Gabriel Guevara nada 'Mar afuera': “Estoy distante para personajes sexis. Tras 'Culpa mía', quiero salir de eso”
Gabriel Guevara es una de las jóvenes promesas de la ficción española. A sus 24 años ha protagonizado ya su propia saga cinematográfica –la que gira en torno a la película Culpa mía– y ha trabajado en varias series de éxito como Skam, HIT, Ni una más, Desde el mañana y Cómo mandarlo todo a la mierda. A la lista se suma desde este 14 de septiembre Mar afuera, la nueva producción de Atresplayer en la que comparte cartel con Hugo Welzel y Laura Simón.
El papel de 'chico malo' le persigue. En HIT hacía de “malotillo”, como él mismo define, y en Culpa mía se pasa de rebelde. Reconoce que se siente un poco encasillado y quiere cambiar de aires. “Últimamente estoy más distante para personajes sexis. Después de Culpa mía, quiero salir de eso”, le explica a verTele y a otros medios de comunicación desde el FesTVal de Vitoria, donde se presentó su nuevo trabajo.
De hecho, asegura que se ha “cansado un poquito” de las series juveniles, aunque no se cierra banda a ningún proyecto y entiende que ahora no le queda más remedio que hacer lo que hace: “Soy joven y me va a tocar seguir haciendo personajes juveniles”, zanja.
Su nueva serie es un drama con muchos tintes sociales. En Mar afuera interpreta a Álvaro, un chaval que acaba de ingresar en un Centro de Internamiento de Menores Infractores en el que no se achantará ante los abusos de algunos de sus compañeros. Álvaro es una “víctima” de todo lo que le rodea, “pero a medida que avanza la serie se ve que no es del todo inocente”, advierte Guevara, que aquí ha trabajado bajo las órdenes de Norberto López Amado y Rómulo Aguillaume, dos destacados directores del audiovisual español con títulos a sus espaldas como La chica invisible, El cuaderno de Sara y Las noches de Tefía. Dice que tuvo “muy buena química” con ellos y que le dejaron moldear el personaje. Y eso, añade, es clave para que se sienta cómodo en cada uno de sus proyectos porque le gusta “tener libertad a la hora de actuar”.
¿Cómo te llegó este papel? ¿Conocías la versión italiana? ¿Cómo te lo has preparado?
No la conocía, la verdad. De un día para otro me llamaron y me contaron un poquito la trama de un 'chico bien' que pasa a estar en una zona hostil encerrado con chavales peligrosos. Pensé que era algo interesante para cambiar de registro. Me llamó la atención.
¿Te ha ayudado tu experiencia en 'HIT'?
Sí, totalmente. Dentro de lo que cabe, es un formato parecido. No son delincuentes [los personajes de HIT], pero sí son niños a los que les cuesta mucho adaptarse a la autoridad, la escuela, los profesores, los padres, y van encaminados a ese tipo de vida, como los chicos de Mar afuera, que son el extremo máximo de delincuencia y hostilidad. Se sienten abandonados y perdidos, por eso hacen lo que hacen. En HIT yo hacía de malotillo, mi personaje tenía sus problemillas, pero en Mar afuera es totalmente distinto porque mi personaje es una víctima, aunque a medida que avanza la serie se ve que no es del todo inocente.
¿Qué es lo que más te sorprende de tu personaje? Álvaro viene de una buena familia, pero cae en los bajos mundos. ¿Es un cliché que un pijo acabe así?
No quería hacer el cliché de víctima total, no quería achantarme con ellos [sus compañeros del centro] porque no quería sentir impotencia a la hora de dialogar con los otros internos. Quería mostrar más carácter. Álvaro empieza siendo una víctima y, más adelante, se rebela contra todo el acoso que le han estado haciendo. También me llamaba mucho la atención que los padres de Álvaro no aceptaban la situación por la que él había pasado, aunque fuera un accidente. El padre sí apoya a su hijo y quiere salvarlo, pero la madre está en una posición más distante y no quiere asimilar la situación. Esto es un ejemplo para demostrar a muchas madres que todos cometemos errores, que somos humanos, y que hay que defender a los hijos. Por mucho que hayan pasado determinadas cosas, hay que creer en las segundas oportunidades. También de eso va la serie.
En 'HIT' hacía de malotillo, en 'Mar afuera' es totalmente distinto porque es una víctima, aunque se verá que no es del todo inocente
¿Hablaste con el equipo de la serie para no caer en ese cliché?
Sí, en eso me dejaron total libertad. Hubo muy buena química con los directores, me dejaron hacer el Álvaro que yo quería siempre y cuando siguiera el guion y las pautas que ellos me daban. Eso fue un punto muy importante para mí, me gusta tener libertad a la hora de actuar.
Eres uno de los actores emergentes con más proyección en la ficción española, ¿qué poder de decisión tienes en los proyectos que te van llegando? ¿Juegas a descartar o a involucrarte?
Me involucro mucho. Proyecto que me ponen sobre la mesa, proyecto que cojo con ganas. Me gusta mucho cambiar entre un proyecto y otro. Puedo repetir el patrón como ha pasado ahora con HIT y Mar afuera, pero ha pasado bastante tiempo desde que me solté de ese personaje anterior. Me llama mucho la atención cambiar de personaje rápido, así que cuando me llega un proyecto, lo primero que miro es si es diferente a lo anterior que he hecho.
¿Cómo vives la proyección internacional que te ha dado la saga de 'Culpa mía'?
Estoy muy feliz y muy orgulloso de todo el trabajo que hemos tenido en el equipo. Ha sido una proyección mundial muy grande y estoy muy agradecido a todos los fans que han estado ahí dándonos mucho amor. No me lo esperaba, pero ha sido así. Ha sido un proyecto muy bonito y me lo voy a llevar siempre en el corazón.
¿Hay algo negativo en toda esa exposición pública?
No. Es a lo que te expones y forma parte de tu trabajo. Lo llevo con profesionalidad. Yo estoy a lo mío, tranquilo con mi familia y amigos. No hablo más que de mis proyectos porque mi vida privada es mi vida privada.
¿Te ha ayudado la experiencia de tu madre [Marlene Morreau] para poder asimilar todo esto?
Sí. Ella y mi padre me han dado algún consejito en algún momento. Siempre me han apoyado mucho en mis decisiones. Siempre han estado ahí para alzarme más.
¿Hay algún registro en el que no te veas?
Últimamente estoy más distante para personajes sexis. Después de Culpa mía, quiero salir de eso. Pero estoy disponible para cualquier tipo de proyecto porque va a ser un reto para mí y lo voy a coger con todas las ganas.
¿Cuál es el salto que te gustaría dar? ¿Tienes ganas de dar el paso a un papel más adulto y menos juvenil?
Sí, es cierto que me he cansado un poquito de las series juveniles, pero soy joven y me va a tocar seguir haciendo personajes juveniles. Los últimos proyectos se salen un poco de ese ámbito, pero, si me toca algún personaje joven, es lo que me toca hacer ahora. ¡No voy a hacer de anciano! [ríe]
¿Cuáles son tus referentes dentro de la interpretación?
Me gusta mucho Tom Hardy a nivel de acentos, cómo trabaja sus personajes desde el alma. Sus matices, cómo camina, cómo gesticula... También me gusta mucho Christian Bale, que hace todo muy natural, todo desde la oscuridad, desde la mente. Los personajes que más me llaman la atención son los misteriosos, y creo que puedo hacer algo de ese estilo. Hay directores que me han dicho que tengo ese aire misterioso.
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