Sandra Barneda, entre 'Tentaciones', libros, Planetas y series: “Estoy recogiendo lo sembrado”

La casualidad ha querido que Sandra Barneda (Barcelona, 1975) estrene la quinta edición de La isla de las tentaciones el mismo día que su séptima novela, Las olas del tiempo perdido, llega a las librerías. La coincidencia de ambos acontecimientos, que se producen este miércoles 21 de septiembre, resume a la perfección el buen momento que a traviesa la catalana. Aunque si de presumir se trata, ella prefiere fijarse en la tierra y no tanto en el mar al que evocan los títulos mencionados. “Hay veces que siembras y veces que recoges. Y este es un momento en el que estoy recogiendo lo sembrado”, asegura durante su conversación telefónica con verTele.

A lo largo de la misma, Barneda transmite verdadera pasión por La isla de las tentaciones. Un formato que, dice, ha supuesto “un punto de inflexión” en su carrera. “El programa me ha permitido mostrar ese lado humano que a mucha gente le ha sorprendido, pero que lo siempre ha estado ahí”, comenta sobre un reality en el que no solo ejerce de presentadora, sino también de guía y apoyo para los novios y novias protagonistas, que una edición más pondrán a prueba su relación en las hogueras de República Dominicana. “Es un programa muy exigente. No solo en cuanto a grabaciones, sino también emocionalmente porque me implico, porque no me gusta ver a la gente sufrir”.

A veces, esa exigencia y ese sufrimiento se convierten en lecciones de vida. Para ella, y para todo aquel que vea el espacio de Telecinco. “Creo que poder extraer lecciones este es parte del éxito del programa”, asegura mientras se sumerge estos días en un nuevo aprendizaje: el de comprobar cómo se convierte una de sus novelas en serie de televisión. En concreto, La tierra de las mujeres, que comenzará a rodarse la próxima semana para Apple TV+ con Eva Longoria y Carmen Maura como protagonistas. “Estoy muy ilusionada. Parezco Papá Noel, cargada de regalos que me está ofreciendo la vida”, celebra la presentadora y finalista del Premio Planeta 2020.

Ha dicho Juanra Gonzalo [director general de Cuarzo Producciones] que 'La isla de las tentaciones' no se puede entender sin ti. ¿Has llegado a un punto en el que te cuesta entender tu carrera sin 'La isla de las tentaciones'?

Yo soy muy de vivir cada vez más el presente. Y el presente para mí es lo que existe, que ahora mismo es La isla de las tentaciones. Pero sí que es verdad que es un punto de inflexión en mi carrera importante. El programa me ha permitido mostrar ese lado humano que a mucha gente le ha sorprendido pero que siempre ha estado ahí, lo que pasa es que a veces, por el tipo de programas que he hecho, pues no podía mostrarlo tanto. Aquí, como el amor es uno de mis puntos débiles y La isla de las tentaciones es muy intenso, te diría que sí. Al principio fue difícil porque nunca sabes cómo te vas a adaptar a un formato, pero estoy muy honrada porque Juanra haya dicho eso. Quiere decir que estoy haciendo bien mi trabajo.

¿Has tenido unas sensaciones muy distintas desde que cogiste el avión para grabar tu primera edición a esta última?

Solo por cómo fuimos a grabarlo... Fuimos la primera producción que se iba a grabar fuera en plena pandemia, y además grabamos dos ediciones seguidas. Hablamos de situaciones distintas, porque aquella fue anómala mundialmente hablando. Recuerdo que fuimos al aeropuerto y en las pantallas solo había dos vuelos porque viajamos en mayo, llevábamos encerrados desde marzo y prácticamente acababan de abrir las fronteras. Nunca olvidaré cómo fue grabar en aquellas circunstancias, tomando todas las seguridades pero sin saber mucho. Fuimos unos valientes.

