Los aires de cambio soplan en La Promesa. El final de la tercera temporada ha dejado a los espectadores en shock por una muerte inesperada, provocando un antes y un después en la serie diaria de RTVE. Tras una etapa donde el dolor, las despedidas y las traiciones han inundado cada trama, la nueva tanda de capítulos llegará con cambios drásticos y una profunda metamorfosis para Curro y Manuel. Los actores que dan vida a los personajes, Xavi Lock y Arturo García Sancho, aseguran que nada volverá a ser como antes.
En verTele hablamos con ambos intérpretes, quienes insisten en que habrá respuesta a un deseo colectivo de los espectadores: ver, por fin, cómo el mal recibe su merecido. Durante la última temporada, los villanos han campado a sus anchas, condicionando el devenir de los acontecimientos. Sin embargo, los actores aseguran durante la entrevista que a los malos se les van a poner las cosas muy difíciles. Habrá enfrentamientos directos, consecuencias reales y una sensación de justicia muy necesaria.
Hasta ahora, como señalan Lock y García Sancho, las malas intenciones han gobernado La Promesa. La etapa de oscuridad dará paso a nuevos horizontes: los personajes que han sufrido en silencio comenzarán a reaccionar y a plantar cara de una vez por todas. El serial de Bambú Producciones, que se emite diariamente en La 1, arranca una transformación profunda: “Va a ser un inicio de una etapa bastante bonita”. Conviene recordar que la quinta temporada arranca este miércoles 24 de diciembre, con doble entrega especial.
¿Cómo valoráis el final de temporada de La Promesa? La muerte nos ha dejado helados…
Xavi Lock: Como bien has dicho, el final ha sido una bomba. Lo que se busca siempre es que haya giros en La Promesa que sorprendan al espectador. Este hecho va a marcar la siguiente temporada, y va a provocar que cambien tanto las tramas como los personajes. Va a ser un inicio de una etapa bastante bonita.
¿Qué pueden esperar entonces los seguidores de la próxima temporada?
Xavi: ¡Lo que viene va a ser una transformación de La Promesa y de Curro! Va a mostrar un Curro que es muy decidido, quiere recuperar lo que ha perdido y lo que le han quitado para recuperar su sitio. Las expectativas van a ser altas y la gente lo va a disfrutar. Sí que es verdad que se ha visto en esta temporada que lo que gobernaba la serie era el mal, con Lorenzo y con Leocadia. En esta temporada, Manuel y mi personaje van a poner las cosas difíciles.
Manuel es un personaje atrapado entre el deber familiar y sus deseos personales. Como Arturo, ¿has sentido algún paralelismo con Manuel? ¿Has tenido que elegir entre lo que se esperaba de ti y lo que realmente querías?
Arturo G. Sancho: Me he sentido identificado con Manuel varias veces a lo largo de mi vida. De hecho, ha habido conflictos con Manuel, más alejados o menos alejados, y en los que he podido tirar de recursos personales. No se me ha muerto mi mujer, ni un niño no nato. Pero sí que es verdad que, a veces, tienes conflictos con familiares a los que quieres y a los que no. Al final, La Promesa es una serie diaria, por tanto, las historias a veces son muy comunes y otras no tanto. Se puede encontrar muy fácilmente un paralelismo con la calidad.
Xavi: En mi caso también. Es un poco lo que ha dicho Arturo. Al final, evidentemente, no son los mismos conflictos, pero sí que encuentras matices que dices: “Me puedo encontrar aquí también”. Piensa que los conflictos que hay en La Promesa, aunque sean de la época de 1900, siguen pasando a día de hoy. Entonces, te ves reflejado. El éxito de la serie tiene que ver con eso, que el espectador se vea reflejado con los conflictos que tienen los personajes, porque dicen: “Ostras, esto me pasa a mí”, pero con las distancias de los personajes y de la historia.
Si pudierais escribir el final de vuestro personaje, ¿preferiríais un 'vivieron felices y comieron perdices' o un adiós trágico? Porque La Promesa lleva una racha…
Arturo: Feliz siempre. Lo que pasa es que la felicidad dura poco, son instantes. Hace tiempo escuché que lo que tienes que buscar es la paz y después viene la felicidad, porque si buscas la felicidad nunca la vas a encontrar. Cuando hay un final feliz… lo es hasta que vuelve a ocurrir algo que deja de tener ese final feliz. Por tanto, me encantaría un final feliz, desde luego. Pero, como bien dice la palabra, es un final. La felicidad es el fin, termina. Cuando el público vea finales felices absolutos, terminará la historia de ese personaje.
