Alba Flores acudió este miércoles, 26 de noviembre, a La Revuelta para presentar 'Flores para Antonio', el documental que ha hecho sobre la figura de su padre, Antonio Flores. La producción, que ya ha sido premiada en festivales, llega este fin de semana a los cines y a Movistar Plus+.
La nueva entrega del programa de TVE fue una de las más emotivas, por el contenido de lo que la invitada presentaba y hasta por los regalos que llevó. La actriz entregó a David Broncano un objeto que había estado en el piano de Lola Flores y “cuando mi abuela y mi padre murieron esto se quedó en mi habitación”.
Al desenvolverlo, el presentador exclamó: “Esto es una preciosidad. Una foto de la familia Flores al completo” mostró. Un recorte de una fotografía de una revista, con todos ellos (también Lola y Antonio) alrededor del piano y enmarcada.
Tras ello, Alba explicó cómo había nacido el documental que la había liberado: “Lo pensamos un poco juntas con mi madre. Estábamos organizando un concierto homenaje a mi padre, con sus amigos y compañeros, y empezamos a pensar que había mucho público con esa necesidad. Nos costó tomar la decisión porque para nosotras es sensible hablar de él, y pensamos en algo audiovisual, que esté para la posteridad”.
Broncano dio paso al tráiler y al regresar, el público se puso en pie aplaudiendo. “Bastante bonito, eh” dijo el presentador y Alba sonrió: “Te has emocionado un poco, te lo veo en los ojitos”, dijo la actriz.
El presentador confirmó: “Creo que es normal, porque tiene una parte de verlo como seguidor, como admirador de lo que hacía, pero hablándolo contigo de cerca, es verdad que todo el mundo empatiza con el documental de un padre que solo conociste de niña”.
Alba estuvo de acuerdo con sus palabras: “No quería que fuera una peli autorreferencial me gustan las historias universales, y no sabíamos si lo íbamos a conseguir, pero mucha gente después de ver la peli se acerca a contarme sus historias, los silencios, los duelos... estoy contenta de haber hecho esto”, confesó.
Finalmente, la invitada señaló lo liberador del ejercicio audiovisual: “Cantar canciones de mi padre siempre ha sido un bloqueo, pero después de esto me he sentido tan liberada que al final conseguí hacer una canción para él. Ahora me siento libre. Se me ha quitado un bloqueo de niña y estoy como en la adolescencia musical”.