Lolita Flores ajustó cuentas con Hacienda y Montoro en 'La Revuelta': “Me quitó 2 millones y tuve que vender mi casa”
Lolita Flores se convirtió en la invitada estrella de La Revuelta este martes, 18 de noviembre, para promocionar uno de sus últimos trabajos. La anécdota de la jornada se produjo cuando David Broncano planteó la pregunta clásica relacionada con el patrimonio: “¡Se me olvidaba!”. En ese preciso instante, la cantante entonó una crítica en RTVE contra Hacienda relacionada con el exministro Cristóbal Montoro: “No me va a devolver los dos millones de euros que me quitó”.
Durante la conversación, Lolita se centró en señalar al exministro durante el mandato de Mariano Rajoy: “El patrimonio lo tenía y Cristóbal Montoro se lo llevó. Me hizo dos inspecciones y tuve que vender mi casa”. Además, aprovechó para señalar que “muchos compañeros de profesión” se enfrentaron a una “caza de brujas” por parte de Hacienda: “Espero que este señor lo pague de alguna manera, aunque no me vaya a devolver los dos millones de euros que me quitó”.
Broncano hizo un ejercicio de memoria para insistir en que “mucha gente del espectáculo” se vio afectada por este tipo de inspecciones: “Había muchos asesores que decían que se podía hacer”. El presentador de La Revuelta se refirió con este comentario a una regularización puesta en marcha para evitar que actores, futbolistas y otros profesionales tributasen a través de sociedades mercantiles.
Por su parte, la cantante aprovechó para recalcar que el exministro está siendo investigado por la presunta creación de una “red de influencias” para beneficiar a ciertas empresas: “El señor Montoro se llenó muy bien los bolsillos. Está imputado. Todo ese dinero que se llevó lo desvió para otras cosas. Mis dos millones de euros deben estar por ahí en algún sitio”. Antes de concluir, Lolita se dirigió a la audiencia: “Vivo de alquiler y vivo de mi trabajo. Mi patrimonio maravilloso es mi familia”.
La regularización fiscal a la que Lolita Flores hace alusión
La polémica surgió a principios de 2013 cuando Cristóbal Montoro puso en marcha una serie de inspecciones a distintos artistas para regularizar su situación fiscal. Esto implicó que Hacienda exigiese el pago de la diferencia entre lo que habían tributado por el Impuesto de Sociedades y lo que debería haberse abonado a través del IRPF. Se consideró entonces que, si el actor es el único medio de producción, sus ingresos son rentas del trabajo y no un beneficio empresarial.
Como resultado, distintos actores y actrices dejaron de tributar precisamente a través de sociedades para facturar sus ganancias precisamente como rendimientos del trabajo o de actividades económicas a través del citado impuesto. De este modo, se intentó evitar que la administración pública pusiese en marcha futuras inspecciones que acarrearan penalizaciones.