Xavi: Yo se lo voy a dejar todo a las manitas de Josep Cister. Él sabe hacer las cosas muy bien. Y sea lo que sea, va a quedar bien seguro. Yo lo dejo en sus manos.
Arturo: Todo final de temporada en esta serie ha sido un antes y un después. Se han cambiado muchas cosas. Es nuestra tercera renovación. Cuando las series empiezan en televisión, hay una temporada de seis meses que es para ver la reacción del espectador y dura menos. Esas dos primeras temporadas fueron más suaves. A partir de ahí, todas nuestras nuevas temporadas han tenido cambios.
Me encantaría un final feliz para Manuel, desde luego
¿Qué implican esos cambios de los que habláis?
Arturo: Algunos serán drásticos, otros no tanto, pero sí habrá variaciones que se noten mucho en la historia. Lo que podemos decir es que, evidentemente, la última temporada ha traído un cambio muy bestia. Al final, hablamos de guerras, de muertes, de personajes muy importantes o de salidas de nombres muy importantes en la serie. También te puedo decir que no va a haber tanta gente que se vaya en esta nueva temporada, pero sí que es cierto que va a haber muchos cambios, que las historias van a cambiar y van a coger nuevos rumbos.
Se ha pasado muy mal también, es verdad, y nadie puede asegurar que la siguiente no haya momentos también en los que los malos campen a sus anchas. Porque de eso se trata, de cómo los malos intentan llevar sus planes a cabo y cómo los buenos sobreviven a ellos. Va a haber también muchas alegrías dentro de las tristezas en esta nueva temporada y la gente se va a quedar muy contenta con esas cosas. Van a poder disfrutar en cuanto a las metamorfosis de personajes como Curro o Manuel. También por las relaciones que van a tener entre ellos, el embarazo de María Fernández, la empresa de aviación con Toño, Enora y Manuel. La gente va a poder disfrutar de muchas cosas, no va a ser todo sufrimiento esta temporada, van a cambiar muchísimas cosas. ¡Y también satisfacción! Por ejemplo, la relación de Manuel con Leocadia va a ser muy fuerte, se van a declarar la guerra mutuamente. En ello se van a ver también involucrados muchos personajes.
¿Ha llegado el momento en el que, por fin, el mal reciba su merecido?
Xavi: La gente está esperando que el mal también reciba un poquito de daño. Y yo creo que esta temporada con todos estos cambios, con todas las transformaciones de los personajes, van a derivar a eso. A los malos se les van a poner difíciles las cosas, y el público lo va a agradecer. La gente lo va a disfrutar. En cuanto a la relación familiar, Curro ya va a poner las cosas serias sobre la mesa y va a decir que “hasta aquí hemos llegado”. Mi personaje quiere recuperar lo que le han quitado injustamente. Eso tiene consecuencias y las tramas van a cambiar. Por eso decimos que La Promesa no va a ser como era.
Arturo: Exacto, ninguna trama se va a quedar como está hasta ahora. Todas las tramas van a cambiar. Van a entrar personajes nuevos y se van a crear nuevas historias. Siempre hace falta un golpe drástico, tiene que pasar algo muy fuerte para que las cosas se muevan, en la vida también, y es lo que va a pasar en esta nueva temporada. Por suerte o por desgracia, tiene que pasar algo crudo para que las cosas cambien. Las tramas se van a interrelacionar entre ellas y van a verse afectadas las unas por las otras. Y va a ir con una velocidad suave pero constante. Quiero decir con esto que puede que en la primera semana estén pasando cosas que no sean cambios drásticos como estamos acostumbrados a ver en nuestra serie, pero que la gente no se las puede perder porque después sí que van a venir cambios. Igual en la segunda semana. Si te has perdido la primera, seguramente tendrás que volver a RTVE Play y ver el capítulo porque no lo pillarás muy bien si no estás atento.
Mi personaje quiere recuperar lo que le han quitado injustamente
¿Consideráis que fue un acierto la muerte de Jana, teniendo en cuenta el enorme respaldo de los espectadores a Januel? Algunos espectadores fueron muy críticos…
Arturo: Intentamos dar todo el cariño que pudimos. Gracias a la recepción del público es mucho más fácil día a día hacerlo. Hay veces en las que compañeros y compañeras creen que tienen que tomar caminos diferentes, que es mejor hacer otras cosas o simplemente necesitan descansar. Todo es respetable. En este caso, una compañera quiso ir por otro camino. Ana [Garcés] dio vida a Jana con todo su amor y con todo su esfuerzo, pero hubo un momento en el que decidió que su camino en La Promesa terminaba ahí. Entonces, intentamos dar desde arriba, desde cabezas que piensan mucho mejor que nosotros, un final acorde al personaje. ¿Evidentemente hubo que dar ese salto? Sí, porque si algo termina, tiene que terminar.
