 por el golpe militar que desencadenó la guerra civil. Tras la derrota del bando republicano, Carnés se exilió en México, llevando consigo únicamente sus relatos, que verán la luz ochenta años después en su antología Trece Cuentos. El 12 de marzo de 1964, a los 59 años, Carnés falleció víctima de un accidente de tráfico.

Su obra no sería debidamente reconocida hasta varias décadas después, cuando se comenzó a valorar su importancia dentro del mundo de las letras. Juan Ramón Puyol, su nieto, lleva años junto a su familia llevando a cabo una profunda labor de difusión de las obras de la escritora para que no caigan en el olvido.