Y este verano, que hemos vuelto a grabar dos ediciones, ya conoces al equipo y todo es distinto. Pero, claro, cuando uno hace las cosas sin tanta consciencia de lo que se va a encontrar es diferente. Ya sabía que las grabaciones son duras, que todo es muy intenso, que estás prácticamente las 24 horas pendiente, que a veces duermes 4 horas y sigues grabando o que ocurre algo y te tienen que despertar... Es un programa muy exigente. No solo en cuanto a grabaciones, sino también emocionalmente porque me implico, porque no me gusta ver a la gente sufrir, porque estoy a dos metros de la gente en las hogueras, que para las parejas son muy duras. Durante la primera semana todos quieren abandonar, y te dicen que para ellos su pareja es su vida y que tienen mucho miedo de perderla.

Has descrito esta quinta edición como “muy mental”. ¿Te ha dejado un poso especial en comparación a las anteriores?

Comentaba en la rueda de prensa que las temporadas siempre me enseñan, porque en ellas se viven situaciones anómalas y de alto voltaje en la que los protagonistas están sometidos a mucha presión. Porque aunque ellos se crean que controlan el formato, al final es imposible controlar las emociones. En el momento en que te separan de tu pareja te entran todos los miedos y no sabes cómo vas a reaccionar ni cómo va a reaccionar la otra persona.

¿Crees que el público también puede extraer lecciones viendo el programa?

Sí, y creo que este es parte del éxito del programa. Todos nos reímos mucho porque está muy bien hecho y muy bien trabajado desde el humor, pero La isla de las tentaciones te da pie a hablar de cosas del mundo de la pareja que te han pasado a ti que ni siquiera tú te atreves a revelar a tus amigos. Cosas que te han pasado y que te permiten entender a este o esta participante. Y esto está muy bien. Yo tengo amigos y amigas que ven el programa con sus hijos adolescentes para hablar de sexo. Es un momento perfecto para coger a tus hijos y preguntarles qué les parece esta situación o la otra que ven en pantalla.

Al final todo depende del uso que le des a cada programa, y La isla de las tentaciones lo que permite es que personas de distintas edades y distintas generaciones puedan hablar del mundo de la pareja, del amor, de los miedos y de toda esa bomba de relojería que se nos acumula a todos cuando nos enamoramos, cuando vivimos en pareja e, incluso, cuando nos rompen el corazón.

En el programa haces un trabajo de contención para tratar de empatizar con los concursantes durante su paso por la isla. ¿Hay concursantes que te dificultan más ese trabajo que otros?

¿Sabes qué pasa? Que cada uno es demandante de cosas distintas, pero todos se sienten muy perdidos. Es curioso, porque todos creen que controlan, pero de repente descubren que no. En esta temporada no hay uno que no diga “ostia, esto es más fuerte de lo que pensaba”. Entonces, no es que me lo pongan difícil, es que con La isla de las tentaciones he aprendido que una de las primeras cosas que nos pasan es que queremos juzgar.

Haciendo una escucha activa y entendiendo por qué está actuando como está actuando, al final aprendes muchas cosas. Antes de decir “ay, mira esta”, sabes de dónde viene. Y esto lo hacemos mucho con nuestros amigos, porque a los amigos les das un poco más de cuerda. Y a mí me pasa esto con ellos, porque para ellos yo soy su referencia. Cuando se separan las parejas es real, y yo no tengo contacto con ellos, solo cuando entro en las villas o estoy en las hogueras. No tienen contacto con el exterior y los días son muy largos porque no tienen reloj, no tienen televisión y no tienen nada. El paraíso a veces se les puede convertir en un infierno.

Una vez acaba la edición y se celebra el reencuentro, ¿estás pendiente de cómo están las parejas?