Xavi: Era necesario crear un motor nuevo para que la serie continuase teniendo gasolina. Nosotros le dimos un amor increíble porque sabíamos que, aparte de la recepción del público, era empezar otra vez la serie con nuevas tramas. Y así como el amor... perdón.
Arturo: Con el amor con el que se creó el personaje se le tuvo que despedir. Por un lado, fue doloroso: sabíamos también que la audiencia sufría con esa historia y que quería un final feliz. Por el otro, aunque parezca cruel decirlo, que la gente sufriese tanto con ese final significa que estaban involucrados de verdad con esa historia y con la serie. Eso para nosotros es el mayor halago. ¡Aunque se pase mal! Pero cuando ves que la gente vive la serie, es el mayor regalo que podemos recibir.
¿En qué momento tomasteis conciencia de que La Promesa dejaba de ser una 'novela clásica' —o un 'culebrón' como se denominaba antaño— para convertirse en el producto estrella de RTVE?
Xavi: En mi caso ha sido poco a poco, viendo la reacción del público en las calles. Te reconocen, la gente te ve y se iluminan sus caras, cuando te comentan las tramas… En ese momento dices: “Dios, ¡cómo lo viven!”. Ahí te das cuenta de la importancia y del impacto que tiene la serie. Nosotros, desde el primer momento, queríamos alejarnos del 'culebrón'. Es decir, queríamos hacer un producto que fuese de calidad y que fuese a resaltar lo que se venía haciendo hasta ahora. Seguimos en esa línea. Intentamos dar el 100% y gracias a Dios la audiencia nos acompaña y esperemos que siga siendo así.
Arturo: ¡Que se siga produciendo esta clase de formatos dándole la mayor dignidad, que siempre la ha tenido! Pero como bien dices, aunque no sea peyorativo, sí que es verdad que siempre fue el 'culebrón'. Esto tengo que decirlo: tenemos otras series de este formato en este país que dan mucha calidad. Ponemos los estándares muy altos y que siga así. Nosotros somos la última cara y la visible, pero hay un equipo que está detrás trabajando continuamente y que, por desgracia, no se lleva ese reconocimiento. Sin ellos no sería posible.
Intentamos dar el 100% y gracias a Dios la audiencia nos acompaña
Muchas personas reniegan de sus inicios, pero, Arturo, has demostrado que hay vida fuera de Gran Hermano. Echando la vista atrás, ¿crees que el estigma de concursante te obligó a trabajar más que otros compañeros para ser respetado en la industria?
Arturo: No. He tenido la oportunidad de poder demostrar lo que yo era capaz de hacer interpretando y ese fue el mayor escollo, el mayor reto y la mayor bonificación que yo pude llegar a tener. Una persona como Josep Cister confió en mí sin importarle nada lo que yo hubiese podido hacer o dejado de hacer en el pasado cuando empecé mi carrera audiovisual con 32 años. Por lo demás, ponerle el mayor amor del mundo y que la gente pudiese ver lo que era capaz de hacer interpretando a Manuel.
Por curiosidad, no sé si alguno de los dos ha seguido esta edición de GH, que no ha terminado como se esperaba…
Arturo: La verdad que no, ¿cómo ha terminado?
Se ha cancelado por baja audiencia.
Arturo: No sé. Pues bueno, al final la audiencia decide. Claro, era la número 20 de anónimos, supongo…
Para cerrar, ¿qué le pedís a la nueva temporada de La Promesa?
Xavi: Nosotros vamos a seguir dándolo todo, que somos un equipo ambicioso. Siempre estamos buscando dar ese plus. Insisto en que esta temporada va a gustar. Los malos van a recibir, que ya toca. Lo que puedo pedir es que el público confiando en nosotros, que nosotros se lo vamos a devolver con mucho trabajo y mucho esfuerzo.
Arturo: Seguir haciéndolo con esta calidad y con estas ganas para que la gente la pueda disfrutar. Si nuestro motor hubiese sido otro, que también lo hay en esta industria, estaríamos hablando de otras cosas, pero precisamente el éxito que ha tenido esta serie para los espectadores, con el cariño y el amor con el que nos meten en sus hogares todos los días, hace que para nosotros sean muy importantes a la hora de hacer las historias y de trabajar.