'Broad city' 2x08 Review: cuando ves porno y reconoces al actor
Por Francisco PérezFrancisco Pérez
Hay gente que nos atrae haga lo que haga y no sabemos por qué; es el magnetismo animal que desprenden. Algunas personas lo tienen y otras no. Ilana pintándose los labios de color verde y comiéndose una ostra mientras prepara el escenario para masturbarse con espejo encima incluído, no. No hay forma de que un ser humano pueda sentirse atraído por aquello. Aunque la pobre no llega a culminar su ritual porque, buscando algo de porno para acompañar el momento encuentra un vídeo de un chico que conoce.
(¡Cuidado SPOILERS!)
Buscando trabajo
Abby está decidida a cambiar sus perspectivas profesionales. Ya no quiere limpiar más vómitos en un gimnasio; aunque la primera entrevista no va del todo bien. Ilana sí tiene más suerte y consigue trabajo como niñera cuidando a Oliver, un niño de unos 10 años al que se lleva a la cafetería en la que ha quedado con Abby.
Viendo porno
Todo el mundo va a una cafetería a ver porno, ¿no? Si no, ¿qué hacen esos muchachos y muchachas con sus macs en el Starbucks durante tanto tiempo?. Ilana, tras buscar en su historial de porno, encuentra el video del chico que conocía; Kirk Steele y se lo enseña a Abby para que esta se sorprenda al ver a Trey, su jefe en el gimnasio masturbándose con dos pelotas de playa. Es un capítulo de lo más sexy...
Abby decide utilizar la baza de conocer el pasado como “estrella” del porno de su jefe para conseguir su ansiada meta de ser entrenadora en el gimnasio y le chantajea para que le deje dar la clase de kettlebell (la pesa rusa en forma de esfera y con un asa) y lo consigue, aunque solo durante quince segundos, pues lo primero que hace al entrar es romper un espejo al escapársele la pesa. Ahora necesitan 1400 dólares para reparar el espejo y que no la despidan a ella ni a su jefe porque, dado que no es una monitora autorizada, no le cubre el seguro. Obviamente, no tiene ese dinero, así que tiene que buscarlo.
Haciendo dinero
Hay dos cosas que le pueden dar pasta a Abby: su ropa y su arte. Con la primera no tiene mucha suerte pues solo consigue veinte dólares en una tienda de segunda mano por un bolso de su tía. Para vender su arte coloca un puestecito en la calle con ayuda de Ilana y Oliver y trata de vender sus ilustraciones de famosos, bueno, de las comidas favoritas de los famosos y consigue vender la friolera de DOS obras por la increíble cantidad de DOS dólares que, sumados a los veinte de la ropa hacen un total de veintidós dólares para un pago de setecientos. Yo estudié letras, pero no me salen las cuentas.
Ilana tiene que devolver a Oliver a su casa y éste le cuenta a su madre gran parte de su día y sugiere a su madre que, en vez de llevar su ropa de temporada a los caballos (así es, se la daba a sus caballos), se la de a Ilana para que la done. En vez de eso, vuelven a la tienda donde vendieron la ropa antes donde les ofrecen trece mil dólares en crédito de la tienda o novecientos en efectivo. Como necesitan el dinero, tienen que coger el efectivo, no sin antes pagar doscientos dólares por el bolso que antes había vendido por veinte.
El ascenso
Abby y Trey colocan el espejo nuevo en mitad de la noche y le comunica a Abby que al día siguiente dará una clase como entrenadora. Con los jubilados.
En el próximo capítulo de esta serie, del que podremos ver la review la semana que viene, Abby tiene que devolver un abrigo que se encuentra (es a una famosa, eso lo hace interesante) e Ilana tiene un romance que le resulta familiar.
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