Miguel Ángel Silvestre desveló las secuelas que arrastra del bullying: “Me despierto preguntando quién es”
Miguel Ángel Silvestre y Macarena Gómez visitaron El Hormiguero para promocionar la segunda temporada de 30 monedas, que ya tiene fecha de estreno en HBO Max.
Al sentarse, Pablo Motos recordó que el actor se había convertido en “invitado Platino” al haber acudido al programa 10 veces, por lo que dio paso a un vídeo recopilatorio de sus mejores momentos allí. La última imagen fue la del presentador y el intérprete besándose en una escena que interpretaron frente a Paula Echevarría, en 2014.
“¿Contamos la intrahistoria?” propuso Motos y así lo hicieron: “Organizamos toda la escena con Paula y Miguel, con el coche, y dijimos que estaría muy bien que se dieran un beso. Pero ella dijo que 'estaría mejor que os lo dierais vosotros dos'”. Palabras que Silvestre aplaudió: “Sabia Paula”.
A ambos les convenció la idea y lo prepararon en secreto: “No dijimos nada para que fuera sorpresa” y protagonizaron uno de los momentos más recordados de El Hormiguero.
Miguel Ángel Silvestre: “He tenido pesadillas durante años”
Motos preguntó a Silvestre por una situación de la que se había enterado, sobre un robo de unos bolsos en una tienda, que el actor atajó corriendo detrás del ladrón. El invitado lo confirmó, aunque sin estar orgulloso de ello: “No debería nadie correr detrás porque te tienes que proteger”.
Sin embargo, explicó la razón de su reacción: “De pequeño me hicieron bulliyng en el colegio, he tenido muchas pesadillas durante años, como que me pegan y no sé quien es. Me despierto muchas veces preguntando quién es. De pequeño me pegaron un grupo de niños y me generó un bloqueo ante la violencia. Un miedo. Pero si veía la violencia desde fuera, con alguien vulnerable, explotaba de forma innata. Me veía ahí”, lamentó.
Y también recordó cuándo se dio cuenta de tales secuelas: “Un día salía del cine y vi a un hombre pegando una patada a un perro. Le empujé inmediatamente. Me apartaron mis amigos y me preguntaron qué me pasaba. Les respondí que yo era ese perro. Me di cuenta ahí. Por eso salí corriendo detrás del ladrón, aunque no debería haberlo hecho”, concluyó.