Los nuevos 'latin lovers' del campo llegan a Cuatro

Tras una valoración y tras recorrer todas las comunidades autónomas y visitar las 25 ferias de agricultura y ganadería más importantes de nuestro país, ya están elegidos los diez candidatos que aspiran a encontrar el amor en la cuarta temporada de Granjero busca esposa, que Cuatro estrenará próximamente.

“Con más aspirantes que nunca, un 25% más que en la pasada edición, el equipo del programa se ha decantado por diez granjeros procedentes de distintos puntos de España, muy distintos entre sí pero con un común denominador: el deseo de encontrar una pareja con la que compartir su vida”, informa la cadena en una nota.

Próximamente, los telespectadores podrán conocer a los diez candidatos en un programa especial que Cuatro emitirá como antesala de la nueva temporada del docureality.

Luján Argüelles sigue al frente

La presentadora ovetense Luján Argüelles conducirá la nueva edición de Granjero busca esposa, programa de Cuatro que cerró la tercera temporada con un share del 9,1% y una audiencia media de 1.230.000 telespectadores.

'Cibertest' de compatibiliad para encontrar a las concursantes aspirantes

Además de las cartas que todas las mujeres interesadas podrán enviar a su granjero favorito tras ver sus fotos y consultar sus perfiles en www.cuatro.com, el docureality abrirá una nueva vía de participación para las aspirantes a granjeras: el “test de compatibilidad”. A través de este cuestionario on line, las candidatas podrán pulsar su grado de afinidad con el granjero escogido y la más compatible con cada uno de ellos accederá directamente al programa.

Una vez cerrado el periodo de recepción de candidaturas, los seis granjeros que acumulen el mayor número de cartas se convertirán en los protagonistas de la cuarta temporada del programa y pasarán a la siguiente fase, en la que tendrán que tomar una difícil decisión: elegir a las dos mujeres que le acompañarán a su granja, viaje al que se sumará la “cibercandidata” más afín.

Diez granjeros decididos a poner “punto y final a su soledad”

César, 44 años (Palencia)

Alegre, vital y responsable: así se define este agricultor y ganadero palentino divorciado y padre de un hijo. Vive en una casa de campo de 110 años de antigüedad mientras se encarga de la explotación de una finca de 500 hectáreas en la que cultiva cebada, trigo y guisantes. También dedica parte de ella al negocio de la caza y atiende en su granja a 100 vacas, 2 cerdas ibéricas y diversas gallinas. Amante de la caza y del teatro, César sueña con una mujer cariñosa y sencilla que le enamore con la mirada.

Fermín, 40 años (Navarra)

Una casa aislada en medio del monte a la que sólo se puede acceder en un vehículo todoterreno es el hogar de Fermín, un ermitaño con una singular filosofía de vida: coger de la Naturaleza lo estrictamente necesario. Acostumbrado a vivir solo, desea encontrar una mujer que comparta sus ideales y con la que tomar un café mirando a la montaña. La talla de piedras, la lectura y el aprendizaje del violín son las principales aficiones de este hombre que vive sin teléfono, sin televisión y sin lavadora.

Luis, 39 años (Málaga)

Este atractivo jinete andaluz reside en una casa de campo situada dentro de una finca de 9.000 metros cuadrados. Rodeado de animales, Luis disfruta de los placeres de la vida sencilla mientras anhela compartir sus días con una mujer distinguida y que sepa adaptarse a cualquier situación. Su carácter práctico y serio en su profesión se transforma en alegría y bromas cuando se encuentra junto a sus amigos.

Fidel, 36 años (Zamora)

Trabajó durante varios años en el sector de la construcción hasta que decidió regresar a su pueblo, donde invirtió su ahorros en la adquisición de animales y maquinaria. De carácter confiado, Fidel compagina sus obligaciones como alcalde con la cría de cabras mientras espera compartir su vida junto a una mujer práctica y dispuesta a residir en el campo.

Gustavo, 37 años (Navarra)

Tras conseguir la custodia de sus tres hijos, Gustavo decidió dejar su casa y trasladarse a la de su madre para velar por el bienestar de los pequeños. Dedicado a la crianza de oveja autóctona y al cultivo de alfalfa, maíz y cebada, busca una mujer a la que le gusten los niños y con la que hacerse cargo de la educación de sus hijos.

Román, 29 años (Valladolid)

Lleva toda la vida dedicado a su profesión y al cuidado de sus padres. Ahora, este joven responsable y sensible que nunca se ha enamorado, desea hacer realidad sus grandes sueños: mantener una relación con una mujer honesta y sincera y viajar en avión.

Reside en una sencilla casa de pueblo junto a sus progenitores, al tiempo que gestiona sus propiedades: un terreno de 159 hectáreas en el que cultiva cereales y 50 cabezas de ganado.

Paco, 52 años (Teruel)

Este ganadero turolense es generoso, activo y sentimental y desea inaugurar la casa que se está construyendo en el pueblo con las candidatas que acudan a su granja. Padre de dos hijos de 20 y 22

años y dueño de 500 cabezas de ganado distribuidas en tres explotaciones, pretende encontrar una compañera fiel y honesta.

Melendi, 33 años (Asturias)

Criado en una ciudad de la cornisa cantábrica, Melendi descubrió a los 17 años que la vida de urbanita no estaba hecha para él. Tras instalarse en un pequeño pueblo de montaña junto a sus abuelos

paternos, recuperó la felicidad y las riendas de su vida. Gran apasionado de la bachata y el merengue, el ganadero aspira conocer a una mujer que le guste el campo y con la que compartir su pasión por los bailes de salón.

Joaquín, 23 años (Gerona)

Entregado por completo a su explotación agrícola, Joaquín es un joven campechano, responsable, sensato, práctico y ahorrador que vive junto a sus padres en una casa grande y antigua. Amplias tierras

de labranza, 1.000 cabezas de ganado y su maquinaria agrícola le aguardan cada mañana mientras espera encontrar una chica sencilla y simpática que comprenda su dedicación al trabajo.

Jonathan, 22 años (Cantabria)

A pesar de su juventud, Jonathan dirige junto a su hermano una explotación ganadera de 80 cabezas mientras reside con sus tíos, a quienes ayuda en su carnicería cuando es necesario. Este joven bromista, juerguista e impaciente, busca una chica madura, capaz de hacer oídos sordos a las habladurías y dispuesta a fijar su residencia en el campo.