‘Review Scandal’ 6x02: la Presidencia está en el aire

Por Paola Rojas

¡Cuidado spoilers! El que avisa no es traidor…

Otro Presidente abatido a tiros…ese es el resumen del capítulo anterior. Scandal estrenaba su sexta temporada con un golpe fuerte y directo matando a Frankie Vargas para así dejar el camino libre a sus verdaderos protagonistas. Un Cyrus Beene siempre deseoso de liderar el despacho oval, y una Mellie convencida que ha nacido para ser la Presidenta de su país. Intriga, investigaciones y un nuevo combate marcarán el desarrollo de esta temporada en la cual veremos si Liv logra su objetivo: hacer que Mellie llegue a la Casa Blanca.

La sombra de la duda

Nos están haciendo dudar y no podemos permitirlo. Si bien en el capítulo anterior estábamos completamente seguros de que Cyrus estaba detrás del asesinato de Vargas, en este episodio nos hacen cuestionárnoslo. Nos muestran a un Cyrus derrumbado, triste y sin esa maldad en su mirada que tanto le caracteriza. Pero tiene que ser él, hay un testigo que lo acusó y, además, sabemos de todo lo que es capaz Cyrus.

También nos llega la sorpresa de su proposición a Mellie. Cuando se reúne con ella le hace mostrar lo mal que está y que lo único que importa es que el país esté unido y que marche bien. Para ello, deja de lado las rencillas que los separan y le propone ser su Vicepresidenta. Puesto que pensé que Mellie cogería, pues es un buen trampolín para poder presentarse dentro de unos años de nuevo como candidata oficial. Pero no, ¡oh claro que no! Es Mellie Grant, una mujer altanera, orgullosa y guerrera. En poco más de tres frases le dice que no se va a arrodillar ante él, que no se va a mostrar como una pequeña niña agradecida. Le dice que es un asesino y que se puede ir con su oferta a otro lado.

Cuando deciden por ti

Por amor se cometen las más disparatadas locuras, solo hay que echar la vista atrás para ver todo lo que Fitz hizo en su día por Liv. Por eso, no es de extrañar que Mellie no se resista a tener un acercamiento con uno de los gladiadores de Pope, Marcus. A pesar de las advertencias de Olivia respecto a ‘mantener las rodillas cerradas’ ya que si se sumerge en una relación con un miembro de su equipo será mal visto y la tendrá distraída de su objetivo, Mellie no puede contenerse y acaba acostándose con Marcus.

Está en una nube, incluso da a entender que es la primera vez que siente amor, que todo lo que le hace sentir Marcus nunca antes lo había experimentado, ni con su ex marido Fitz. Liv reconoce esa sensación y sabe lo peligrosa que puede resultar. Por ello, decide malmeter contra Marcus y darle a entender a Mellie que es un aprovechado y que siempre busca la mejor opción para él. Todo esto metido en indirectas y risas. El típico ‘uy si me han dicho que es un mujeriego, pero bueno, tú no te preocupes que contigo será diferente…’ Y ¡boomb!, ahí está el comentario que, aunque se dice a la ligera como quien no quiere la cosa, acaba calando en nuestro ser.

Para rematar definitivamente la relación entre ambos, ya que no va a dejar que nada se interponga en su misión de llevar a Mellie a la Casa Blanca, le pide a Abby que le ofrezca ser el Jefe de Prensa, un puesto que nadie en su sano juico rechazaría. Así pues, cuando Marcus emocionado le cuenta la oferta a Mellie, ésta lo mira incrédula y (ese comentario previo que le había hecho Liv acerca de que era un trepa) dice que le aproveche su puesto, que debería quedarse junto a ella y apostar por ambos y no largarse. Ay Liv…siempre haciendo lo que sea necesario para conseguir lo que quieres. Deberían darte un Máster en manipulación… parece ser que se te ha olvidado lo que duele romper con la persona que amas.

Más que sospechas

Si en su momento Fitz decidió nombrar a Cyrus como el futuro Presidente de los Estados Unidos fue porque no le bastaban las acusaciones de Liv. Ante un hecho tan grave como el asesinato, necesitaba pruebas pero Pope y sus gladiadores solo pudieron dar con la llamada de una chica de la campaña de Vargas quien le acusaba de asesinarlo. Parece ser que esto no era suficiente ya que el FBI fue a la cabaña que explotó y donde vivía la chica en busca de pruebas y no encontraron nada.

Cenizas, ruinas y pocos objetos calcinados fue lo único que rescataron. Por ello, la jefa encargada de la investigación da por sentado que no se puede inculpar a Cyrus a falta de pruebas. Pero esto no detiene a Olivia, por supuesto que no. Hace que Hank y Quinn se hagan con ese portátil quemado como sea y que encuentren algo que demuestre que su teoría tiene razón. Tras las artimañas de Hank, consigue restaurar el disco duro donde se hallan más de 5.000 horas de grabación de la campaña. Les espera una larga búsqueda para poder encontrar algo significativo. Y, como era de esperar, así sucede. Corriendo, Olivia va al despacho val y muestra delante de Fitz, Abby, David y la Jefa del FBI un vídeo donde salen discutiendo arduamente Vargas y Cyrus. Una pelea que siembra la duda cuando Vargas amenaza a Cyrus con despedirle en cuanto acaben las campañas ya que no puede pasar por alto algo que hizo. Y ahí está, una duda razonable para poder, por lo menos, cuestionarse todo y admitir la posibilidad de que Cyrus tuviese que ver con la muerte de Vargas.