La actriz y presentadora de televisión Ana Obregón no ha acudido hoy finalmente al plató de “Las mañanas de Cuatro”, tal y como estaba previsto, ya que se encontraba en casa con fiebre, según ha explicado ella misma a Concha García Campoy y sus colaboradores en una conversación telefónica que resumimos a continuación. Concha García Campoy: ¿Cómo te encuentras, Ana? Tenía muchas ganas de estar ahí con todos vosotros, porque sabes que te aprecio mucho y que me encanta tu programa, pero estoy en la cama con 39 y medio de fiebre. Eso sí, encantada de hablar con vosotros por teléfono todo el tiempo que queráis. Concha García Campoy: Vaya racha que llevas, ¿no, Ana? Realmente, ¿crees que estás atravesando una mala racha? Yo no creo en esas cosas, ya sabes que soy tremendamente positiva y creo que en una semana o diez días ya estaré totalmente recuperada y podré ir a veros. Concha García Campoy: Ana, cuando hablo de “mala racha”, ya sabes que me refiero a tu última serie en Antena 3. ¿Cómo interpretas tú ese fracaso? Creo que ha sido un cúmulo de muchas cosas. Ahora mismo hay una competencia brutal en televisión. Y también hay otro motivo del cual no quiero hablar. A nivel personal, me da mucha pena por el equipo, porque hay cien personas que se quedan sin trabajo. Pero a mí me ha devuelto la vida, porque suponía demasiado esfuerzo. De todas maneras, también tengo que pensar que yo he estado 23 años en televisión con audiencias altísimas. El éxito y el fracaso es el día a día de los actores, que un día pueden hacer una película muy buena, y tal vez la siguiente es muy mala. Rosa Villacastín: El análisis personal que yo hago de tu tropiezo es que “Ana y los 7” te había convertido en ídolo de los chavales de 15 años y tal vez el target de Antena 3 era más adulto. ¿Crees que te ha abandonado el público que te veía en TVE, que no se ha pasado a Antena 3? También hay que tener en cuenta que sólo se han emitido tres capítulos. El primero se lanzó en una competencia brutal contra “Hospital Central”, que no hay que olvidar que la serie de Telecinco también comenzó con un 18% de share, como la mía. Después, Antena 3 la cambió sin avisar al lunes. Hasta mi madre me decía que no se había enterado. Ese día la serie comenzó a las 10.30, después de media hora de publicidad, cuando ya todos los programas de prime time en las otras cadenas habían comenzado. Realmente yo creo que no se le ha apoyado como a otras series, como por ejemplo “Los hombres de Paco”, que también arrancó con un 14%. Y también ha habido mar de fondo del que prefiero no hablar. Gonzalo Miró: Después de este fracaso, ¿cómo enfocas tu carrera? ¿Qué proyectos o expectativas profesionales tienes en estos momentos? Lo único que quiero en estos momentos es descansar, porque la serie me ha llevado un año y medio de duro trabajo, aunque siempre digo que me voy a tomar un largo descanso y luego siempre resulta muy cortito. Ahora quiero tiempo para estar conmigo misma. Yo siempre digo que cuando una persona tiene mucho éxito, ese triunfo le lleva a la soledad, a una jaula de oro. Yo puedo decir que he conseguido el récord máximo y el mínimo en televisión, y eso te hace más humana, te acerca a la gente. Es importante pegarse un batacazo de vez en cuando, para el ego y para todo.