Los sueldos de nuestros políticos, al descubierto con Ana Pastor
El Objetivo de Ana Pastor repasó ayer los sueldos de los políticos españoles. Con la ayuda de Inés Calderón, fueron repasando lo que cobraban por orden de poder y cercanía, empezando por el Presidente del Gobierno.
Mariano Rajoy cobra 78.000 euros al año, mucho menos que sus homólogos en Alemania (Merkel, 266.000 euros) o en Italia (Letta, 124.000 euros), pero superando al primer ministro portugués Coelho (58.000 euros) y al griego Samaras (57.000 euros).
Sin embargo, y pese a ser el número uno del Gobierno, no es el mejor pagado de la Administración central. Los ministros cobran 68.981 euros al año, y muchos secretarios de estado, por debajo de ambos en el escalafón político, han llegado a confesar que ganan más de 100.000 euros al año.
Fuera del Gobierno central, esta circunstancia se repite. Presidentes regionales cobran más que los ministros y que el Presidente, con el catalán Artur Mas a la cabeza (136.000 euros) seguido por el Lehendakari Urkullu (97.000 euros) y el madrileño Ignacio González (89.000 euros).
Xavier Trías y Ana Botella, mejor pagados que Rajoy y los ministros
Centrando el foco aún más, y pasando de las comunidades a los ayuntamientos, el programa demostró que se cobra más como alcalde que como Presidente del Gobierno, sobre todo en ciudades grandes.
El alcalde de Barcelona Xavier Trías es el mejor pagado (110.000 euros), seguido por la alcaldesa de Madrid Ana Botella (101.000 euros), el de Zaragoza Juan Alberto Belloch (91.000 euros) y la de Valencia Rita Barberá (60.000 euros, más 30.000 como parlamentaria valenciana).
Un asesor de urbanismo del Prat de Llobregat cobra lo mismo que el Presidente
Pero los sueldos astronómicos también alcanzan municipios más pequeños. El programa citó al alcalde del Prat de Llobregat, Lluis Tejedor, que cobra más de 70.000 euros al año y es el mejor pagado del país. Pero ni tan siquiera es el mejor pagado de su Ayuntamiento, ya que tiene un asesor de urbanismo que se embolsa 77.000 euros.
Para concluir su exposición, Inés Calderón denunció la falta de información sobre los sueldos de los políticos, que se pagan con los erarios públicos, incluso en instituciones que presumen de su transparencia como el Senado.