De cómo las redes sociales acabaron con (una parte de) la magia de la TV y sus agencias de casting
Hace unos días, uno de los rostros más recordados de El diario de Patricia reaparecía como soltero de First Dates. Curiosidad que se convirtió en trending topic y de no ser por las redes sociales quizá hubiera pasado desapercibida.
Y es que hubo un tiempo en el que, cuando una persona aparecía en varios programas diferentes pasaba inadvertida por los espectadores, convirtiéndose en un testimonio más igual de creíble que el resto.
Pero desde que las redes llegaron a nuestras vidas, en cuanto el público reconoce una cara, esta se hace viral destapando su pasado televisivo, y creando escepticismo sobre su objetivo en la TV.
¿Por qué hay personas que se pasean por todos los programas?
Como revelaba Mariola Cubells en su Mírame tonto, muchos programas contactan con agencias de casting para encontrar perfiles que se adecuen a sus necesidades: testimonios sorprendentes, solteros especiales, jóvenes que no vean la tele, freaks...
Un recurso que no resta valor a los escogidos, a veces es todo lo contrario. A las convocatorias de las productoras suelen presentarse personas con características ya muy vistas, en cambio las agencias tienen un mayor espectro y proporcionan sujetos que aún pueden fascinar a la audiencia.
Hasta ahí todo correcto. La cuestión es que cuando uno de ellos funciona, las productoras graban su nombre en una base de datos a la que suelen recurrir cuando la necesidad aprieta y las características son similares. Aunque haya pasado mucho tiempo y sea para un programa diferente, si el sujeto está dispuesto, puede participar otra vez.
Es entonces cuando su rostro vuelve a aparecer en pantalla y, hace años, nos sonaba pero aceptábamos su nueva historia. En la actualidad, cuando alguien te resulta familiar en TV, corres a consultar Twitter y te encuentras con varios comentarios y fotografías de sus anteriores apariciones. Adiós a la magia de la tele.
¿Son testimonios menos valiosos?
Ocurrió con la jovencísima Paula, una adolescente que llegaba a 'Mujeres y Hombres y Viceversa' por primera vez como pretendienta, pero desde entonces pasó por 'First Dates', 'All you need is love' y hasta 'Quién quiere casarse con mi hijo'.
También con algunos concursantes de 'OT 2017', un tertuliano del público de 'Mad in Spain' y hasta solteros del restaurante de Cuatro que ya han caminado por muchos pasillos catódicos:
Un descubrimiento que para muchos es motivo de desazón y desencanto porque aquella figura quizá esté buscando fama y desvirtuando el objetivo del programa.
Pero la realidad es que, estos sujetos suelen ser garantía de entretenimiento y todo espectáculo necesita de concesiones de su público. Además, ellos pueden acabar viviendo la experiencia igual o más que cualquier otro “virgen” de la pantalla.
Y aunque hayamos visto uno de los “hilos” del truco, la magia de la TV siempre supera a cualquier costura (y red social).