Estoy muy pendiente desde que abandonan la isla, y ahora que vamos a grabar el reencuentro. Estoy pendiente de todo lo que pasa y cómo llegan a sus diferentes lugares. Porque, claro, esto es una etapa muy distinta. Ellos en la isla están en una burbuja viviendo su experiencia, pero luego llegan a casa y a ver cómo se comen todo lo que han vivido. Me fijo cómo están.

También en esta quinta edición, a la que llegaremos todos a las hogueras finales sin saber qué va a hacer ninguna de las parejas. Y esto no ha pasado en ninguna de las ediciones. Porque cuando parece que lo tienes claro pasa algo, porque hay varios giros que van ocurriendo, y no sabes ya lo que van a decir. Las hogueras finales fueron buenísimas y todos estuvimos enganchadísimos porque no sabíamos nada.

Te preguntaba también por los concursantes de pasadas ediciones. ¿Has seguido, por ejemplo, la victoria de Alejandro en 'Supervivientes' o que Lucía e Isaac van a tener un hijo en común?

Sí, porque piensa que al final les coges cariño. Me alegré del papel que hizo Alejandro en Supervivientes. Creo que se reconcilió un poco consigo mismo, y eso me alegró mucho. Que Tania le haya pedido matrimonio me parece muy cachondo porque se puso en duda su amor, y aunque el mundo de la pareja es muy complicado, ellos de momento siguen juntos. Y luego están las idas y venidas de Lucía e Isaac, que si Rosario está o no con Stiven... Me van contando cosas y estoy bastante al día. Incluso a veces ellos me escriben por redes.

Al final, tú eres un apoyo para ellos en la isla.

Sí, y además su paso por el reality les cambia la vida. Llegan de una manera a La isla de las tentaciones, pero la experiencia es tan brutal que salen de otra. Y luego algunos de ellos dan el salto a otros realities de Mediaset, que está muy bien para ellos.

A partir de ahora te vuelcas con las 'Tentaciones' y dejas atrás los debates de 'En el nombre de Rocío', que pasan a manos de Jorge Javier. A raíz de este cambio te pregunto cómo ves ahora mismo la situación de Telecinco.

No sé... No es algo que yo pueda valorar. Eso hay que preguntárselo a los que programan, a los jefes… No me atrevo a valorar.

¿Pero te preocupa que la crisis de audiencias del canal pueda afectar a 'La isla de las tentaciones'?

Eso se tendrá que valorar cuando se estrene el reality, pero lo importante es que hay un buen producto. Nos fuimos para hacer una quinta y una sexta temporada, y creo que tenemos una quinta temporada que vuelve a los orígenes. Vais a ver La isla de las tentaciones en su estado más puro, y los concursantes viviendo la experiencia de una forma alucinante. Lo que me gusta del formato es que está vivo. En ningún momento piensas que los concursantes están resabiados, y eso es lo bueno.

Estas de doble promoción, porque esta semana se estrena 'La isla de las tentaciones 5' y tu nueva novela, 'Las olas del tiempo perdido'. ¿Cómo afrontas ahora mismo tu carrera televisiva sabiendo que tienes otra carrera, la literaria, que también es muy sólida en estos momentos?

La afronto como la he afrontado siempre. El público siempre ha aceptado estas dos facetas mías, que ahora se juntan un poco más con la adaptación de La tierra de las mujeres que prepara Apple TV+. Que uno de mis libros vaya a ser una serie en una plataforma como esta, y con Eva Longoria y Carmen Maura como protagonistas, es un puntazo. Lo afronto con mucho vértigo porque creo que es algo muy importante que me ha ocurrido, al igual que ser finalista del Planeta y la nueva novela. Estoy muy ilusionada. Parezco Papá Noel, cargada de regalos que me está ofreciendo la vida.

Decías al principio que te gusta mucho vivir el momento. ¿Se puede decir, entonces, que estás viviendo tu mejor momento a nivel profesional?

Estoy en un momento muy dulce. Hay veces que siembras y veces que recoges. Y este es un momento en el que estoy recogiendo lo sembrado.