Samanta Villar: “Me costó mucho empatizar con los paparazzi”
Samanta Villar conduce esta noche su último 21 Días en Cuatro, que se emitirá al término del partido Alemania-Australia del Mundial de Sudáfica.
La periodista dará el relevo a su sustituta al frente del programa, Adela Ucar. Juntas protagonizarán “a pachas” esta edición que estará dedicada al mundo de la fama.
Ucar convivirá con algunos rostros populares como Paulina Rubio y Colate, mientras que Villar acompañará a varios paparazzis que persiguen a estas celebridades. Además, tendrá un encontronazo con el mismísimo Bill Clinton, ex presidente de EE.UU.
“Son gente encantadora, pero me ha costado empatizar con los periodistas del corazón”, comenta a Vertele.com Samanta Villar, quien regresará a Cuatro a partir de la próxima temporada con un nuevo espacio de reportajes “que estamos terminando de perfilar”.
TITULARES DE SAMANTA VILLAR
- “Son ciclos que se cierran y era necesario dejar 21 Días”
- “Me ha costado empatizar con los paparazzis”
- “La fama es la desventaja de trabajar en televisión”
- “21 Días te implica mucho, pero no hay que perder la cabeza”
¿No le da cierta pena dejar el programa después de casi dos años?
Claro que sí. Son ciclos que se cierran y yo creo que era necesario. Quería recuperar mi vida personal, que la tenía bastante abandonada y ahora estoy disfrutando de eso, de estar en casa, cocinar, de la rutina…
¿Qué nos puede avanzar de su nuevo programa?
Aún estamos terminando de perfilar el formato, nombre, emisión…
¿Le va a exigir tanta dedicación como 21 Días
No voy a viajar tanto, o por lo menos tan seguido. Porque hasta ahora solía desconectar del mundo y volvía a él 21 días después. Esto no va a ser tan exigente en ese sentido.
Se despide de 21 Días
Me ha costado empatizar con los paparazzis. Son gente encantadora, pero el trabajo en sí, es algo que no me gusta. Los propios paparazzis reconocen que si tuvieran que pensar en la ética, no lo harían.
[VerteleVideo]
¿Qué piensa de la fama?, ¿no le hubiera gustado vivir la parte de los famosos como ha hecho Adela?
Sinceramente creo que la popularidad es el precio que tienes que pagar por hacer este tipo de trabajo. Si yo pudiera hacerlo sin que en la calle me conociera ni Dios, sería feliz. La gente se acerca siempre con gran amabilidad, pero a veces me gustaría ser anónima. Creo que es una de las desventajas de este trabajo.
¿Qué le incomoda de la fama?
Cuando voy por la calle y me gritan los niños: ¡21 días fumando porros! (Risas).
¿Cuántas veces se han acercado a usted para hacerle propuestas sobre posibles reportajes de 21 Días
¡Eso desde el primer momento! Los taxistas, por ejemplo, están locos porque se haga un 21 Días en el taxi (risas). La gente es consciente de que no es lo mismo contarlo que vivirlo y todos hacen sus propuestas.
¿Cuál ha sido el reportaje que más miedo le dio afrontar cuando se lo propusieron?
Lo de la mina fue duro. Sabíamos que íbamos a estar en condiciones duras pero no fuimos conscientes de la inseguridad física que suponía, por eso sólo bajé a la mina dos días. Nos estábamos jugando la vida y nos pareció que no podíamos arriesgarnos tanto.
Con la perspectiva que da el paso del tiempo, ¿cómo vivió su particular 21 Días
Me costó valorarlo como un incidente grave. Sabíamos que no nos iba a llevar a la cárcel. En el peor de los casos eran 2.000 euros de multa y en el mejor, lo que ocurrió finalmente, que no se encontraron indicios de delito.
¿Cree que se aprovechó la coyuntura para atacar al programa y a usted?
Puede ser, pero no me detengo a pensar esas cosas. Intento que no me afecten este tipo de ataques porque no me aportan nada.
También suscitó la polémica 21 Días
Me lo tomé como cualquier otro reportaje. Quizás tenía miedo de que nadie supiera cuales son mis apetencias sexuales ni nada por el estilo porque esa sí que es mi vida privada que no quiero que salga nunca en los medios. Este es un programa que implica mucho, pero tampoco hay que perder la cabeza.
¿Hay algún reportaje que le haya quedado por hacer?
Varios, pero algunos los hará Adela.
Su protagonismo el 21 Días ?
Eso lo dirá el tiempo, pero yo creo que no. Cuando Adela lleve 3 meses, ella será la de 21 Días. Hemos hecho 15 emisiones, no es tanto, no estoy cada día en televisión.
Parece que relativiza bastante su trabajo en la televisión, su éxito en 21 Días
Es que esto es temporal. Está claro que la popularidad te permite seguir trabajando y eso está bien. Tengo un nuevo programa porque me he hecho conocida en 21 Días. Si no hubiera funcionado, igual ahora estaría en el paro. Lo que quiero decir es que la fama no me importa. Yo siempre digo que entre famosa y rica, prefiero ser rica (risas).