Yola Berrocal, favorita para ser nombrada “la freaky más popular del reino”
Pajas fantasma, dudosos flirteos, brujas insinceras, polvos sonoros, agresivas defensas paternalistas, posesiones diabólicas, aireados abandonos, amago de bolsazos... el Hotel que pasó del Glamour al Glam se ha salido finalmente con la suya, y seguramente en los dos términos que sus responsables esperaban: extravagancia y audiencias. Esta noche (Telecinco, 22:00h), el reality show más polémico de los últimos tiempos toca a su fin con la elección del ganador o “freaky más popular del reino”, título que se disputan Yola Berrocal y Pocholo Martínez Bordiú. La que ya hace unos años saltara a la fama del “cutre famoseo” por su supuesta relación con otro compañero de “gremio”, el padre Apeles, es la gran favorita según las encuestas de diferentes webs -oficiales y no oficiales-. Al otro lado del ring, la auténtica revelación del programa, un “descubrimiento televisivo” cuyo exagerado histrionismo le ha podido pasar factura en las últimas semanas de competición, el actualmente rebautizado “mucho Pocho”. Como en los circos romanos, el pueblo tendrá la última palabra. Con Jesús Vázquez viviendo su última pelea por dar orden y concierto a lo imposible, Hotel Glam vive hoy la última de sus galas por las que han pasado lo más variopinto de la fauna televisiva: Jorge Berrocal, Estíbaliz Sanz, Encarni Manfredi, Frank Francés, Aramís Fuster, Dinio García, Juan Miguel -otro crack en la sombra-, Israel Pita, Tamara, Elianne, Conchi Alonso, Lino Martone y Malena Gracia. Críticas y audiencias, al mismo nivel Desde su estreno el pasado 6 de marzo, del reality show de Telecinco se ha dicho de todo menos guapo. Al Hotel Glam le han tildado de zafio, casposo, soez... y que sin ningún pudor daba cobertura y fama a gente “sin oficio ni beneficio”; todavía se busca en algún medio de comunicación una crítica benigna que le hayan dedicado. Pese a su mala imagen y prensa, el reality show puede considerarse un éxito de audiencias. La gran apuesta primaveral de la cadena de Fuencarral funcionó desde un principio, al mismo tiempo que se “cargaba” al otro gran reality de la competencia, X ti. Exprimido durante algo más de tres meses, Hotel Glam le ha reportado a Telecinco durante todo este tiempo dos prime times a la semana por encima del 20% de share. En su gala de los lunes -la de las nominaciones-, su media ha sido de casi 4 millones de espectadores (3.962.000) y el 24,6% de cuota; resultado verdaderamente destacable teniendo en cuenta que este espacio intentaba sustituir con garantías a la triunfadora C.S.I.. En los especiales de los jueves -expulsión-, el registro medio ha superado esta cifra con 4.054.000 y el 26,3% del público, otro dato no menos importante puesto que se enfrentaba directamente a Cuéntame (38,8%). Su mejor registro -en el conjunto de las galas- lo obtuvo el 20 de marzo con 4.909.000 telespectadores y 32,9% de cuota, día que aprovechó ser el único espacio de entretenimiento de las tres cadenas principales debido al estallido del conflicto iraquí. Su peor registro en cuanto a espectadores lo anotó el 1 de mayo con 3.360.000 (24,4%), y en cuanto a share el 28 de abril con un 19,9% (3.393.000). En lo único que ha pinchado relativamente Hotel Glam ha sido en los resúmenes diarios de sobremesa. Este espacio de media hora de duración que se ofrecía de lunes a viernes mantuvo una buena línea en torno al 20% de share hasta mediados de mayo, coincidiendo con el estreno de La Isla de los Famosos, fecha a partir de la cual comenzó a no pasar del 16-17% de cuota, siendo retirado posteriormente el pasado 3 de junio. La audiencia media del resumen ha sido de 1.548.000 telespectadores y 18,5% de share. Con todo, hoy termina la primera y última edición de este programa inclasificable -tras las duras críticas Telecinco ni se plantea hacer una segunda entrega-, divertido para unos e infumable para otros.