La Comunidad de Madrid entró este lunes en Fase 1 de la desescalada y La Resistencia lo celebró ampliando la asistencia de público al Teatro Arlequín donde graba sus programas. Así, el late show de Movistar+ se acogió a la normativa para volver a sentir el calor de los fans tras más de dos meses de puertas cerradas.
Con el patio de butacas de nuevo con vida, David Broncano dejó aparcados los vehículos con los que entraba al recinto durante estos meses y los cambió por un largo túnel de plástico por el que se dirigirá a partir de ahora al escenario manteniendo las distancias con los asistentes.
Tras cruzar todo el teatro de rodillas, el presentador se subió a las tablas con alegría por la nueva normalidad: “He salido como sale Alberto Garzón del despacho de Pablo Iglesias cuando entra con alguna queja”, bromeó.
Ricardo Castella fantaseó con que su compañero pudiera haberse convertido en Roberto Leal tras reptar como un gusano por el túnel, mientras que Broncano comparó la nueva entrada de plástico con “un condón roto”: “Me he sentido como un espermatozoide en un embarazo no deseado”.
Ya desde el escenario, el presentador agradeció al público su asistencia en el primer día de esta nueva normalidad, y bromeó con el aspecto que luce el patio de butacas sin sus asientos clásicos, con sillas y a menos de un tercio de su capacidad: “Parece un cumpleaños de 3º de la ESO o una junta de vecinos”.
Además, el cómico aseguró sentir la presión por ser el único espectáculo abierto en Gran Vía: “Tenemos mucha responsabilidad. El programa de hoy tendría que ser la hos..., pero hemos visto la escaleta y es la misma mierda de siempre”, comentó entre risas. La invitada de esta primera Resistencia en Fase 1 fue la actriz Sara Sálamo, que se tomó con buen humor las bromas del programa con su pareja Isco.